Barcelona solo cobra un 37% de las multas impuestas por incivismo

La ordenanza de Convivencia del Ayuntamiento de Barcelona se aprob¨® en el ¨²ltimo pleno de 2005 con el objetivo de ¡°preservar el espacio p¨²blico como un lugar de convivencia y civismo¡±. Gracias a esta regulaci¨®n, la Guardia Urbana tiene un mecanismo legal para sancionar a aquellas personas que la infringen y, de este modo, pueden multar la venta ambulante ilegal, el consumo de alcohol en la v¨ªa p¨²blica, el hacer las necesidades fisiol¨®gicas en plena calle o a los grafiteros. EL PA?S ha solicitado al Consistorio el n¨²mero de denuncias que la polic¨ªa local barcelonesa ha impuesto a ciudadanos que han vulnerado la normativa entre enero de 2018 hasta octubre de 2022. En total, han sido 227.104 denuncias por vulnerar la ordenanza. Pese a la capacidad sancionadora del Consistorio, son muy pocos ¡ª84.037, que representan el 37% de los multados¡ª los que han acabado abonando las denuncias. El importe de la multa puede oscilar desde los 100 hasta los 3.000 euros.

La conducta m¨¢s multada en este periodo de cinco a?os, en los que se incluye el periodo de la pandemia, es el consumo de bebidas alcoh¨®licas en la v¨ªa p¨²blica, sobre todo botellones. En este tiempo se han impuesto 118.707 denuncias por beber en la calle, de las que se pagaron 70.373 (el 59%). Este 2022 es el a?o que m¨¢s sanciones se han emitido por este motivo: 26.282, de las que solo se han pagado 15.489.

Otras de las actividades m¨¢s sancionadas son el top manta y los lateros. Aqu¨ª cae en picado el porcentaje de multas cobradas. Y es que, si en todo el periodo consultado se han emitido 74.527 denuncias, solo se han abonado 964 (el 1,2%). Despu¨¦s de la pandemia, y de que el PSC en 2019 asumiera el ¨¢rea de Seguridad del Ayuntamiento y comenzara a perseguir ¡ªde diferente forma¡ª a los manteros, la venta ambulante casi ha desaparecido de las calles de Barcelona. Lejos queda la imagen de la explanada de Joan de Borb¨® o el vest¨ªbulo de la estaci¨®n de Renfe de plaza de Catalunya convertido en zocos con centenares de ambulantes. En 2018 se sancionaron 28.018 veces a manteros y solo se cobraron 322 (el 1,1%), una cifra muy similar a la del a?o siguiente: 28.351 multas, pero solo 263 abonadas (0,9%). A partir de la pandemia los vendedores desaparecieron, y las denuncias cayeron. En 2020 ya solo se impusieron 6.221 sanciones y se cobraron 104 (1,6%); el a?o siguiente fueron 5.626 multas, de las que solo se abonaron 131 (2,3%). Y este a?o ya se contabilizan 6.311 denuncias, de las que solo se han cobrado 144 (el 2,2%).

La tercera conducta m¨¢s sancionada es la que tiene que ver con las necesidades fisiol¨®gicas. Y destaca porque es una en que los infractores m¨¢s abonan las multas. La ordenanza es clara: la ciudadan¨ªa no puede ¡°defecar, orinar o escupir¡± en la v¨ªa p¨²blica. Regulando esta prohibici¨®n, el Consistorio pretende proteger ¡°la salud p¨²blica y la salubridad, el derecho de disfrutar de un espacio p¨²blico y limpio no degradado¡±. Desde enero de 2018 hasta el pasado octubre la Guardia Urbana interpuso, por vulnerar esta norma, 20.790 sanciones, de las que se han pagado 10.827 (el 52%). La estad¨ªstica no discrimina qu¨¦ tipo de necesidad fisiol¨®gica ha sido la m¨¢s castigada. El a?o que m¨¢s denuncias se emitieron fue en 2018 (6.145) y el que menos fue el a?o del confinamiento (2020), con 1.949.

La conducta m¨¢s multada en este periodo de cinco a?os, en los que se incluye el periodo de la pandemia, es el consumo de bebidas alcoh¨®licas en la v¨ªa p¨²blica, sobre todo botellones.

Las pancartas, r¨®tulos y adhesivos son los protagonistas del cuarto tipo de sanciones. La normativa exige que solo se coloquen estos carteles en lugares habilitados, y nunca en dependencias municipales (a no ser que se tengan las autorizaciones para colocarlas). Cuando la pancarta o pegatina se ponga en un espacio privado sin la autorizaci¨®n del due?o tambi¨¦n se incurre en la ilegalidad que marca la ordenanza. Esta norma tambi¨¦n proh¨ªbe retirar pancartas o anuncios del espacio p¨²blico, colocar publicidad en los cristales de los coches o dejar publicidad comercial fuera de los buzones. En el periodo estudiado se han impuesto 4.976 denuncias por vulnerar estas prohibiciones. Y solo se pagaron 802 denuncias (el 16%).

En quinta posici¨®n se encuentra la prestaci¨®n de servicios no autorizados en el espacio p¨²blico (tarot, videncia, masajes o tatuajes). En este ¨¢mbito, se han emitido 4.258 multas en cinco a?os, pero solo se han cobrado 83 (1,9%). La sexta actitud que m¨¢s se sanciona es pintar o hacer grafitis en la v¨ªa p¨²blica. Desde 2018 solo se han impuesto 1.441 sanciones. La Guardia Urbana siempre alega que es complicado interceptar in fraganti a los autores de las pintadas, y de ah¨ª que la cifra sean tan baja. Con todo, s¨ª que tiene un alto ¨ªndice de cobro: un 49%, que se traduce en 706.

Algunas conductas que llevan a cabo las personas sin hogar tambi¨¦n son sancionadas, sobre todo si son organizadas por grupos, acosan a la ciudadan¨ªa u obstaculizan el paso. Tampoco se puede pedir limosna en los sem¨¢foros, ni limpiar parabrisas y est¨¢ prohibido utilizar menores o discapacitados para ejercer la mendicidad. En cinco a?os se han impuesto 852 denuncias, de las que solo se han cobrado 17 (1,9%). Algo parecido pasa con el ofrecimiento y demanda de servicios sexuales. Bajo este ep¨ªgrafe se han denunciado a 118 personas; solo 28 han pagado (23,7%). La conducta que menos ha castigado la Guardia Urbana es la que hace referencia a las apuestas en la v¨ªa p¨²blica: solo cinco multas. Ninguna se ha cobrado.

Riesgo de embargo

El Ayuntamiento de Barcelona cobra el 37% de las denuncias y, por tanto, parece que la imposici¨®n de sanciones es una herramienta poco ¨²til. Una portavoz del Consistorio defiende el Instituto Municipal de Hacienda ha iniciado una ¡°v¨ªa de cobro ejecutiva¡± para el monto del 63% de denuncias que no ha ingresado. Seg¨²n la portavoz, se env¨ªa una nueva denuncia a los multados donde se les aplica un 10% de recargo en el importe (dependiendo de la multa oscila de 100 a 3.000 euros). Si el denunciado sigue sin pagar ¡°se le embargar¨¢n los bienes y derechos y se le cobrar¨¢ un 20% de recargo y los intereses de demora¡±.

Esos embargos garantizan que si la persona sancionada reside en Barcelona se aplican directamente. Y si est¨¢ censada en otro municipio, se activa un convenio con la Agencia Tributaria Catalana para que se realice el cobro. ¡°Una ¨²ltima posibilidad es la Agencia Tributaria estatal, a la que trasladamos la deuda de las personas para que se le embargue en caso de que se le tenga que hacer la devoluci¨®n de un impuesto como la renta o el IVA¡±, dice la misma fuente, pese a no tener estad¨ªsticas de cu¨¢ntas de las denuncias acaban cobr¨¢ndose por estas v¨ªas.

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