Bego?a G¨®mez defiende la colaboraci¨®n entre empresas y Tercer Sector para alcanzar objetivos sociales

La colaboraci¨®n entre empresas y Tercer Sector debe superar la donaci¨®n puntual, el acto filantr¨®pico ¨²nico, para enfocarse hacia una alianza estrat¨¦gica. ?sta fue una de las tesis sostenidas por Bego?a G¨®mez, directora de la C¨¢tedra Extraordinaria de Transformaci¨®n Social Competitiva de la Complutense de Madrid, en el foro social que organiza la Fundaci¨® Pere Tarr¨¦s con la participaci¨®n de EL PA?S.

¡°El Tercer Sector debe dar respuesta a problemas cada vez m¨¢s complejos, de mayor envergadura, y para ello debe buscar aliados que lo acompa?en, compartiendo objetivos, a medio y largo plazo¡±, sostuvo G¨®mez. La ponente suministr¨® algunos datos sobre el potencial del Tercer Sector en Espa?a: el n¨²mero de organizaciones ha crecido y se ha especializado. En total hay unas 350.000 y es un sector transformador en el que trabajan 1.300.000 personas. Hay 4,3 millones de ciudadanos que colaboran de forma recurrente con las entidades, pero apenas 11.000 empresas lo hacen. Estas organizaciones que antes del 2008 viv¨ªan principalmente de los fondos p¨²blicos han incrementado la colaboraci¨®n con el sector privado. Antes eran b¨¢sicamente asistencialistas y ahora son, y han de ser, m¨¢s eficaces, m¨¢s profesionalizadas y con proyectos de mayor escala. Los objetivos de desarrollo sostenible que fij¨® la ONU en el 2015 interesan a las empresas porque la sostenibilidad es un valor cada vez m¨¢s apreciado en los mercados. Las empresas pueden hallar en el Tercer Sector la experticia en estos asuntos. ¡°Ah¨ª hay un puente para el encuentro con el sector privado. El Tercer Sector engloba muchas ¨¢reas, desde la cooperaci¨®n para el desarrollo a la lucha contra las desigualdades sociales o de g¨¦nero¡­¡±¡±.

G¨®mez aconsej¨® a las organizaciones sociales orientarse hacia la donaci¨®n recurrente, no puntal. ¡°Para tejer con la sociedad soluciones a los desaf¨ªos planteados es importante la fidelizaci¨®n de los socios. En el caso de los individuales, acostumbran a ser longevos, de entre 5 a 8 a?os. Tambi¨¦n las empresas pueden alcanzar compromisos de larga duraci¨®n¡±. Se trata de alianzas estrat¨¦gicas cocreando con las empresas los proyectos duraderos que se quiera afrontar.

El hecho de que las organizaciones del Tercer Sector atiendan a necesidades sociales conduce, a veces, a una visi¨®n ang¨¦lica de c¨®mo deben organizarse. Y, sin embargo, es fundamental una sabidur¨ªa en la gesti¨®n. G¨®mez esboz¨® algunos retos como el de la comunicaci¨®n, generar econom¨ªas de escala, medir el impacto de sus intervenciones (como hacen las empresas) ¡­ ¡°Las grandes empresas tienen que cumplir determinados par¨¢metros de derechos humanos y tambi¨¦n debe hacerlo su cadena de suministros. Una gran empresa puede que trabaje con cien proveedores. Ah¨ª tiene el Tercer Sector cien puertas a las que llamar¡±. Tambi¨¦n, prosigui¨®, las grandes y peque?as empresas obtienen retornos por estas conductas que generan un impacto social apreciable y una mejora de reputaci¨®n. En definitiva, se trata de consolidar un ecosistema de organizaciones y empresas, diferentes agentes alineados en un objetivo social, que aporten inteligencia colectiva a los proyectos. Y ello, en una sociedad donde crezca el n¨²mero de ciudadanos no ¨²nicamente donantes¡­ sino activistas.

La ponente fue presentada por Jos¨¦ Mar¨ªa Torres, presidente de Conpymes. Torres defendi¨® la necesidad de que el Tercer Sector tenga ¨¦xito en sus acciones, que son un beneficio para la sociedad. Y para obtener los recursos suficientes, dijo, es necesario incorporar nuevas estrategias.

Puedes seguir a EL PA?S Catalunya en Facebook y Twitter, o apuntarte aqu¨ª para recibir nuestra newsletter semanal