Aragon¨¨s sacude el tablero pol¨ªtico espa?ol con el adelanto electoral en Catalu?a
Los comicios del 12 de mayo impactan sobre los planes del Gobierno con los Presupuestos y llegan con la inc¨®gnita pendiente de la aplicaci¨®n de la amnist¨ªa a Puigdemont
Las fichas del tablero pol¨ªtico espa?ol recibieron este mi¨¦rcoles una nueva sacudida desde Catalu?a, y no por algo ya de por s¨ª volc¨¢nico, como es la ley de amnist¨ªa, que se vota este jueves en el Congreso. En un nuevo giro imprevisto, el presidente de la Generalitat, Pere Aragon¨¨s, convoc¨® elecciones anticipadas para el 12 de mayo tras quedarse sin mayor¨ªa para llevar adelante la ley de Presupuestos. Lo hizo este mi¨¦rcoles en un alarde de dar un golpe de autoridad encima de la mesa y en un intento de reflotar a su partido, Esquerra Republicana, an¨¦mico en las encuestas pese a controlar en solitario la Generalitat y compartir con el resto de partidos nacionalistas e independentistas la llave de la gobernabilidad de Espa?a.
Catalu?a vuelve as¨ª a una situaci¨®n de incertidumbre de la mano, precisamente, de un presidente que ha hecho bandera de querer dar previsibilidad y certezas a una Catalu?a que todav¨ªa se recupera de las cicatrices de 10 a?os de proceso independentista fallido. Aragon¨¨s justific¨® la convocatoria electoral con el argumento de que no se pueden ofrecer certezas sin unos Presupuestos aprobados en tiempo y forma. Y eso que ERC hab¨ªa conseguido un acuerdo con los socialistas de Salvador Illa para llevarlos adelante. Solo le faltaban dos votos, que el guion dec¨ªa que llegar¨ªan de los comunes, por aquello de que si ERC votaba los Presupuestos de Pedro S¨¢nchez y Yolanda D¨ªaz, el referente de Sumar en Catalu?a har¨ªa lo propio en la Generalitat. No fue as¨ª tras enrocarse los comunes en que no pod¨ªan dar v¨ªa libre a unos Presupuestos de Aragon¨¨s mientras este no renunciara a un proyecto extrapresupuestario pero de gran calibre ideol¨®gico, como la autorizaci¨®n de un megacasino junto al parque tem¨¢tico Port Aventura, en Tarragona. ¡°Las l¨ªneas rojas y los bloqueos de unos a otros han llevado a que los Presupuestos de la Generalitat con m¨¢s recursos de la historia hayan sido rechazados¡±, lament¨® el president en una comparecencia solemne en el Palau de la Generalitat. Ante ese escenario de bloqueo, el jefe del Govern defendi¨® unas nuevas elecciones y as¨ª ¡°hacer avanzar al pa¨ªs sin inmovilismos¡±.
Pero los inmovilismos que Aragon¨¨s dijo querer sortear se instalar¨¢n ahora inevitablemente en el resto del panorama pol¨ªtico. La primera consecuencia es que Catalu?a no tendr¨¢ Presupuestos este a?o, pese a encontrarse en una situaci¨®n de emergencia por sequ¨ªa, con decenas de obras pendientes y con urgencias de todo tipo en la sanidad y educaci¨®n. Y eso que las cuentas inclu¨ªan 2.400 millones extra en inversiones que, o no ver¨¢n la luz o lo har¨¢n a trompicones a base de decretos y extensiones de cr¨¦dito. El Gobierno central tambi¨¦n se queda sin Presupuestos. El presidente Pedro S¨¢nchez ya dio la orden ayer por la tarde de interrumpir los trabajos para elaborar las cuentas de 2024 y comenzar a preparar las de 2025. Con sus socios catalanes y vascos a la gresca por sendas elecciones en sus respectivos feudos, el equilibrio se antojaba imposible. Tambi¨¦n en Barcelona habr¨¢ consecuencias. El socialista Jaume Collboni tendr¨¢ que esperar si quiere incorporar a ERC a su gobierno municipal, como apuntaban todos los movimientos de los ¨²ltimos d¨ªas. ¡°Todo queda interrumpido¡±, abundaron ayer fuentes pr¨®ximas al presidente de la Generalitat.
Lo cierto es que Aragon¨¨s convoca elecciones anticipadas pese a haberlo negado hasta el pasado domingo, tambi¨¦n en una entrevista en EL PA?S. Y lo hace en un momento que, cree, es el m¨¢s favorable para su partido dentro lo complicado de la situaci¨®n. Pese a sus altibajos, ERC puede lucir el trofeo de la Generalitat y sus rivales directos est¨¢n inmersos en problemas m¨¢s o menos graves. El PSC, gran ganador del ¨²ltimo ciclo electoral en Catalu?a, tiene que lidiar con una cierta desafecci¨®n de sus votantes por el desgaste de la amnist¨ªa y su l¨ªder, Salvador Illa, tendr¨¢ que defenderse de acusaciones ¡ªpor ahora poco s¨®lidas¡ª de estar al corriente de algunas de las artima?as de la trama liderada por Koldo Garc¨ªa en el caso de las mascarillas. El rival independentista de ERC, Junts, est¨¢ sin candidato formal, pese a que el secretario general del partido, Jordi Turull, se?al¨® este mi¨¦rcoles a Carles Puigdemont como candidato y este se dej¨® querer sin aclarar nada al respecto. ¡°Con el calendario electoral es evidente que podr¨¦ estar presente en el debate de investidura, y me har¨ªa ilusi¨®n estar all¨ª¡±, dijo Puigdemont, sin concretar si asistir¨ªa como p¨²blico o como diputado o eventual candidato a la presidencia de la Generalitat
La inc¨®gnita Puigdemont
La gran inc¨®gnita, sin embargo, sigue siendo si los tiempos de la pol¨ªtica encajar¨¢n con los de los jueces y si Puigdemont podr¨¢ pisar, sin riesgo a ser detenido, el Parlamento de Catalu?a cuando a principios de junio tenga que constituirse la c¨¢mara para, posteriormente, votar al presidente de la Generalitat. Puigdemont sostiene que s¨ª ser¨¢ posible, pero ERC lo duda mucho y el partido que los votantes independentistas no aguantar¨ªan otra campa?a en la que Puigdemont o su entorno prometan sin una base legal s¨®lida que volver¨¢ a Catalu?a en tiempo y forma para asumir una eventual presidencia de la Generalitat. ¡°Probablemente, Puigdemont no podr¨¢ ser un candidato efectivo¡±, resumen en el entorno de Pere Aragon¨¨s.
El cuarto partido en discordia, los comunes, podr¨¢ testear si su nueva estrategia de oposici¨®n dura tiene resultados tras tumbar unas cuentas expansivas y haber perdido el pasado mayo su gran escaparate, que era la Alcald¨ªa de Barcelona de Ada Colau. Tanto ERC como el PSC se?alan a los comunes como un partido ¡°irresponsable¡± que no ha estado a la altura de la situaci¨®n y que pone en riesgo la propia estabilidad del Gobierno de coalici¨®n del PSOE y Sumar al impedir que tenga Presupuestos este a?o. Yolanda D¨ªaz, que contact¨® directamente con Aragon¨¨s para intentar salvar la situaci¨®n, no logr¨® que su partido hermano en Catalu?a, los comunes, cambiara de opini¨®n sobre las cuentas catalanas. En el Palau de la Generalitat son especialmente cr¨ªticos con el papel de D¨ªaz, ya que consideran que ha confundido su voluntad y su compromiso de no interferir en las decisiones de los comunes con una pol¨ªtica de brazos ca¨ªdos que no solo lastra la pol¨ªtica catalana sino tambi¨¦n, como se ha visto, los planes del Gobierno del que forma parte. ¡°Es una gran irresponsabilidad¡±, insisten estas fuentes. Tambi¨¦n se?alan directamente a Ada Colau: ¡°Barcelona ha tenido mucha influencia en todo lo que ha pasado¡±. Esto significa que al haber perdido Colau su gran escaparate de la Alcald¨ªa de la capital catalana, los alicientes de los comunes para llegar a acuerdos en el Parlament se han reducido notablemente y para Colau en particular, sin unos Presupuestos que aprobar en el Ayuntamiento de Barcelona, ya no hab¨ªa inter¨¦s en pactar nada en la c¨¢mara catalana.
Pese a que el anuncio de la convocatoria electoral en Catalu?a no lleg¨® hasta pasadas las cinco de la tarde de este mi¨¦rcoles, llevaba cocin¨¢ndose desde hac¨ªa 48 horas en los despachos de la Generalitat. La negociaci¨®n para intentar que el megacasino Hard Rock interfiriera en las cuentas comenz¨® a descarrilar definitivamente el pasado jueves, cuando los comunes dijeron claramente que no habr¨ªa cambio de posici¨®n en su rechazo al proyecto. El pasado domingo, tras apuntar Aragon¨¨s en EL PA?S que los Presupuestos del Gobierno central tambi¨¦n pod¨ªan descarrilar, los comunes se reafirmaron en su postura, lo que llev¨® al president a activar el plan electoral.
El salto cualitativo del pasado domingo fue que el rechazo frontal al Hard Rock ya no ven¨ªa solo de la l¨ªder de los comunes en Catalu?a, J¨¦ssica Albiach, sino tambi¨¦n del representante de este espacio pol¨ªtico en el Gobierno, Ernest Urtasun, ministro de Cultura. En un acto de partido, Urtasun dijo que Catalu?a no pod¨ªa fiar la recuperaci¨®n posterior al proc¨¦s a proyectos ¡°desarrollistas¡±. Fue la gota que colm¨® el vaso en el Palau de la Generalitat. Este desencuentro entre los comunes y ERC deja seriamente tocada la opci¨®n de un gobierno tripartito de izquierdas en Catalu?a, con ERC, el PSC y los comunes, que la formaci¨®n de Ada Colau siempre ha reclamado.
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