Boom de los productos menstruales: el 22% de las catalanas activan la forma para pedir uno en la farmacia

Nunca un problema inform¨¢tico ha sido tan celebrado entre los miembros de un gobierno como el que sufri¨® la aplicaci¨®n La Meva Salut (el espacio sanitario digital de los usuarios) el pasado 4 de marzo por la ma?ana. Recibi¨® tantas visitas simult¨¢neas, miles de accesos por segundo, que se colaps¨®. No se pod¨ªa acceder. Y aquello eran parad¨®jicamente buenas noticias. Hac¨ªa apenas unas horas que el Departamento de Igualdad hab¨ªa activado en la aplicaci¨®n la posibilidad de descargarse el QR necesario para recoger un producto menstrual reutilizable gratuito en las farmacias. Un mes y medio despu¨¦s, m¨¢s de 313.000 mujeres (un 12% de las 2,5 millones de personas menstruantes en Catalu?a) han obtenido una copa, unas bragas o una compresa sostenibles, seg¨²n datos del Departamento de Igualdad, cuando la consejer¨ªa pretend¨ªa alcanzar esta cifra a finales de 2024.

Sin precedentes similares en Europa y con un presupuesto de 8,5 millones de euros, la campa?a La Meva Regla, les Meves Regles normaliza la realidad menstrual de las mujeres y probablemente se ha situado entre una de las propuestas del Govern m¨¢s destacadas de esta legislatura. ¡°No sab¨ªamos c¨®mo se recibir¨ªa, pero desde el primer d¨ªa ya vimos que hab¨ªa mucho inter¨¦s de la gente¡±, recuerda la secretaria general de la consejer¨ªa, Georgina Oliva. ¡°Quer¨ªamos plantear el debate p¨²blico sobre qu¨¦ pasa a las mujeres con su menstruaci¨®n. No se hablaba¡±, a?ade. ¡°Nos dicen c¨®mo comportarnos con la regla, pero hay cosas como el dolor y otras ideas asociadas que no se planteaban¡±.

Hasta el 11 de abril, seg¨²n los datos ofrecidos por Igualdad, se han dispensado 174.000 bragas (56%), 101.000 copas (32%) y 38.000 compresas (12%). Y las cifras crecer¨¢n porque 560.000 personas (el 22% de la poblaci¨®n menstruante) se han descargado el QR necesario para recoger un producto en una farmacia, incluyendo las que ya lo han hecho. Las elecciones han sorprendido a la propia consejer¨ªa porque, comparte Oliva, la previsi¨®n no era que las bragas fueran el producto estrella. ¡°Estamos analizando las cifras porque pens¨¢bamos que todo el mundo buscar¨ªa las copas¡±. Los responsables consideran que las usuarias que primero se han personado en las farmacias son aquellas m¨¢s familiarizadas con los productos reutilizables y que, si en su mayor¨ªa ya cuentan con una copa, ahora quer¨ªan probar otras propuestas. ¡°No ten¨ªamos referentes y fuimos un poco a ciegas¡± en las previsiones, admite Oliva.

Tras un mes y medio de campa?a, los primeros an¨¢lisis de la recogida en las farmacias exponen que las copas predominan entre las mujeres m¨¢s j¨®venes de entre 17 y 24 a?os, pero su uso es muy menor entre las adolescentes de entre 10 y 13 a?os y las mujeres de m¨¢s de 50 a?os. En estos colectivos el uso mayoritario es el de las bragas de tela. Las tallas M son las reclamadas.

El proyecto empez¨® a gestarse en una reuni¨®n en el Palau de la Generalitat en diciembre de 2022 entre miembros del Ejecutivo catal¨¢n (ya sin Junts) y expertos en materia feminista. La intenci¨®n era implementar los productos menstruales reutilizables entre la poblaci¨®n para garantizar la ¡°equidad menstrual¡±, y buscaron cu¨¢l ser¨ªa el mejor punto de distribuci¨®n: consideraron los ambulatorios, los centros de atenci¨®n a la salud sexual y reproductiva (Assir) e incluso los supermercados, pero ninguno se adaptaba tanto a lo que buscaban como las farmacias. ¡°Son agentes de salud, ofrecen una personalizaci¨®n y est¨¢n a menos de 15 minutos a pie en buena parte del territorio¡±, defiende la secretaria general.

La campa?a tambi¨¦n est¨¢ dirigida a los alumnos de instituto. El Departamento realiza desde hace un par de a?os formaciones sobre materia menstrual y reparte gratuitamente productos reutilizables en los institutos catalanes. Su ejecuci¨®n, sin embargo, ha sido mejorable porque muchas de las intervenciones de las enfermeras y las comadronas se realizaron mucho antes de que las adolescentes obtuvieran los kits. Lo que se aprend¨ªa en el aula sobre c¨®mo introducirse y utilizar la copa, por ejemplo, no pod¨ªa practicarse en casa por falta de muestras. ¡°Fue un problema log¨ªstico¡±, responde Oliva. ¡°El producto lleg¨® m¨¢s tarde de lo previsto y el encargo de las formaciones estaban pautadas. Ocurri¨® en algunos casos, pero siempre hab¨ªa una muestra para exponer a los alumnos¡±, insiste.

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