El Govern de ERC acelera el proceso expr¨¦s para nombrar un ¡®major¡¯ de los Mossos antes de las elecciones

El Gobierno de ERC no quiere abandonar el Gobierno de la Generalitat sin dejar al menos muy bien encaminada la selecci¨®n del candidato que ocupar¨¢ el m¨¢ximo rango de los Mossos, el de major, y que est¨¢ reservado al jefe del cuerpo. Una plaza pensada para el actual responsable de los Mossos, el comisario Eduard Sallent, y que fue sacada a concurso de manera precipitada despu¨¦s de que el presidente, Pere Aragon¨¨s, anunciase elecciones por la falta de apoyo para los presupuestos. La direcci¨®n de la polic¨ªa ha publicado este martes en su intranet que el viernes, dos d¨ªas antes de que se celebren las elecciones, se llevar¨¢n a cabo las entrevistas a los dos ¨²nicos candidatos a la plaza de mayor: Sallent y la comisaria Al¨ªcia Moriana, que de manera sorpresiva present¨® su candidatura a una plaza que supuestamente ya tiene due?o. En la actualidad, solo hay un major en los Mossos, Josep Llu¨ªs Trapero, que no ejerce como mando del cuerpo despu¨¦s de ser cesado por el consejero Joan Ignasi Elena.

El proceso para convocar una nueva plaza de major -la norma prev¨¦ que pueda haber dos majors en los Mossos- se anunci¨® el pasado 6 de marzo. En una reuni¨®n con los m¨¢ximos mandos del cuerpo, el director de la polic¨ªa catalana, Pere Ferrer, comunic¨® que se llevar¨ªa a cabo concurso, sin que nadie ocultase que pretend¨ªa ascender al actual jefe, el comisario Sallent, al m¨¢ximo rango existente en los Mossos. El proceso administrativo ten¨ªa margen todav¨ªa, ya que la legislatura de Aragon¨¨s no se acababa hasta febrero de 2025, y el presidente hab¨ªa expresado de manera reiterada su deseo de agotar los cuatro a?os. Pero el guion gir¨® de manera inesperada el 13 de marzo, cuando Aragon¨¨s no logr¨® aprobar los presupuestos y anunci¨® la convocatoria de elecciones para el 12 de mayo.

El director de la polic¨ªa decidi¨® entonces, para sorpresa de parte de los mandos del cuerpo, acelerar el proceso, para tener tiempo de nombrar al major con el actual Gobierno, aunque fuese en funciones. Eso supon¨ªa blindar la figura de Sallent ante un posible nuevo partido al frente de la Generalitat, que podr¨ªa cambiar al jefe de los Mossos, pero en todo caso no podr¨ªa retirar el gal¨®n de m¨¢xima autoridad a Sallent, lo que limita los puestos de trabajo a los que puede ser destinado. El 18 de marzo el presidente firm¨® la convocatoria de elecciones, y un d¨ªa despu¨¦s el Diario Oficial de la Generalitat (DOGC) public¨® el anunci¨® de la convocatoria para cubrir una nueva plaza de major. Desde entonces, dos sindicatos la han recurrido a los tribunales y una comisar¨ªa ha tenido la osad¨ªa de presentar su candidatura. Nadie lo hizo cuando el rango de major sali¨® a concurso en 2017 para ascender a Trapero.

La nueva convocatoria este martes de las entrevistas, que llevar¨¢ a cabo el todav¨ªa director general, ha sentado mal en parte de la estructura del cuerpo. ¡°?C¨®mo un gobierno que seguramente no gobernar¨¢ puede decidir algo as¨ª¡±, lamentan fuentes del cuerpo, sobre la aceleraci¨®n del proceso. ¡°Es una verg¨¹enza¡±, a?aden. En los ¨²ltimos a?os, los Mossos han entrado en las mismas din¨¢micas que la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil, en las que el m¨¢ximo jefe policial del cuerpo cambia con cada nuevo Gobierno. Adem¨¢s, el major no puede estar a las ¨®rdenes de ning¨²n comisario, y supone de facto apartar a esas personas de la estructura policial. ¡°Tendremos a otro mayor haciendo fotocopias¡±, lamentan, sobre el arrinconamiento que ha supuesto el cese de Trapero, destinado a la Divisi¨®n de Evaluaci¨®n de Sistemas (DAS) de los Mossos.

El futuro del concurso es todav¨ªa incierto. El major lo elige el director de la polic¨ªa, de manera discrecional. En la convocatoria de la plaza ni siquiera constan unos requisitos concretos necesarios, ni tan solo la entrevista que se ha anunciado en la intranet de los Mossos. Y despu¨¦s lo nombra formalmente el secretario general de Interior. Fuentes conocedoras del proceso aseguran que cualquier intento de parar la convocatoria, si no es por decisi¨®n de un juez, supondr¨ªa prevaricar, y detallan que en seis meses, desde que se elige al candidato, debe hacerse efectivo el nombramiento. Otras fuentes policiales aseguran que bastar¨ªa con dejar desierto el concurso, motivo al que atribuyen las prisas del actual director para elegir entre los dos aspirantes.

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