Barcelona definir¨¢ en 2027 a cu¨¢ntos vecinos expulsar¨¢ la escalinata proyectada en la Sagrada Familia

Los inicios de mandato, en los Ayuntamientos, son un buen momento para abrir grandes melones que llevan tiempo enquistados. Y en Barcelona han sido los vecinos de la Sagrada Familia los que han forzado al gobierno del alcalde Jaume Collboni a mover ficha en un tema tan sensible como la ampliaci¨®n del templo, que afectar¨ªa a un n¨²mero indeterminado de vecinos, que se ha llegado a cuantificar en 1.000. La Junta Constructora quiere edificar una escalinata sobre la calle de Mallorca (aunque el proyecto original no la contemplaba), donde mirar¨¢ la fachada de la Gloria, la principal. Y las dos manzanas de viviendas hasta la calle de Arag¨® est¨¢n afectadas seg¨²n el planeamiento vigente, el c¨¦lebre Plan General Metropolitano de 1976.

Con los a?os, el Ayuntamiento y los vecinos han asumido que habr¨¢ afectaciones. Y la Sagrada Familia entiende que la escalinata y el paseo no ser¨¢n tan grandes como pretend¨ªan, y que le tocar¨¢ rascarse el bolsillo si expropia a vecinos. Para decidirlo y ponerlo negro sobre blanco el gobierno municipal se ha marcado 2027 para tener aprobado el plan urban¨ªstico que fijar¨¢ a cu¨¢ntos vecinos afecta el proyecto. El consistorio entiende que las eventuales expropiaciones y traslado de vecinos debe pagarlas la Junta Constructora.

La teniente de alcalde de Urbanismo, Laia Bonet, se ha reunido este jueves con los vecinos y ha explicado que si se arremangan ahora en un tema tan peliagudo es porque la Sagrada Familia tiene previsto terminar su construcci¨®n en vertical en 2026. Ser¨¢ entonces cuando habr¨¢ que saber cu¨¢les son los siguientes pasos. ¡°Hoy sabemos el calendario y necesitamos acabar con una situaci¨®n de provisionalidad que existe desde 1976 y que tiene costes y afectaci¨®n en vecinos. Nuestra voluntad es que este mandato seamos capaces de encontrar la soluci¨®n urban¨ªstica definitiva para la fachada de la Gloria¡±, ha expuesto. El Ayuntamiento afronta la cuesti¨®n como una negociaci¨®n con los vecinos y el templo ¡°sin premisas, en pro del consenso¡±. Bonet no desvela si el consistorio es partidario de la escalinata o no, o de su tama?o, o de cu¨¢ntos vecinos ser¨ªa razonable afectar.

La responsable de Urbanismo ha dejado claro que se trabajar¨¢ sobre las propuestas que en las ¨²ltimas d¨¦cadas distintos alcaldes han puesto sobre la mesa. La ¨²ltima, no oficial pero s¨ª trabajada por el gobierno de la exalcaldesa Ada Colau, contemplaba tres escenarios con intervenciones que minimizaban mucho la afectaci¨®n sobre viviendas. Los planos reduc¨ªan el impacto de un millar de viviendas a solo entre 92 y 171 y contemplaban el realojo de los vecinos a pocos metros de distancia.

Los vecinos han salido satisfechos de la reuni¨®n, porque el Ayuntamiento se pone manos a la obra. Desde la asociaci¨®n que representa a los afectados, Salvador Barroso, y desde la asociaci¨®n de vecinos, Gabriel Mercadal, han celebrado que ¡°comience la negociaci¨®n¡±, que la idea es una ¡°m¨ªnima afectaci¨®n¡± y que el consistorio entiende que los costes los pagar¨¢ el templo. Francesc Pla, vicepresidente de la asociaci¨®n vecinal, ha querido dejar claro que ¡°para llegar a una decisi¨®n es necesario sentarse las tres partes en una misma mesa, con reuniones a tres: Ayuntamiento, vecinos y templo¡±.

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