El PP valenciano construye su realidad
Euf¨®ricos desde el triunfo de Isabel D¨ªaz Ayuso en la cruzada electoral madrile?a, sus hom¨®logos valencianos se ven capaces de repetir la gesta de ganar y gobernar
A principios del pasado mes de julio, con la celebraci¨®n precipitada de su XV Congreso regional, el PP valenciano (PPCV) puso en marcha una estrategia que respond¨ªa a una convicci¨®n compartida entre sus responsables y asumida por la direcci¨®n nacional del partido: en la Comunidad Valenciana iba a haber adelanto electoral.
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A principios del pasado mes de julio, con la celebraci¨®n precipitada de su XV Congreso regional, el PP valenciano (PPCV) puso en marcha una estrategia que respond¨ªa a una convicci¨®n compartida entre sus responsables y asumida por la direcci¨®n nacional del partido: en la Comunidad Valenciana iba a haber adelanto electoral.
Tanto Carlos Maz¨®n como Mar¨ªa Jos¨¦ Catal¨¢, presidente y secretaria general, respectivamente, del renacido PP, manejaban datos concretos que acreditaban la decisi¨®n de acelerar el proceso de renovar las estructuras de la organizaci¨®n y dar a conocer a la opini¨®n p¨²blica los emergentes liderazgos. Catal¨¢ ya hab¨ªa recorrido camino desde su condici¨®n de candidata a la alcald¨ªa de Valencia, jefa de la oposici¨®n municipal en el cap i casal y presidenta del PP en la ciudad, adem¨¢s de sumar a?os de ejercicio como alcaldesa de Torrent (Valencia), consellera de Educaci¨®n y portavoz del Consell de Alberto Fabra. No suced¨ªa lo mismo con Maz¨®n. M¨¢s all¨¢ de Alicante, donde ejerce como presidente de la Diputaci¨®n provincial, la proyecci¨®n de Maz¨®n como nuevo l¨ªder del PP en sustituci¨®n de Isabel Bonig resulta muy pobre para quien est¨¢ llamado a ser candidato a la Presidencia de la Generalitat. Su discreto curr¨ªculo, aunque trufado de concejal¨ªas, direcciones generales, presidencias de patronatos, institutos, fundaciones y consorcios, no le ha hecho acreedor de un destacable grado de conocimiento ciudadano.
El Congreso fue el primer paso para intentar solventar esa contrariedad de designar a un l¨ªder, aspirante a altas magistraturas, cuya existencia ignoran los electores. A partir de su elecci¨®n como presidente regional del PPCV, el camino qued¨® trazado: llenar su agenda de citas y actividades que permitan, adem¨¢s, contrarrestar otro h¨¢ndicap en la cuenta de Maz¨®n: no es diputado auton¨®mico, lo que le impide medirse en las Cortes Valencianas con su principal oponente, el socialista presidente del Consell, Ximo Puig, y utilizar la atalaya del Parlamento auton¨®mico para que los medios de comunicaci¨®n recojan sus intervenciones y trasladen a la opini¨®n p¨²blica sus mensajes pol¨ªticos.
El verano y el reinicio del curso pol¨ªtico no han modificado la tesis de partida. Los dirigentes del PPCV siguen convencidos de que los valencianos seremos llamados a las urnas con antelaci¨®n y alevos¨ªa. Y cuanto m¨¢s desestima Puig tal posibilidad ¡ªel viernes, sin ir m¨¢s lejos, ante los micr¨®fonos de la Cadena Ser, preguntado al respecto por ?ngels Barcel¨®¡ª m¨¢s reforzados se ven en su planteamiento Maz¨®n y compa?¨ªa. Si lo hizo en 2019, repiten, por qu¨¦ no va a hacerlo ahora. Y a?aden: ¡°Ximo Puig necesita desvincularse de un Pedro S¨¢nchez a la baja y de unas siglas, el PSOE, que pierden fuelle en todas las encuestas¡±. En eso tienen raz¨®n, pero no hay peligro de coincidencia: S¨¢nchez, como ya hemos escrito con anterioridad, agotar¨¢ la legislatura porque quiere disfrutar de su gran momento con la presidencia de turno de la UE en el segundo semestre de 2023.
De encuestas van bien servidos en el PPCV. Desde Madrid les actualizan a diario la informaci¨®n. Las del CIS las obvian. Euf¨®ricos desde el triunfo de Isabel D¨ªaz Ayuso en la cruzada electoral madrile?a, se ven capaces sus hom¨®logos valencianos de repetir la gesta -ganar y gobernar- en este rinc¨®n del Mediterr¨¢neo espa?ol. El analista Michavila les advierte, en declaraciones al diario Levante-EMV, que en la decisi¨®n del electorado pesar¨¢ sobre todo la gesti¨®n del Consell, junto a la capacidad de rearme de la derecha y la influencia de los debates nacionales. Desestiman los logros del Gobierno del Bot¨¢nico, dan por hecho que el votante de C¡¯s virar¨¢ su voto hacia el PP y conf¨ªan en que, una vez m¨¢s, el votante aut¨®ctono emitir¨¢ su voto en clave nacional para mostrar su desafecci¨®n hacia Pedro S¨¢nchez por gobernar con quien le quitaba el sue?o y ceder ante los nacionalistas para amarrar la mayor¨ªa parlamentaria.
Tan convencidos est¨¢n en el PP de conocer la agenda oculta del presidente del Consell, que esta semana han llenado calles y plazas de la Comunidad Valenciana con carteles en los que se observa a Carlos Maz¨®n, juvenil y sonriente, en mangas de camisa, promocionarse como ¡°el presidente de todos¡±, novedoso hito ¡ªmodo ir¨®nico¡ª en la propaganda pol¨ªtica. Un for¨¢neo de visita en Valencia, ajeno a las claves de la pol¨ªtica valenciana, me pregunta: ¡°?Est¨¢is de campa?a?¡±. La pereza me lleva a remitirle a este art¨ªculo que estaba por escribir.
El prestigioso soci¨®logo andaluz Manuel P¨¦rez Yruela desarroll¨® con ¨¦xito la llamada ¡°paradoja de la satisfacci¨®n¡±. El ensayista explica que, a veces, un cierto grado de satisfacci¨®n por lo que funciona bien puede bloquear una visi¨®n cr¨ªtica sobre lo que funciona mal. El PPCV est¨¢ en ese punto, pero al rev¨¦s: su discurso apocal¨ªptico sobre el Gobierno del Bot¨¢nico les puede llevar a confiarse y pensar que con o sin adelanto electoral la partida est¨¢ ganada. Y no. La demoscopia no dice eso.