Feij¨®o, crecido tras el duelo con S¨¢nchez: ¡°?Para qu¨¦ tiene 800 asesores?; ?Para qu¨¦ invirti¨® cuatro d¨ªas en prepararlo?; ?Para qu¨¦?; ?Para nada!¡±
El l¨ªder del PP se da un ba?o de masas el d¨ªa despu¨¦s del cara a cara, que considera que ha ¡°enchufado¡± a los suyos, pero advierte de que ¡°ganar un debate no es ganar unas elecciones¡±
Alberto N¨²?ez Feij¨®o est¨¢ plet¨®rico. El d¨ªa despu¨¦s del cara a cara con Pedro S¨¢nchez, que el PP considera que ha ganado de calle, el l¨ªder del PP se ha dado un ba?o de masas. Primero, en la estaci¨®n de tren de Ciudad Real, a la que ha llegado procedente de Madrid, requerido por los transe¨²ntes, de selfi en selfi, igual que en la estaci¨®n de Atocha, de la que sali¨® a las diez y veinte de la ma?ana. Poco despu¨¦s, en la ciudad cas...
Alberto N¨²?ez Feij¨®o est¨¢ plet¨®rico. El d¨ªa despu¨¦s del cara a cara con Pedro S¨¢nchez, que el PP considera que ha ganado de calle, el l¨ªder del PP se ha dado un ba?o de masas. Primero, en la estaci¨®n de tren de Ciudad Real, a la que ha llegado procedente de Madrid, requerido por los transe¨²ntes, de selfi en selfi, igual que en la estaci¨®n de Atocha, de la que sali¨® a las diez y veinte de la ma?ana. Poco despu¨¦s, en la ciudad castellanomanchega, donde, pese al calor asfixiante, los simpatizantes del PP no le dejaban ni avanzar. A duras penas pudo abrirse paso Feij¨®o al t¨¦rmino del mitin para acercarse hacia los periodistas, porque los suyos se abalanzaban sobre ¨¦l para darle la mano y pedirle fotograf¨ªas, en una euforia como no se hab¨ªa visto en ninguno de los d¨ªas previos al debate. Se percibi¨® tambi¨¦n durante el mitin, interrumpido varias veces. ¡°?V¨¢yase, se?or S¨¢nchez, v¨¢yase!¡±, clam¨® un se?or mientras hablaba Feij¨®o. El estado de ¨¢nimo es la clave. El l¨ªder del PP lo confes¨® en conversaci¨®n informal con los periodistas: ¡°El partido se ha enchufado¡±. Feij¨®o se ve tan ganador del cara a cara que en su discurso se mostr¨® crecido ante S¨¢nchez: ¡°?Para qu¨¦ tiene 800 asesores?; ?Para qu¨¦ invirti¨® cuatro d¨ªas en prepararlo?; ?Para qu¨¦?; ?Para nada!¡±.
Tanto el l¨ªder del PP como su equipo m¨¢s directo, con el que prepar¨® el debate, confiesan que no esperaban tan mal desempe?o de Pedro S¨¢nchez. ¡°Cuando me sent¨¦ sab¨ªa que el debate iba a salir bien, pero no sab¨ªa que iba a salir tan bien¡±, reconoce Feij¨®o, que considera que el presidente del Gobierno se confi¨® pensando en que el duelo ser¨ªa como los que les han enfrentado en el Parlamento. ¡°?l probablemente pens¨® que estaba en el Senado o en el Congreso, donde sus rivales no pueden utilizar los mismos tiempos. No fue capaz de contrarrestar ning¨²n dato ni ninguna afirmaci¨®n¡±, ha reflexionado Feij¨®o, antes de quejarse por las ¡°interrupciones¡± de S¨¢nchez. ¡°Fue una pena que no dejase hablar. Sab¨ªa que si se ve¨ªa perdiendo meter¨ªa mucho ruido¡±, aunque nada ha dicho de las medias verdades y afirmaciones falsas que ¨¦l tambi¨¦n utiliz¨® como armas contra el l¨ªder socialista.
El candidato del PP cree que el debate ha servido para ¡°enchufar al partido¡±, y se ve catapultado hacia La Moncloa. ¡°Me voy a divertir los d¨ªas que me quedan hasta las elecciones¡±, ha confesado a los periodistas, mostrando c¨®mo de confiado est¨¢. Ahora bien, Feij¨®o dice ser tambi¨¦n ¡°perfectamente consciente de que ganar un debate no es ganar unas elecciones¡±. ¡°Lo peor ser¨ªa una relajaci¨®n y una euforia irresponsable¡±, ha reflexionado. Pero esa euforia recorre al PP y a sus bases. En su equipo consideran que los efectos del cara a cara est¨¢n en las sensaciones, y la sensaci¨®n que ha transmitido, a su juicio, es que ¡°ya no hay remontada de la izquierda¡±. ¡°No se ha revertido la tendencia del PP de ganador, sino que se ha reforzado¡±, defienden los colaboradores del l¨ªder, que vieron a S¨¢nchez ¡°desarbolado¡± desde los primeros diez minutos.
Con su buen resultado en el debate, Feij¨®o ha preocupado a su rival por la derecha, Santiago Abascal, irritado con la oferta del l¨ªder del PP a Pedro S¨¢nchez para que gobierne el m¨¢s votado de los dos tras las elecciones del 23-J, reiterada en el cara a cara electoral. El l¨ªder de la extrema derecha ve como el l¨ªder del PP intenta una y otra vez sacud¨ªrselo como socio y desprecia su propuesta de construir juntos una alterativa a la izquierda. ¡°Creo que los espa?oles ya hemos visto suficiente en este debate. Es preocupante. Hace cinco a?os que La Moncloa est¨¢ ocupada por un personaje narcisista, agresivo y perturbado¡. Y a ese personaje peligroso el se?or Feij¨®o acaba de ofrecerle una abstenci¨®n para que pueda seguir gobernando. El se?or Feij¨®o ofrece un pacto a S¨¢nchez para evitar un pacto con Vox¡±, ha escrito en las redes Santiago Abascal en lo que de momento constituye la ¨²nica reacci¨®n del partido ultra al debate a dos, informa Miguel Gonz¨¢lez. El breve texto refleja el disgusto de Abascal con el l¨ªder del PP pero, tambi¨¦n, el diferente trato que dispensa a este y al presidente del Gobierno: mientras al primero lo insulta, al segundo lo trata de ¡°se?or Feij¨®o¡±.
La estrategia de Feij¨®o pone muy nervioso a Abascal ya que, de tener ¨¦xito, har¨ªa irrelevante su eventual apoyo que, como ha demostrado en Murcia, quiere vender caro al PP. Sin embargo, deja un hueco al l¨ªder ultra, ya que le permite presentarse ante el electorado de derechas como la ¨²nica garant¨ªa de que S¨¢nchez ser¨¢ desalojado de La Moncloa aunque gane las elecciones, siempre que PP y Vox sumen los votos suficientes. Como en Extremadura.
Pese a lo bien que cree que le ha funcionado el cara a cara contra S¨¢nchez, el l¨ªder del PP no va a reconsiderar su decisi¨®n de no acudir a m¨¢s debates. Sostiene que est¨¢ dispuesto, si S¨¢nchez acepta, a participar en uno a siete partidos. ¡°No me voy a prestar a juegos incompletos y a debates trucados¡±, apunta sobre el debate a cuatro ¨DPP, PSOE, Sumar y Vox¨D, aunque el l¨ªder socialista le propuso celebrar tambi¨¦n m¨¢s caras a cara. ¡°No me voy a aprovechar por que no le haya salido a S¨¢nchez bien este¡±, ha expresado a los periodistas un Feij¨®o m¨¢s que ufano, antes de volver a meterse en una mel¨¦ de militantes locos por conseguir una foto suya.
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