El virus crea un nuevo perfil de persona vulnerable en Madrid: m¨¢s universitarios y menos jubilados
Los Servicios Sociales de Madrid prev¨¦n atender cada vez a un mayor n¨²mero de j¨®venes cualificados y familias monoparentales y con hijos
Se acerca la fecha del fin del estado de alarma, este domingo 21 de junio, pero las consecuencias sociales y econ¨®micas de la pandemia, no. Es m¨¢s, las previsiones apuntan a una resaca larga en el tiempo y a un perfil diferente de las personas que van a necesitar ayuda por parte de los ...
Se acerca la fecha del fin del estado de alarma, este domingo 21 de junio, pero las consecuencias sociales y econ¨®micas de la pandemia, no. Es m¨¢s, las previsiones apuntan a una resaca larga en el tiempo y a un perfil diferente de las personas que van a necesitar ayuda por parte de los Servicios Sociales del Ayuntamiento. El madrile?o vulnerable ser¨¢ m¨¢s joven, pues se espera que sea necesario triplicar la atenci¨®n a personas de entre 30 y 64 a?os.
Habr¨¢ asimismo m¨¢s personas cualificadas, pues los universitarios atendidos est¨¢ previsto que sean m¨¢s del doble que antes del coronavirus. Adem¨¢s, la crisis golpear¨¢ m¨¢s los hogares monoparentales y las familias con menores. El Ayuntamiento de Madrid ha llegado a esta conclusi¨®n tras comparar el perfil de los usuarios previos a la covid-19 con las previsiones que se manejan con la llegada de la pandemia.
El n¨²mero de personas de entre 30 y 64 a?os que van a ser potenciales usuarios pasa del 10,1% al 33,1%. La horquilla 30-44 a?os salta del 4,5% previo a la covid-19 a una previsi¨®n del 16,7% y la del 45-64 a?os del 5,6% al 16,4%. El crecimiento es muy similar en el tramo de edad 18-29 a?os, que pasa del 3,3% al 11,9%. Por el contrario, entre los mayores de 65 a?os se prev¨¦ un descenso del 10,2% al 8,1%.
Los que tiene estudios universitarios que prev¨¦n que van a tener que recurrir a los Servicios Sociales son el 9,5% frente al 3,9% que son usuarios en la actualidad. En cuanto a los que cuentan con estudios de secundaria, pasar¨ªan del 7,1% al 18,4%. Apenas hay crecimiento entre aquellos que no tienen estudios, del 17,1% al 18,6%. Con respecto al perfil laboral, los parados siguen al frente aunque se disparan del 14% al 42,4%. El empleado del 4,4% al 14% y el trabajo dom¨¦stico no remunerado del 6,1% al 10,9%. En cuanto a los pensionistas, bajan del 10% al 7,3%.
Los hogares monoparentales pasar¨ªan del 10% al 22% mientras que los unipersonales con mayores de 65 a?os descender¨ªan de 14,8% al 6,2% y los unipersonales de 18-54 a?os crecer¨ªan del 4,6% al 11,5%. Los que tienen menores a cargo subir¨ªan del 2,4% al 11% y los que no tienen menores del 5% al 12,2%. Los hogares en los que vive alguna persona en paro pasan del 9% al 33,7%; los que no tienen entre sus moradores a nadie desempleado del 3,8% al 12%, y los hogares con alg¨²n jubilado descienden del 11,7% al 6,9%.
¡°Nos enfrentamos a una crisis que est¨¢ mutando, est¨¢ viva¡± que hace que ¡°el espectro sea cada vez m¨¢s amplio¡±Bego?a Villac¨ªs, vicealcaldesa
Son todos datos que sirven para leer qu¨¦ va a ocurrir en los Servicios Sociales en los pr¨®ximos meses, pero que, al mismo tiempo, no son extra?os porque coinciden con el patr¨®n hist¨®rico resultante de otras crisis, se?ala H¨¦ctor Cebolla, director general de Innovaci¨®n y Estrategia del ?rea de Familias, Igualdad y Bienestar Social.
Los cinco grupos pol¨ªticos del Ayuntamiento de Madrid se sientan estos d¨ªas en torno a cuatro mesas sectoriales para dise?ar las bases sobre las que llegar a un acuerdo de reconstrucci¨®n de la ciudad tras la pandemia. Este nuevo perfil de madrile?o que va a necesitar ayuda qued¨® dibujado en la encuesta encargada por el Consistorio en plena crisis sanitaria y que se llev¨® a cabo de forma telef¨®nica en 1.566 hogares entre el 13 y el 23 de abril. Los integrantes de la mesa que se encarga de las pol¨ªticas sociales y vivienda pudieron conocer esos detalles el pasado 15 de junio.
El nuevo perfil se desarrolla frente al anterior dominado por personas mayores de 65 a?os solas, ha destacado la vicealcaldesa Bego?a Villac¨ªs durante su visita a un centro de Servicios Sociales en el distrito de San Blas-Canillejas. ¡°Nos enfrentamos a una crisis que est¨¢ mutando, est¨¢ viva¡± que hace que ¡°el espectro sea cada vez m¨¢s amplio¡±. Hay ¡°personas que no estaban en el radar de los servicios sociales porque no eran usuarios cl¨¢sicos¡± que ahora tienen que reclamar ayuda ¡°por primera vez¡±, ha comentado Villac¨ªs.
Por un lado, entiende H¨¦ctor Cebolla, estamos ante una ¡°cat¨¢strofe social¡± pero, al mismo tiempo, supone un reto para los Servicios Sociales el tener que atender a una poblaci¨®n que va a ser m¨¢s exigente. ¡°Esta va a ser nuestra nueva realidad por desgracia¡±.
Pol¨¦mica en Aluche
M¨¢s de 100.000 personas reciben estos d¨ªas en la capital ayuda en forma de alimentos. Aproximadamente el 80% lo hacen por los cauces municipales y el 20% a trav¨¦s de las redes vecinales. Algunos son vecinos acostumbrados a ser ayudados. Otros, no. ¡°Estos nuevos perfiles no se quieren ver en una cola de Servicios Sociales porque eso genera estigmatizaci¨®n¡±, se?ala la vicealcaldesa en referencia a las largas filas para recibir comida en numerosos puntos de la ciudad.
Las que cada fin de semana tienen lugar en el barrio de Aluche siguen enfrentando al Ayuntamiento y a la Asociaci¨®n de Vecinos de Aluche (AVA). El Consistorio les reclama los datos de los ciudadanos a los que ayudan y pide que estas entregas de comida se hagan bajo el paraguas municipal. La asociaci¨®n se escuda en la protecci¨®n de datos para no ofrecer esa informaci¨®n y ha invitado al alcalde a que este mismo s¨¢bado sea testigo de c¨®mo distribuyen los alimentos.
¡°La soluci¨®n es muy sencilla: basta con que acudan los Servicios Sociales a los repartos de todos los s¨¢bados y tomen nota de todas las personas que necesitan ayuda y que se comprometan a atenderlas a todas. AVA estar¨¢ encantada, y los vecinos y vecinas en situaci¨®n de vulnerabilidad a¨²n m¨¢s¡±, explican en un comunicado.
¡°Nosotros hacemos las cosas de otra manera¡± y ¡°trabajamos muy bien con otras asociaciones¡±, se defiende Villac¨ªs. ¡°La labor no es solo darle una bolsa de comida. Es ayudar a la familia, ver si los ni?os est¨¢n escolarizados, si tienen alg¨²n otro tipo de necesidad, si tienen una vivienda digna. Se hace un trabajo integral¡±. Insiste en que no saben si esas personas que reciben comida en Aluche est¨¢n siendo ya ayudados por el Ayuntamiento, la Comunidad o si reciben alguna prestaci¨®n del Estado.
El Ayuntamiento anula la cesi¨®n de la Casa del Cura a los vecinos de Malasa?a
Los vecinos de Malasa?a llegaron este viernes a la reuni¨®n que ten¨ªan prevista con la Junta Municipal del Distrito de Centro para recibir las llaves de La Casa del Cura, que hab¨ªan ganado en un concurso p¨²blico en 2019. Sin embargo, lo que iba a ser un d¨ªa de felicidad para el barrio se volvi¨® una decepci¨®n al escuchar que el Ayuntamiento revoc¨® el contrato de cesi¨®n del local que firm¨® la anterior legislatura con el colectivo Haciendo Barrio, que engloba a 38 asociaciones de vecinos.
El edificio se convertir¨¢ en una oficina que acoger¨¢ al personal de servicios sociales del distrito, en el que se van a incorporar siete nuevos profesionales que comenzar¨¢n a prestar sus servicios en el Ayuntamiento de Madrid, seg¨²n ha confirmado un portavoz de la Junta de Distrito Centro.
La asociaci¨®n de vecinos denuncia que el consistorio hab¨ªa cambiado la cerradura de entrada al edificio hace semanas, aprovechando las obras de instalaci¨®n de un ascensor y el cambio de contadores el¨¦ctricos, pero mantuvo en secreto sus planes. ¡°Algunos muebles y el material de las diferentes asociaciones de vecinos todav¨ªa siguen dentro del edificio¡±, comenta la presidenta de la Asociaci¨®n Vecinos de Malasa?a, Pilar Cirugeda.
El edificio, situado en la Plaza del Dos de Mayo, n¨²mero 1, hab¨ªa permanecido vac¨ªo hasta que el anterior consistorio inici¨® las obras de adecuaci¨®n en 2018. El Ayuntamiento de Madrid invirti¨® m¨¢s de 230.000 euros en rehabilitar una superficie de 600 metros, distribuida en cuatro plantas de altura, planta baja y s¨®tano. Tras esta reforma, en abril de 2019 se cedieron estas instalaciones al proyecto Haciendo Barrio, que inici¨® las actividades propuestas para este espacio.
La emisora Onda Maravillas empez¨® a hacer el programa en las instalaciones, las diferentes asociaciones de vecinos por fin tuvieron un lugar donde reunirse y los m¨¢s peque?os del barrio empezaron a utilizar el espacio para realizar sus actividades de scouts. Esto, hasta julio de 2019, cuando el consistorio les comunic¨® que el edificio no reun¨ªa las condiciones de accesibilidad y energ¨¦ticas adecuadas y que tendr¨ªan que esperar a que se pudieran realizar las obras para que pudieran continuar con las actividades. ¡°Las obras de subsanaci¨®n de estas deficiencias han concluido recientemente¡±, comunicaron desde La Junta del Distrito. Sin embargo, los vecinos ahora no pueden volver.
Por su parte, el concejal socialista Pedro Barrero lamenta el giro que ha dado el Gobierno Municipal en un momento en que se est¨¢ intentando llegar acuerdos en las Mesas para la Reconstrucci¨®n, y asegura que ¡°el alcalde mantiene una guerra abierta con las entidades vecinales¡±.
El resultado de todo esto es que las asociaciones de vecinos de Malasa?a siguen sin tener un espacio en el barrio. Esto, ¡°en un momento en donde son las Asociaciones las que m¨¢s est¨¢n ayudando a las familias vulnerables durante la crisis por la COVID-19¡±, recuerda Barrero.
Durante el estado de alarma, los vecinos, al no contar con una sede propia, tuvieron que acudir a Ecologistas en Acci¨®n, que les cedi¨® el s¨®tano de una de sus sedes para que pudieran atender una despensa de alimentos que, por ahora, ha servido para ayudar a 500 personas del barrio. Al final, el Ayuntamiento les dio un espacio en el centro cultural Clara del Rey, pero ah¨ª no pueden almacenar alimentos perecederos.
Seg¨²n el consistorio, est¨¢ decisi¨®n se da ante la nueva normativa COVID-19, que obliga a establecer distancias de seguridad entre trabajadores. Ello, unido al aumento de la plantilla de servicios sociales y a la falta de espacios disponibles, ha hecho imprescindible, a ojos del Ayuntamiento, retomar el edificio para ellos. ¡°Ha sido necesario recuperar dicho inmueble en la zona de Malasa?a, donde los servicios sociales est¨¢n volcados con los vecinos del barrio¡±, afirman desde el consistorio. / LUC?A FRANCO
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