Cuando la humilde loza se volvi¨® arte

A 50 kil¨®metros del centro de Madrid, en la sala de exposiciones del antiguo palacio de Goyeneche en Nuevo Bazt¨¢n, se encuentran 40 piezas de cer¨¢mica de Talavera de la Reina (Toledo); pero son mucho m¨¢s que una muestra de artesan¨ªa. La cuidadosa selecci¨®n proveniente del Museo Nacional de Cer¨¢mica y Artes Suntuarias ¡°Gonz¨¢lez Mart¨ª¡± de Valencia hace un recorrido hist¨®rico, tem¨¢tico y estil¨ªstico por la alfarer¨ªa del centro toledano que abasteci¨® las mesas y alacenas de las ¨¦lites espa?olas durante siglos. Con la denominaci¨®...

A 50 kil¨®metros del centro de Madrid, en la sala de exposiciones del antiguo palacio de Goyeneche en Nuevo Bazt¨¢n, se encuentran 40 piezas de cer¨¢mica de Talavera de la Reina (Toledo); pero son mucho m¨¢s que una muestra de artesan¨ªa. La cuidadosa selecci¨®n proveniente del Museo Nacional de Cer¨¢mica y Artes Suntuarias ¡°Gonz¨¢lez Mart¨ª¡± de Valencia hace un recorrido hist¨®rico, tem¨¢tico y estil¨ªstico por la alfarer¨ªa del centro toledano que abasteci¨® las mesas y alacenas de las ¨¦lites espa?olas durante siglos. Con la denominaci¨®n de Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de 2019 de fondo, la muestra, que se exhibe hasta el 13 de junio, es un homenaje a un estilo que elev¨® la producci¨®n de cer¨¢mica al nivel de arte.

Aunque este reciente nombramiento ha dado a la exposici¨®n una relevancia mayor, su llegada a Nuevo Bazt¨¢n fue una coincidencia venturosa, admite el comisario de la muestra y director del Museo Nacional de Cer¨¢mica, Jaume Coll. La exposici¨®n se comenz¨® a planear a finales de 2018, antes de recibir la menci¨®n de la UNESCO en 2019. ¡°El objetivo inicial era presentar la cer¨¢mica de Talavera por el significado que tuvo en el siglo XVI, sobre todo su papel en la trayectoria de la cer¨¢mica espa?ola y en la modernizaci¨®n de los talleres del siglo XVIII¡±, explica Coll, que agrega que la raz¨®n por la cual se exhibe en el Palacio de Goyeneche es precisamente porque complementa el discurso museogr¨¢fico de un lugar representativo de la industria espa?ola de aquella ¨¦poca. La selecci¨®n de piezas, que incluye desde benditeras o platos hasta botes de farmacia, azulejos o tinteros, cuenta la historia de la producci¨®n de la cer¨¢mica de Talavera desde mediados del siglo XVI.

En ese momento comienza su tiempo de esplendor. Aunque el lugar ya era uno de los centros cer¨¢micos m¨¢s potentes, Felipe II le dio un importante impulso al convocar a varios reconocidos artistas flamencos y tambi¨¦n algunos qu¨ªmicos sevillanos a la ciudad para modernizar la producci¨®n alfarera. Estos nuevos reclutas comienzan a hacer una cer¨¢mica de muy alta calidad, influenciados especialmente por los procesos de la porcelana italiana. ¡°Se provoca la renovaci¨®n total de la cer¨¢mica, de la loza ordinaria que se produc¨ªa en los alfares espa?oles. A partir de ah¨ª Talavera se convierte en el centro que irradia ese estilo, se impone en toda la pen¨ªnsula y tambi¨¦n se reconoce internacionalmente¡±, remata Coll.

Esta renovaci¨®n se enmarca dentro de las claras y premeditadas tendencias renacentistas, aunque tiene sus particularidades, asegura el comisario. Las innovaciones est¨¦ticas de la cer¨¢mica de Talavera consistieron especialmente en imitar la blancura de la loza de Pisa y los dise?os que empezaban a llegar desde China. El producto ser¨ªa una alfarer¨ªa que incorpora al naturalismo renacentista italiano dise?os y patrones en azul y blanco, provenientes de Oriente: una muestra del sincretismo que produjo la primera ola de globalizaci¨®n de la historia. En la exposici¨®n las series de helechos y golondrinas dan fe de ello; mientras que las piezas que presentan dise?os her¨¢ldicos demuestran la importante vinculaci¨®n con los monasterios y la nobleza, por otro lado.

Pero no solamente fue un proceso de adopci¨®n y copia de otros estilos, en los siglos siguientes en Talavera tambi¨¦n hubo innovaci¨®n. ¡°Su pusieron de moda las piedras preciosas y en la cer¨¢mica se comienza a imitar esa est¨¦tica con jaspeados o policromados¡±, explica el comisario. Estas piezas resaltan en la exposici¨®n, parecen piezas contempor¨¢neas de alg¨²n sofisticado estudio de cer¨¢mica entre antiguas vasijas con motivos her¨¢ldicos y otros naturalistas.

A lo largo de los siglos XVI y XVIII y con la evoluci¨®n constante que sufri¨® el estilo, el ¨¦xito del producto fue absoluto. Las cer¨¢micas fueron requeridas por la corte real para abastecer la farmacia del palacio de El Escorial, por ejemplo; pero tambi¨¦n inundaron los mercados de la pen¨ªnsula, volvi¨¦ndose la denominaci¨®n de Talavera en sin¨®nimo de calidad y exquisitez. Asimismo, al igual que sus or¨ªgenes est¨¦ticos se pueden trazar hasta el otro lado del mundo, la alfarer¨ªa de Talavera fue exitosa en otras costas. Se extendi¨® por las colonias americanas y all¨ª influenci¨® la aparici¨®n de nuevos estilos, que tomaron su nombre. Es el caso de la talavera de Puebla (M¨¦xico), estilo de cer¨¢mica que tambi¨¦n fue declarada Patrimonio Inmaterial en 2019.

En las salas donde se exhiben las piezas han recreado diferentes ambientes para demostrar c¨®mo la cer¨¢mica de Talavera estaba presente en el ¨¢mbito dom¨¦stico de las ¨¦lites y tambi¨¦n en el religioso. Es probable que la cer¨¢mica de Talavera haya estado presente en el mismo palacio de Goyeneche cuando era el n¨²cleo central del complejo industrial ideado por el pol¨ªtico Juan de Goyeneche. Ahora, unos cuantos siglos m¨¢s tarde, vuelve al lugar donde fue un bien ¨²til y decorativo como una muestra de la elevaci¨®n de la artesan¨ªa espa?ola.