Tres dudas del incendio del Windsor que llevan 20 a?os sin resolverse
A¨²n se discute si el suceso fue fortuito o intencionado, sigue sin saberse qui¨¦nes eran los dos fantasmas y tampoco se ha aclarado qu¨¦ se hizo con el amianto
?Qu¨¦ hac¨ªas la noche en que ardi¨® el Windsor? Esta fue durante a?os la pregunta que se hac¨ªan los madrile?os, tal fue el impacto que caus¨® la pel¨ªcula real del Coloso en llamas que se vivi¨® en la capital la madrugada del s¨¢bado 12 al domingo 13 de febrero de 2005, cuando un espectacular incendio que se divisaba por toda la ciudad devor¨®, cual cerilla gigante, el edificio Windsor. Unas 26 horas despu¨¦s de iniciarse el fuego ¨Da las 23.21 en el despacho 2.109 de la planta 21?¨D, el rascacielos, de 106 metros, qued¨® convertido en un gigantesco y triste esqueleto de hormig¨®n. Las especulaciones sobre la causa no tardaron en propagarse, incluidas las que apuntaban a un sabotaje, un ajuste de cuentas o incluso una conspiraci¨®n en la que se mezclaban intereses econ¨®micos y pol¨ªticos, a las que se sumaron conflictos judiciales para establecer responsabilidades e indemnizaciones con miles de millones en juego. A d¨ªa de hoy, quedan al menos tres dudas por resolver sobre el final del edificio, levantado en 1979, propiedad de la inmobiliaria As¨®n y el octavo m¨¢s alto del skyline de Madrid por aquel entonces.
Duda uno: ?fortuito o intencionado?
El 22 de marzo de 2011, la Justicia dio carpetazo definitivo al caso y atribuy¨® el incendio a un cortocircuito, cuatro d¨ªas antes de un acuerdo extrajudicial entre Deloitte ¨Dque ocupaba 20 de sus 31 plantas¨D El Corte Ingl¨¦s y Prosegur. El solar fue comprado por El Corte Ingl¨¦s, que levant¨® la Torre Titania. Aquella noche, estaba vac¨ªo al ser s¨¢bado y en obras ¨Destaba siendo reformado desde hac¨ªa dos a?os y medio, sobre todo para adaptarse a la normativa antiincendios¨D. Nada m¨¢s apagarse las llamas, comenzaron las investigaciones con la hip¨®tesis de que hubiera sido intencionado, que alent¨® la presencia de dos misteriosas siluetas humanas despu¨¦s de que salieran los Bomberos y que engord¨® el hallazgo de un butr¨®n en los bajos de la torre ¨Del informe pericial aclar¨® que era un hueco por el que dif¨ªcilmente pod¨ªa pasar una persona delgada¨D. Tambi¨¦n contribuy¨® el hecho de que se destruyeron documentos de una auditor¨ªa de Deloitte a FG Valores que hab¨ªa pedido la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n para una vista el lunes siguiente al incendio.
Un a?o despu¨¦s, se acord¨® el archivo provisional de la causa por la que no se apreci¨® responsabilidad penal de nadie. Tampoco de una empleada de Deloitte, la responsable de riesgos laborales, que fum¨® poco antes de desalojarse el edificio en el ¨²nico foco que se determin¨®. Se la exculp¨® porque ¡°apag¨® correctamente¡± los cigarrillos. Sin embargo, hay voces que apuntalan la intencionalidad con un segundo incendio horizontal, como Jos¨¦ Luis G¨®mez Calvo, jefe operativo de seguridad y de emergencias del Ministerio de Fomento, muy pr¨®ximo a la torre, cuando se produjo el incendio. Seg¨²n ha contado a Efe, fue testigo de que, cuando el incendio parec¨ªa controlado, se produjo un segundo incendio horizontal.
¡°La verticalidad era l¨®gica. Primero porque el fuego y el humo ascienden por una cuesti¨®n meramente f¨ªsica, y descienden de forma vertical por la ca¨ªda de fragmentos ardiendo por los huecos exteriores, escaleras, ascensores, etc¨¦tera. Eso propagaba el fuego verticalmente¡±, explica. Pero lo que no era previsible era una propagaci¨®n s¨²bita horizontal. ¡°Fue lo que acab¨® ya con todo el edificio y con las perspectivas de que se iban a lograr que la parte m¨¢s baja pudiera sobrevivir¡±, a?ade el experto. La Polic¨ªa Cient¨ªfica apreci¨® intencionalidad en este fuego horizontal, pero la autoridad judicial, no.
Duda dos: qui¨¦nes eran los fantasmas del Windsor
Unos videoaficionados grabaron la silueta de dos personas cuando ya se hab¨ªan retirado los Bomberos. ?Eran im¨¢genes reales o un montaje? Y, de ser ciertas, ?qui¨¦nes eran y qu¨¦ hac¨ªan? Profesores de F¨ªsica certificaron que no eran un reflejo de la calle, sino personas con trajes ign¨ªfugos y el juez consider¨® aut¨¦ntico el v¨ªdeo, pero en el auto que archiv¨® el caso provisionalmente consider¨® que, ¡°aunque se pudiera admitir la posibilidad de la presencia de personas, no existe evidencia de que pudiera haber tenido alguna incidencia en la propagaci¨®n del fuego¡±.
Ahora, Jon Imanol Sapieha Candela, alias El Sapo, un conocido ladr¨®n, ha reivindicado la autor¨ªa y ha dicho que eran personas de su equipo, enviadas a eliminar documentos. ¡°Yo quem¨¦ la Torre Windsor¡±, sostiene El Sapo, protagonista de una serie documental titulada El incendio del Windsor, Sapo S.A., que se estrenar¨¢ en Cuatro y que ha producido Mediaset Espa?a. ?Es fiable? Los bomberos consideraron que las sombras eran un reflejo y la Polic¨ªa Cient¨ªfica, personas.
Duda tres: el amianto
Tambi¨¦n est¨¢n pendientes de aclarar los efectos de la demolici¨®n y gesti¨®n de los escombros que, al parecer, conten¨ªan amianto. El Ayuntamiento detect¨® la presencia de este mineral, que puede causar varios tipos de c¨¢ncer, aunque dijo que no era mucho ?Afect¨® a los trabajadores que desescombraron o a los vecinos? ?Qu¨¦ se hizo con el material que se retir¨®? ?Se trat¨®? Las tareas se prolongaron durante seis meses y que costaron 17 millones de euros.