"Apocal¨ªptico, incre¨ªble. Esta noche Madrid es Nueva York"
Incredulidad y fantasma. A las dos de la madrugada el paseo de la Castellana era un hervidero. M¨¢quinas fotogr¨¢ficas, digitales, tel¨¦fonos con c¨¢mara, cientos depersonas mirando al mismo punto. Incluso a algunos les dio tiempo a sacar el tr¨ªpode.
Madrid era anoche un incendio y un recuerdo. Ard¨ªa un rascacielo en el centro financiero y en la retina de cientos de personas el 11 de septiembre de 2001 estaba presente.
S¨¢bado por la noche en el centro de Madrid. La gente alucinaba y tomaba sus cubatas mirando el espect¨¢culo. "Es como una vela que se consume poco a poco", dec¨ªa Elena. "Lo primero que he pensado es en una acci¨®n violenta, tenemos terrorismo de fuera y de dentro y hace nada estall¨® un coche frente a Ifema", afirmaba Juan Pablo. Frente al Corte Ingl¨¦s de la Castellana el cord¨®n policial imped¨ªa a los curiosos ir m¨¢s cerca del desastre. Sirenas y desconcierto. "Que no haya sido Torre Picasso, que no haya sido Torre Picasso", Laura, Mar¨ªa y Marta, ven¨ªan de cenar de la Moraleja e iban a tomar una copa en la zona de Azca. No pudieron. La polic¨ªa les cort¨® el paso. Se quedaron petrificados mirando las llamas y escuchando el sonido como de rompientes de olas que hac¨ªa el edificio al desplomarse. "Mira, mira, mira ??????", bajo el sonido de los helic¨®pteros la gente exclamaba incr¨¦dula.
Una pira de 34 pisos de altura generaba una enorme columna de humo casi invisible en la noche de Madrid. En la plaza de la Rep¨²blica Argentina un porsche de color amarillo serv¨ªa de barra improvisada para las botellas y los vasos de tres amigos que hab¨ªan salido como todos lo s¨¢bados. "Apocal¨ªptico, incre¨ªble. Esta noche Madrid es Nueva York", dec¨ªa Eva. El edifico ard¨ªa de fuera a dentro. La estructura, el esqueleto se quemaba de forma tenue, pero el armaz¨®n se consum¨ªa r¨¢pido y con ritmo. Volv¨ªa el sonido a mar como olas que romp¨ªan en la Castellana a cada tanto, de diez en diez minutos. "Me han llamado por tel¨¦fono y he venido a verlo", contaba Jos¨¦ Manuel, de M¨®stoles. Los m¨®viles han sido cruciales en esta noche.
Sirenas, desconcieto, copas y silencio. Madrid sali¨® de las discotecas y mir¨® un incendio. Anoche, Madrid fue NuevaYork.
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