Cu¨¢nto tiempo hay que esperar para rehacer la vida tras la muerte de una pareja
Emparejarse tras quedar viudo o viuda en Espa?a es todav¨ªa poco com¨²n y est¨¢ sujeto a cierta presi¨®n social. Los expertos insisten en que no hay tiempos establecidos en el duelo, pues estos son ¨²nicos
Este verano, se publicaron unas fotograf¨ªas en las que se ve¨ªa a la actriz y presentadora Paz Padilla con quien parec¨ªa ser su nueva pareja. Como noticia ser¨ªa en todo caso algo feliz, pero una parte de las personas que la vieron en redes sociales se deshizo en cr¨ªticas hacia la protagonista. C¨®mo se atreve, todav¨ªa es muy pronto, no lo querr¨ªa tanto. A lo que estas personas enfurecidas hac¨ªan referencia era al hecho de que ...
Este verano, se publicaron unas fotograf¨ªas en las que se ve¨ªa a la actriz y presentadora Paz Padilla con quien parec¨ªa ser su nueva pareja. Como noticia ser¨ªa en todo caso algo feliz, pero una parte de las personas que la vieron en redes sociales se deshizo en cr¨ªticas hacia la protagonista. C¨®mo se atreve, todav¨ªa es muy pronto, no lo querr¨ªa tanto. A lo que estas personas enfurecidas hac¨ªan referencia era al hecho de que Padilla se hab¨ªa quedado viuda ¡°solo¡± dos a?os antes. Hace unos d¨ªas, en una entrevista en el programa El Hormiguero ¡ªacudi¨® para promocionar la obra de teatro El humor de mi vida¡ª, la gaditana quiso lanzar una reflexi¨®n: ¡°?Qu¨¦ tiempo hay que esperar para rehacer tu vida?¡±. Es decir, ?en qu¨¦ momento puede una persona que ha perdido a una pareja iniciar una nueva relaci¨®n amorosa?
Hace unas d¨¦cadas, cuando las normas no escritas del luto reinaban sobre la vida de, sobre todo, las mujeres, la respuesta era algo m¨¢s clara: como se explicaba en un art¨ªculo en SModa de abril de 2021, por la muerte de un c¨®nyuge pod¨ªan ser entre dos y cinco a?os no solo vistiendo de negro, sino renunciando tambi¨¦n a los placeres de la vida. Ahora esas costumbres son cosa del pasado, pero algo queda en la percepci¨®n social y en c¨®mo se reacciona cuando se ve a una persona viuda iniciar un nuevo cap¨ªtulo en su historia rom¨¢ntica. Las cencerradas que hace siglos denunciaban a las mujeres viudas que se embarcaban en una relaci¨®n nueva son ahora comentarios que inundan las redes sociales.
Volver a emparejarse tras quedarse viuda o viudo todav¨ªa no es muy com¨²n en Espa?a, y lo es menos a¨²n entre las mujeres. Seg¨²n un estudio de 2011, solo el 4,3% de las mujeres viudas volv¨ªan a tener pareja. Se sabe tambi¨¦n que cuanto m¨¢s joven es la persona viuda las probabilidades de iniciar otra relaci¨®n son mayores.
Paz Padilla, a sus 53 a?os, entra en ese segmento de viudas j¨®venes (la edad media de las viudas en Espa?a est¨¢ en los 77 a?os) m¨¢s abiertas a nuevas relaciones. En cambio, entre las mujeres mayores de 65 a?os hay un rechazo generalizado a volver a emparejarse, seg¨²n explica a EL PA?S el soci¨®logo de la Universidad de Granada Juan L¨®pez Doblas, que ha investigado mucho sobre las personas mayores que viven solas. ¡°Cuando sale el tema, hay discursos diferenciados por g¨¦nero y las mujeres no responden con un ¡®no¡¯. Responden con un ¡®no, no, no, no, no¡¯. El rechazo es profundo y generalizado, y da igual que tengan 66 que 96¡å. Lo que rechazan, en realidad, es m¨¢s la convivencia, y las m¨¢s j¨®venes est¨¢n algo m¨¢s abiertas a relaciones en las que no se comparte casa (lo que en ingl¨¦s llaman living apart together). Tambi¨¦n son distintas las razones que dan para justificar por qu¨¦ no quieren volver a convivir con una pareja: entre las mayores hay argumentos m¨¢s tradicionales, como el no querer sustituir a su esposo o el miedo al qu¨¦ dir¨¢n; en la generaci¨®n siguiente, que puede ser de 70 o 60 a?os, se habla m¨¢s de no perder la libertad o no querer volver a cuidar.
Sobre lo que no hay datos es sobre el tiempo que pasa desde el fallecimiento de la pareja hasta el inicio de una nueva relaci¨®n entre quien s¨ª lo hace. S¨ª hay un estudio publicado en 1996 en Annals of Clinical Psychiatry que pinta en San Diego (Estados Unidos) un panorama muy distinto al espa?ol: 25 meses despu¨¦s de la muerte del c¨®nyuge, el 61% de los hombres y el 19% de las mujeres estaban inmersos en una nueva relaci¨®n rom¨¢ntica. La muestra era peque?a y muy concreta, pero el estudio concluy¨® tambi¨¦n que, en general, esas personas sol¨ªan mostrar mayores ¨ªndices de bienestar emocional. ?Son esos dos a?os (o menos) la respuesta?
No hay tiempos
¡°No hay ni un manual del duelo perfecto ni un tiempo del doliente perfecto, sino que el duelo es algo individual¡±, explica Valeria Moriconi, psic¨®loga, psicoonc¨®loga y responsable Servicio Apoyo al Duelo Covid-19 del Colegio Oficial de la Psicolog¨ªa de Madrid. ¡°Cl¨ªnicamente podr¨ªamos decir que alrededor del a?o es cuando deber¨ªa poder estar aceptada la p¨¦rdida y las emociones deber¨ªan ser menos intensas, pero sabemos que es un criterio general, hay que adaptarlo a la persona y a sus circunstancias¡±, asegura.
Esto mismo es lo que recalca la tambi¨¦n psicoonc¨®loga y psic¨®loga especialista en duelo Paloma Romero: todos los duelos son ¨²nicos, por lo que no tiene mucho sentido hablar de tiempos. ¡°El duelo va a estar condicionado por el presente y pasado de las personas, por las circunstancias de la muerte, por sus fortalezas, debilidades, fragilidades¡ Todo eso lo que va a hacer es dar forma a ese duelo, una forma ¨²nica que no se parece a la de nadie m¨¢s¡±, detalla. Decidir si alguien est¨¢ preparado o no para una nueva relaci¨®n bas¨¢ndose ¨²nicamente en el tiempo carece de sentido, asegura.
Como ejemplo de esas circunstancias y ese contexto necesario, Romero indica que, en el caso de Paz Padilla y su marido Antonio Juan Vidal ¡ªfallecido en julio de 2020 por un c¨¢ncer de cerebro¡ª, posiblemente se diera tambi¨¦n un duelo anticipado. ¡°La gente entiende que lleva dos a?os en duelo porque, desde que falleci¨® su marido, lleva dos a?os viuda. Pero el duelo, cuando hablamos de enfermedades degenerativas con mal pron¨®stico como pueden ser enfermedades oncol¨®gicas, en muchas ocasiones empieza antes. Es una enfermedad que deteriora a la persona progresivamente, son peque?as p¨¦rdidas que suceden delante de tus ojos¡±, explica la experta. Si has estado viviendo ese duelo anticipado y siendo consciente de ¨¦l, no bloque¨¢ndolo, has estado acompa?ado de profesionales y trabaj¨¢ndolo, a lo mejor ese momento de ¡°rehacer tu vida¡± llega antes, indica. ¡°O a lo mejor no, es muy dif¨ªcil hablar en general¡±, insiste.
M¨¢s que de tiempos, ambas especialistas en duelo hablan de una adaptaci¨®n emocional. ¡°El duelo no es una patolog¨ªa, algo que se cura o recupera, es un proceso. Y no es lineal, es m¨¢s como un viaje en monta?a rusa, en el que hay subidas y bajadas¡±, explica Paloma Romero. ¡°El proceso consiste en que si al principio hay m¨¢s dolor que amor y t¨² vas por la vida con la imagen de la persona delante, es dif¨ªcil ver por d¨®nde vas, cuesta avanzar. Cuando vas integrando el duelo, todas estas cositas particulares que te daba esta relaci¨®n, lo que pasa es que la proporci¨®n de dolor y amor tiende a invertirse. Dolor va a haber siempre, pero sobre todo existe el amor de lo que esa relaci¨®n te ha dado, y en vez de estar delante lo tienes al lado. Es algo que no entorpece, que te acompa?a, que hincha velas y que no es incompatible con otras cosas. A lo mejor hay quien quiere rehacer su vida en t¨¦rminos de encontrar otra pareja y fundar otra familia, o hay quien lo hace retomando una profesi¨®n o haciendo cosas que no ha podido hacer antes, por la raz¨®n que sea¡±, ejemplifica.
En el duelo hay tambi¨¦n una recolocaci¨®n de amor y asunci¨®n de nuevos roles. ¡°El duelo no se concluye¡±, apunta Valeria Moriconi, ¡°hay una adaptaci¨®n emocional a la p¨¦rdida, un recolocar al ser querido en tu vida. Aunque no est¨¦ f¨ªsicamente contigo, el amor no se acaba. Pero se redistribuye y es el eje que te empuja a reengancharte en la vida¡±.
La persona que ha sufrido la p¨¦rdida, el doliente, debe aprender a vivir en esa nueva realidad. ¡°Uno de los trabajos m¨¢s dif¨ªciles es volver a encontrar el rol dentro del d¨ªa a d¨ªa, tareas que antes estaban compartidas y ahora hay que asumirlas sola o compartirlas con otra persona. Dejo de ser esposa y empiezo a ser viuda. Con ese nuevo rol es cuando puedo enfrentarme a la sociedad con otros pilares y puedo dar espacio a los dem¨¢s¡±, elabora.
La presi¨®n social
En ese proceso tan personal y ¨²nico, la presi¨®n social suele aparecer siempre llegado un momento, en un sentido o en el otro. ¡°La sensaci¨®n que tienen los dolientes es que hagan lo que hagan hay quien tiene que decir algo al respecto¡±, asegura Moriconi. As¨ª, igual que a Paz Padilla se la critica por haber iniciado una relaci¨®n, existe tambi¨¦n quien siente la presi¨®n inversa, la de tener que haberlo superado ya, como le pasaba a Hamlet cuando lo criticaban por seguir llorando a su padre cuando ya hab¨ªa pasado un tiempo. ¡°A partir de cierto momento en el duelo, entre los seis y los ocho meses, es habitual que los pacientes empiecen a recibir mensajes de su entorno anim¨¢ndoles a hacer cosas y ellos pueden tener problemas para gestionar esta presi¨®n¡±, explica Paloma Romero.
¡°Sostener el dolor ajeno es muy dif¨ªcil. Una parte de la presi¨®n social quiz¨¢ pretende animar a los dolientes a estar mejor de como est¨¢n, con indicadores a lo mejor muy tontos como salir o qu¨¦ se ponen. Porque verles as¨ª les duele y entienden que lo est¨¢n haciendo por su bien. O simplemente est¨¢ la falta de contexto que impide empatizar¡±, a?ade.
Esta presi¨®n, externa e interna, puede hacer que haya tambi¨¦n quien se embarque en una nueva relaci¨®n cuando a¨²n no est¨¢ preparado. ¡°Si me meto dentro de cualquier tipo de relaci¨®n como forma de evitar lo que estoy sintiendo por la falta de la persona que ya no est¨¢, eso es un tap¨®n. Y no hay tapones herm¨¦ticos. El peligro de ir evitando ese duelo es que antes o despu¨¦s igual se me vuelve a presentar de bruces en la cara¡±, advierte Valeria Moriconi.
Por otra parte, rehacer la vida no significa necesariamente encontrar una nueva pareja. Moriconi prefiere la expresi¨®n ¡°reengancharse a la vida¡±, una nueva etapa que puede tomar muchas formas y que puede ser distinta a la anterior. ¡°La pareja no significa que el duelo est¨¦ m¨¢s o menos superado. No es un ¨ªndice. Se trata de volver a abrirse al mundo y tener esas ra¨ªces de amor con una persona que ha fallecido. Se pueden crear nuevos lazos, sean de amistad, amor, profesionales, personales¡ Si quieres incorporar una nueva pareja, fenomenal, pero a veces eso no quiere decir absolutamente nada¡±, a?ade.