Blanco, compacto, peludo y no es una oveja... ?es un sill¨®n!

Es de suponer que cuando Homero se sentaba a escribir la Odisea lo hac¨ªa sobre una piedra sobre la que extend¨ªa una piel de oveja que le mantuviera las posaderas calentitas. Y as¨ª habr¨¢ sido a trav¨¦s de la historia, con muchas situaciones en las que los rizos blancos de las ovejas o los pelos m¨¢s largos de otros bichos sirvieron para dar cierta calidez a la vida interior, ya fuera una cueva, un castillo o una tienda de campa?a. Pero puestos a hablar de cuestiones que tienen que ver c...

Es de suponer que cuando Homero se sentaba a escribir la Odisea lo hac¨ªa sobre una piedra sobre la que extend¨ªa una piel de oveja que le mantuviera las posaderas calentitas. Y as¨ª habr¨¢ sido a trav¨¦s de la historia, con muchas situaciones en las que los rizos blancos de las ovejas o los pelos m¨¢s largos de otros bichos sirvieron para dar cierta calidez a la vida interior, ya fuera una cueva, un castillo o una tienda de campa?a. Pero puestos a hablar de cuestiones que tienen que ver con el dise?o contempor¨¢neo, ya se puede cambiar el registro y centrarse en tiempos m¨¢s cercanos. Concretamente, a mediados del siglo XX, cuando surge en los pa¨ªses n¨®rdicos ¡ªespecialmente en Dinamarca¡ª una tipolog¨ªa de mueble que, por esos caprichos de la naturaleza humana, causa furor y vuelve al cabo de los a?os. Son los sillones de peque?o tama?o, ligeros de peso, muy compactos de figura, blancos como la nieve y tapizados de pelo, preferiblemente de oveja, pero en su defecto con pelos m¨¢s largos, sint¨¦ticos o incluso con una m¨¢s modesta tapicer¨ªa de rizo.

Su uso se hizo en aquel entonces viral ¡ªaunque en esa ¨¦poca no hab¨ªa redes sociales y la palabra viral ten¨ªa otras acepciones¡ª y, sin embargo, aquella querencia inicial ha vuelto ahora con estruendo. En plena celebraci¨®n del invierno, el momento no puede ser m¨¢s apropiado para hacerse con uno de estos elementos semipeludos, que casi acompa?an como una mascota. En su tiempo hubo quien llev¨® el tema hasta la literalidad. Muchos no conocer¨¢n el trabajo de los artistas franceses Fran?ois-Xavier y Claude Lalanne, que inundaron los salones m¨¢s elegantes con sus moutons de laine. Eran unos asientos realizados en bronce y lana, que reproduc¨ªan de manera literal una oveja como dios manda y que fueron a parar al cuarto de estar de gentes como Yves Saint-Laurent y Pierre Berg¨¦ a quienes no se les escapaba una. Era 1966. Eso para los que crean que inventan algo nuevo.

Hace unos a?os, los californianos hermanos Haas, que tanto predicamento tienen en el mundo de coleccionistas de dise?o de autor, dieron rienda suelta a su retorcida imaginaci¨®n para crear unas criaturas animalescas de tinte surreal entre las que se encuentran numerosos asientos peludos, algunos con patas y cuernos y una imagen poco amigable. El a?o pasado fue el talentoso mexicano Fernando Laposse quien present¨® un sill¨®n de pelo largo. En ese caso de largas fibras de agave que parecen pelo animal, un paso m¨¢s desde sus primeros peque?os bancos llamados Dogs, tambi¨¦n en esa fibra de pelo largo que les da la impresi¨®n de animales dom¨¦sticos. Todos ellos son piezas de ediciones limitadas que se encuentran en el entorno de las galer¨ªas.

Sin embargo, esa tipolog¨ªa, expresada de un modo m¨¢s pr¨¢ctico y sin afanes art¨ªsticos, se puede encontrar en diversas tiendas dedicadas al mobiliario vintage mid-century, especialmente escandinavo, con muchos ejemplos en los que se combina habitualmente con una estructura de madera, de un modo sencillo y natural. A veces se les a?aden detalles en metal, una combinaci¨®n que aporta contraste y refinamiento. Entre las m¨¢s buscadas est¨¢ el modelo Clam, dise?ado con forma de almeja abierta por el arquitecto dan¨¦s Philip Arctander en los a?os cuarenta del pasado siglo y que ejerci¨® gran influencia en sus contempor¨¢neos, sirviendo de inspiraci¨®n para muchos asientos de la ¨¦poca y posteriores.

Tambi¨¦n es una tipolog¨ªa reproducida hoy por varias empresas dedicadas al dise?o industrial como son &tradition, Gubi, B&B Italia, Menu, Baxter... Por ejemplo, &tradition reproduce ahora el sill¨®n Little Petra dise?ado por Viggo Boesen en 1937; mientras que Gubi ha reeditado el asiento Pacha dise?ado por Pierre Paulin en 1975; B&B Italia lo ha hecho con el Bambole de Mario Bellini de 1972, ¨¦poca en que se experiment¨® con nuevos materiales y modos de estructurar las tripas de un asiento dando lugar a esas formas compactas perfectas para los tapizados de rizo blanco.

De dimensiones relativamente reducidas y blandas, estos asientos son perfectos para espacios peque?os. Sin duda, el mullido y la calidez son su principal reclamo, adem¨¢s de la textura que aporta el pelo o el tejido de rizo en su caso, y del color blanco que subraya las l¨ªneas curvas de esos dise?os no exclusivos del entorno rural y que aportan un punto algo bohemio a cualquier interior.