Casas reformadas con la mejor energ¨ªa

M¨¢s de medio mill¨®n de casas rehabilitadas antes de 2026. Ese es el objetivo que se ha marcado el Gobierno en su estrategia para mejorar la eficiencia energ¨¦tica y combatir el cambio clim¨¢tico. Con ese volumen de rehabilitaciones, el Ejecutivo espera reducir las emisiones de di¨®xido de carbono en 650.000 toneladas al a?o. Y no cabe duda de que es una meta ambiciosa, ya que el promedio hist¨®rico de rehabilitaci¨®n se sit¨²a alrededor de 28.000 viviendas al a?o.

Para ello, primero se puso en marcha, en el verano de 2020, el...

M¨¢s de medio mill¨®n de casas rehabilitadas antes de 2026. Ese es el objetivo que se ha marcado el Gobierno en su estrategia para mejorar la eficiencia energ¨¦tica y combatir el cambio clim¨¢tico. Con ese volumen de rehabilitaciones, el Ejecutivo espera reducir las emisiones de di¨®xido de carbono en 650.000 toneladas al a?o. Y no cabe duda de que es una meta ambiciosa, ya que el promedio hist¨®rico de rehabilitaci¨®n se sit¨²a alrededor de 28.000 viviendas al a?o.

Para ello, primero se puso en marcha, en el verano de 2020, el Plan de rehabilitaci¨®n energ¨¦tica de edificios (PREE) y, ahora, con la llegada de los fondos europeos, se prev¨¦ que se destinen 5.8000 millones a diferentes programas de rehabilitaci¨®n, siempre con el foco puesto en la mejora de la eficiencia energ¨¦tica. Una estrategia com¨²n a Europa que aspira a duplicar la tasa de rehabilitaci¨®n en la pr¨®xima d¨¦cada para recortar as¨ª las emisiones de gases de efecto invernadero y reducir la pobreza energ¨¦tica. No es de extra?ar teniendo en cuenta que se considera que los edificios son responsables de aproximadamente el 40% del consumo de energ¨ªa as¨ª como del 30% de las emisiones as¨ª que, si se quiere llegar a la neutralidad clim¨¢tica en 2050, es imprescindible actuar.

No cabe duda de que la tarea es considerable. ¡°En general, tenemos un parque de viviendas muy envejecido y mal mantenido¡±, explica Felipe Pich-Aguilera, director del ¨¢rea de sostenibilidad de UIC Barcelona School of Architecture. Hay un importante volumen de viviendas, propias del urbanismo desarrollista, que fueron construidas antes de la d¨¦cada de los 80. ¡°Son construcciones normalmente hechas apresuradamente, de poca calidad constructiva. Pensemos que hasta los 80 no existi¨® normativa generalizada que obligase a aislar t¨¦rmicamente los edificios¡±, sentencia Pich-Aguilera.

Ayudas y deducciones en el IRPF

Ahora, las ayudas p¨²blicas llegar¨¢n para intentar solventar un problema que viene de antiguo. Se repartir¨¢n en funci¨®n del ahorro energ¨¦tico conseguido. Quienes lleven a cabo intervenciones en la tr¨ªada de la eficiencia energ¨¦tica ¡ªenvolvente, sistemas de climatizaci¨®n y gesti¨®n energ¨¦tica inteligente¡ª no solo podr¨¢n lograr ahorros energ¨¦ticos de hasta el 70%, sino que adem¨¢s la subvenci¨®n podr¨ªa alcanzar hasta el 100% de lo invertido. Para actuaciones m¨¢s comedidas, con un menor ahorro, por ejemplo un cambio de ventanas, se contemplar¨¢ entre el 40 y 50% de la inversi¨®n. El m¨ªnimo para optar a las ayudas est¨¢ en un ahorro energ¨¦tico del 30%. Adem¨¢s de las ayudas, habr¨¢ deducciones en el IRPF establecidas en tres tramos: del 20% si se reduce la demanda de calefacci¨®n y refrigeraci¨®n de la vivienda al menos un 7%; un 40% si la reducci¨®n llega al 30% y un 60% si la calificaci¨®n energ¨¦tica pasa a A o B.

Aunque la realidad muestra que, al menos en el caso de las comunidades de vecinos, las rehabilitaciones no est¨¢n en su horizonte pr¨®ximo, entre otras cosas porque, seg¨²n una encuesta llevada a cabo por el Colegio de Administradores de Fincas de Madrid, el 80% de las obras en estos entornos se realiza por obligaci¨®n o necesidad. ¡°Hace falta informar y mucha conversaci¨®n con los vecinos¡±, asegura Dolores Huertas, directora del Green Building Council Espa?a y, casualmente, presidenta de su comunidad, aunque asegura: ¡°Los modelos de subvenci¨®n directa no deber¨ªan ser los mayoritarios: [los fondos] deber¨ªan servir tambi¨¦n para generar conocimiento, soluciones y, sobre todo, modelos para financiar cuando se retiren los fondos, para seguir con el mismo nivel de actividad trayendo financiaci¨®n privada que tiene inter¨¦s en invertir en este sector¡±, advierte Dolores Huertas, directora del Green Building Council Espa?a.

¡°Debemos ser ambiciosos y marcar objetivos altos, para que estas subvenciones sirvan de verdad y cambien la tendencia y el paradigma rehabilitador. Es una gran ocasi¨®n que debemos saber gestionar¡±, reflexiona Albert Grau, public affairs de Rockwool, empresa especializada en aislamientos. El hecho de que nos encontremos ante un punto de inflexi¨®n para crear un nuevo modelo que no se agote tras los a?os que duren los fondos europeos es una de las reivindicaciones de los expertos. ¡°Es una oportunidad que no podemos dejar pasar para generar un sector, el de la rehabilitaci¨®n, que en realidad tiene trabajo para los pr¨®ximos 30 a?os¡±, explica Huertas.

Seg¨²n las estimaciones del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, estos programas crear¨ªan m¨¢s de 188.000 empleos. ¡°La rehabilitaci¨®n en Espa?a tiene un potencial de creaci¨®n de puestos de trabajo mucho mayor que la mayor¨ªa de los sectores y, adem¨¢s, es un empleo 100% local y que invierte en local, tanto en materiales como en servicios. Por cada mill¨®n de euros invertido, se pueden generar cerca de 40 empleos entre directos e indirectos¡±, asegura Grau.

Acceso f¨¢cil

Una de las apuestas del Gobierno para asegurar el ¨¦xito de los programas es intentar pon¨¦rselo f¨¢cil a los vecinos, y para ello quiere crear oficinas de rehabilitaci¨®n para informar y que sean una suerte de ventanillas ¨²nicas para la tramitaci¨®n. Tambi¨¦n prev¨¦ la creaci¨®n de una especie de agente rehabilitador que se encargue de todo el proceso. ¡°Se trata de una figura t¨¦cnica porque conoce perfectamente c¨®mo se hace la rehabilitaci¨®n, pero tambi¨¦n tiene un alto nivel de gesti¨®n y no tiene que ser una persona ¨²nica, puede ser un equipo¡±, explica Huertas. La idea es activar modelos de ¡°llave en mano¡± que sean capaces de llevar a cabo toda la gesti¨®n desde la elaboraci¨®n de la documentaci¨®n a la solicitud de las ayudas hasta que se obtenga la financiaci¨®n.

El reto pasa por encontrar 500.000 vecinos que quieran rehabilitar sus viviendas y hacerlo antes de 2026. Pero no es el ¨²nico. ¡°Para m¨ª el gran fracaso ser¨ªa que despu¨¦s de 2026, de repente volvi¨¦ramos a las 30.000 viviendas rehabilitadas al a?o porque no hemos sido capaces de generar un sector. La tarea va a estar ah¨ª¡±, concluye Huertas.