Denise Coates, la reina de las apuestas y la segunda mujer m¨¢s rica del Reino Unido
Codirectora ejecutiva de la casa de juego digital Bet365 posee una fortuna estimada en casi 8.000 millones y ha sido condecorada por la reina Isabel por sus cuantiosas donaciones
Cuando en el Reino Unido se habla de aquellas mujeres que han roto el techo de cristal, nadie tose a Denise Coates. La ejecutiva mejor pagada del mundo, de 52 a?os, es conocida como ¡°la reina de las apuestas¡± en alusi¨®n al imperio que fund¨® partir de un modesto negocio familiar y que acaba de posicionarle como la segunda f¨¦mina m¨¢s rica del pa¨ªs, seg¨²n la lista anual del Sunday Times. Hasta hace poco, el grueso de brit¨¢nicos no habr¨ªa podido reconocer por la calle el rostro de esta empresaria del juego online que siempre ha mantenido un perfil p¨²blico muy discreto. Pero la incursi¨®n de los tabloides en las pol¨¦micas obras de su nueva y fabulosa mansi¨®n ha cambiado las cosas.
En la cartera de Denise Coates no sobresale tanto una fortuna estimada en m¨¢s de 7.000 millones de libras (m¨¢s de 7.700 millones de euros) como su propio sueldo en calidad de codirectora ejecutiva de la casa de apuestas digitales Bet365 (gesti¨®n que comparte con su hermano John), que viene superando con creces los 200 millones de libras anuales (221 millones de euros). Y a esa cifra hay que sumar los jugosos dividendos de una firma que se expandi¨® sobre el mercado abonado de las islas brit¨¢nicas donde se apuesta sobre todo, ya sea resultados electorales, condiciones climatol¨®gicas o el nombre de un nuevo beb¨¦ de la casa real. La otra cara de la moneda del ¨¦xito empresarial han sido las cr¨ªticas a un negocio que alimenta la adicci¨®n de los lud¨®patas, e incluso de menores conectados a la red.
Pero en el curr¨ªculo oficial de Coates sigue pesando m¨¢s la historia de una emprendedora dispuesta a arriesgar mucho con una sola carta bajo la manga: la de las oportunidades que brindaba el incipiente Internet de mediados de los a?os 90. Nacida en el seno de una familia cat¨®lica de Stoke-on-Trent (centro de Inglaterra), Denise desempe?¨® trabajos varios en la peque?a cadena de casas de apuestas propiedad de su padre hasta enrolarse en la Universidad de Sheffield para estudiar econometr¨ªa. Regres¨® al negocio familiar con ideas nuevas, se hizo cargo de la contabilidad y acab¨® gestion¨¢ndolo, aunque frustrada por las limitaciones de sus hechuras. Fue entonces cuando solicit¨® un abultado pr¨¦stamo, poniendo la empresa como garant¨ªa, y se dedic¨® a lo largo de un a?o a crear el sitio web Bet365.com desde el encierro de una caravana aparcada en un aparcamiento local. Lanzaba la compa?¨ªa en 2001 y, s¨®lo cuatro a?os m¨¢s tarde, los r¨¦ditos obtenidos le permitieron desprenderse de todos sus chiringuitos f¨ªsicos de apuestas (que vendi¨® a la competencia por m¨¢s de 44 millones de euros). El universo de su negocio del juego iba a ser netamente digital.
En su Stoke natal, Denise (con el nombre a secas la conocen los lugare?os) sigue siendo aquella chica tan lista que logr¨® construir una de las compa?¨ªas de apuestas m¨¢s lucrativas del mundo, al tiempo que ha creado 3.000 empleos en esta localidad donde Bet365 sigue teniendo su sede principal. Su hermano John preside el club de f¨²tbol local Stoke City, del que es uno de los ejecutivos el marido de la empresaria, Richard Smith. La pareja tiene cinco hijos, cuatro de los cuales fueron adoptados de una misma familia. Nunca han trascendido los detalles de aquella adopci¨®n, y ni tan siquiera se sabe si el quinto reto?o del matrimonio es hijo biol¨®gico.
Tal es el cerrojo que Denise Coates ha impuesto a su vida privada, acotando adem¨¢s sus comparecencias p¨²blicas a contados actos del ¨¢mbito laboral o a esa foto que le tom¨® la prensa esgrimiendo orgullosa la medalla del CBE (comandante de la orden del imperio brit¨¢nico) impuesta por la reina Isabel como valoraci¨®n de sus servicios al mundo empresarial y a la comunidad. Este ¨²ltimo reconocimiento responde a los m¨¢s de 110 millones de euros que ha dedicado a diversas ONG, tanto brit¨¢nicas como del extranjero.
Para sus nuevos vecinos del condado de Cheshire (noroeste ingl¨¦s) el nombre de Denise Coates significa, sin embargo, un incordio. Para los tabloides brit¨¢nicos viene siendo un fil¨®n desde hace a?o y medio. A lo largo de esos meses, la prensa amarilla ha ido destilando detalles sobre el proyecto de gran mansi¨®n de la empresaria del juego, que incluir¨¢ un gran lago con sus barcazas, establos, pistas de tenis, un circuito de ciclismo y sobre todo una extensa valla con seguridad privada las 24 horas del d¨ªa. En su esfuerzo por hacerlo realidad, la promotora ha intentado ¡°eliminar¡± las granjas circundantes a base de su millonario talonario. Lo ha conseguido en muchos casos, con la ambici¨®n no s¨®lo de ganar espacio sino de asegurarse un aislamiento total.
Coates sigue sin decir palabra sobre esa pol¨¦mica que le ha afeado la imagen en los medios privilegiados de la campi?a inglesa, aunque no haya modificado un ¨¢pice su etiqueta de hero¨ªna entre las gentes Stoke-on-Trent. La ¡°chica de Stoke¡±, la nieta de un minero e hija de un hombre hecho a s¨ª mismo que mont¨® un negocio local, les ha demostrado que se puede volar muy alto para acabar aterrizando en las listas de grandes Fortunas del Sunday Times o Forbes.
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