El millonario divorcio del que habla todo el Reino Unido
La exesposa de un oligarca ruso demanda a su hijo al que acusa de conjurarse con su padre para que no cobre los 600 millones que reclama como pensi¨®n
¡°Imaginen lo que es ser demandado por tu propia madre¡±, ha sido el lamento de Temur Akhmedov, el hijo mayor de un oligarca ruso que a partir de esta semana afronta ante la Alta Corte de Londres una demanda promovida por su propia progenitora. La querellante, Tatiana Akhmedova, lleva a?os litigando en los tribunales para cobrar los 600 millones de euros que reclama a su exmarido como pensi¨®n tras la ruptura matrimonial. A pesar de esa astron¨®mica cantidad ¡ªde conseguirse, significar¨ªa el divorcio m¨¢s caro en la historia del Reino Unido¡ª, o del superyate, el Aston Martin, las obras de Andy Warhol y otros bienes comunes que tambi¨¦n est¨¢n en juego, el foco de la atenci¨®n medi¨¢tica se ha desviado hacia la decisi¨®n de la mujer de sentar a su hijo en el banquillo. Ella alega una conjura del hijo y su padre para ocultar la fortuna familiar y despojarla de lo que considera suyo.
En este caso que los tabloides brit¨¢nicos siguen al detalle ¡ªaunque tambi¨¦n la prensa de rigor viene dando cuenta¡ª, ninguno de los protagonistas resulta especialmente simp¨¢tico entre el p¨²blico. Tatiana, de 52 a?os y residente en Londres, ha seguido llevando un lujoso tren de vida desde que decidiera separarse, en 2003, de Farkhad Akhmedov, 13 a?os mayor. Las disputas legales que entra?¨® el divorcio, todav¨ªa en v¨ªas de dirimirse en tribunales de hasta cinco pa¨ªses (desde Rusia a EE UU, pasando por el para¨ªso fiscal de Liechtenstein), cosecharon el primer ¨¦xito para la esposa cuando el Tribunal Superior de Londres dictamin¨®, hace solo cuatro a?os, que su expareja deb¨ªa compensarle con el 41,5% de su fortuna, los 600 millones de euros de la discordia. Farkhad adujo que no contaba con ese capital y no pag¨®. Tatiana ha percibido desde entonces ¡°solo¡± 5,7 millones de euros. En su denuncia ante la Alta Corte, subraya que Temur ha ejercido de ¡°lugarteniente¡± del padre para ocultar sus activos en el extranjero e impedirle de ese modo hincar el diente en los verdaderos haberes del exmarido.
El primog¨¦nito, de 27 a?os, tampoco aparece como un angelito en esta historia. A instancias de su madre, dos recientes ¨®rdenes judiciales permitieron acceder a su correo electr¨®nico y registrar el m¨¢s que lujoso apartamento que posee en el centro de la capital brit¨¢nica ¨Csu valor en el mercado lo dice todo: unos 35 millones de euros-, donde fueron incautados casi seis decenas de dispositivos inform¨¢ticos. Temur huy¨® entonces a Mosc¨² para evitar que la incautaci¨®n del pasaporte ¨Cdecretada por el juez- le obligara a permanecer en el Reino Unido, limitando adem¨¢s sus gastos a 3.300 euros por semana. Se trata de un joven, hoy de 27 a?os, que una d¨¦cada antes hab¨ªa recibido como regalo un jeep Mercedes de casi 130.000 euros o el piso multimillonario en el que resid¨ªa mientras estudiaba en la London School of Economics.
La documentaci¨®n recabada en el registro de su opulento h¨¢bitat londinense probar¨ªa, seg¨²n los abogados de Tatiana Akhmedova, c¨®mo Temur ejerci¨® de c¨®mplice de su padre a la hora de encubrir la transferencia de bienes y cuentas familiares a localizaciones dif¨ªciles de identificar por su opacidad fiscal. ¡°Los tribunales brit¨¢nicos est¨¢n atornillando a los rusos y a los ¨¢rabes¡±, reza uno de los mensajes que habr¨ªan intercambiado padre e hijo, y que este lunes fueron expuestos ante la Alta Corte de Londres.
Que una madre lleve a su hijo ante los tribunales es una cuesti¨®n dif¨ªcil de digerir incluso para un juez. Por eso, la representaci¨®n legal de Akhmedova se esforz¨®, en la primera vista del caso celebrada este lunes, en caracterizar a Temur como un ni?o malcriado que har¨ªa cualquier cosa por retener el lujoso estilo de vida que sostiene su padre. En este punto se ha recordado la benevolencia del progenitor cuando Temur, en sus primeros pinitos en la Bolsa de Londres, lleg¨® a perder hasta 35 millones de libras.
Lo que Tatiana ha expuesto ante el magistrado londinense es la complicidad de su hijo mayor en una campa?a orquestada para que no percibiera ni un penique m¨¢s de los bienes gananciales durante su matrimonio. Preguntada sobre el hermano menor, Edgar (23 a?os), Akhmedova no pone objeci¨®n a que se haya beneficiado de los millones de libras remitidos por su padre a lo largo de los a?os. ¡°Edgar nunca ha estado implicado en las triqui?uelas de Temur a la hora de ayudar a mi exmarido a ocultar sus verdaderos bienes y ganancias. Quiz¨¢ mi hijo mayor fue manipulado¡¡±. A lo que este ha respondido: ¡°Quieres castigarme por lo que mi padre no te pag¨®¡±. Entre todos los culebrones, y con permiso del televisivo The Crown, el de los Akhmedov se lleva la palma en esta temporada.
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