El millonario m¨¢s joven del mundo: 2.700 millones gracias a una droguer¨ªa en la que no trabaja

Quien haya estado en alg¨²n momento en Berl¨ªn, o en casi cualquier otra ciudad alemana, probablemente se habr¨¢ encontrado con una de sus coloridas tiendas dm. Ese nombre, dm, son las siglas de la cadena Drogerie Markt y como se conoce a la que lleva siendo durante 20 a?os una de las droguer¨ªas y parafarmacias m¨¢s famosas del pa¨ªs, como aseguran las encuestas germanas. Pero detr¨¢s de esos escaparates que esconden cepillos de dientes y pa?ales a buen precio hay una familia con buen olfato empresarial que ha dejado estas semanas su anonimato tan bien custodiado para generar titulares donde prima la palabra ¡°millones¡±: los Lehmann.

Quien hoy se ha convertido en protagonista es el m¨¢s joven y desconocido de estas dos sagas, Kevin David Lehmann. Ha sido la revista Forbes quien le ha impulsado al estrellato al afirmar que el muchacho es la persona joven milmillonaria m¨¢s rica del mundo: acumula 3.300 millones de d¨®lares, es decir, unos 2.770 millones de euros. Solamente tiene 18 a?os, cumplidos el pasado mes de septiembre. Fue entonces cuando pudo cobrar ese dinero y obtener autom¨¢ticamente el estatus de rico oficial.

Hay que remontarse a la Alemania de medio siglo atr¨¢s para conocer el origen de la riqueza del joven Lehmann. Antes que ¨¦l est¨¢n los Werner, fundadores de dm, quienes crearon la empresa en 1973 y a quienes todav¨ªa pertenece. Fue G?tz Werner, el cabeza de familia, quien decidi¨® abrir la primera de estas tiendas en Karlsruhe, una ciudad de algo m¨¢s de 300.000 habitantes al sudoeste de Alemania, entre Stuttgart y la frontera con Francia. En 1974 se uni¨® a Werner un empresario local llamado Guenther Lehmann: el padre de Kevin David. Los Lehmann ten¨ªan un negocio familiar de tiendas de alimentaci¨®n llamado Pfannkuch, unos exitosos supermercados fundados a finales del siglo XIX en la misma ciudad y que hab¨ªan llegado a las 120 sucursales antes de la Segunda Guerra Mundial, pero que tras ella se redujeron a la mitad.

Fue en 1974 cuando Guenther Lehmann decidi¨® invertir, sin ning¨²n tipo de participaci¨®n ejecutiva, en la incipiente dm. Puso su dinero y vio c¨®mo este sub¨ªa como la espuma. Cuando las droguer¨ªas empezaron a crecer, superaron todas las expectativas e incluso el tama?o de Pfannkuch, que Lehmann le vendi¨® a la cadena Spar en 1998. Entonces, Lehmann se convirti¨® en millonario. Seg¨²n Forbes, el padre tiene ahora unos 3.200 millones de d¨®lares, m¨¢s de 2.680 millones de euros, y ocupa el puesto 616 en fortunas del planeta.

Guenther Lehmann decidi¨® hace cuatro a?os ceder la mitad de su fortuna a su hijo y heredero: Kevin David. El joven solo ten¨ªa 14 a?os, y no fue hasta el pasado septiembre cuando pudo hacerse con ese fideicomiso que ahora ha dado un resultado de casi 2.800 millones de euros y un puesto de honor en una de las listas m¨¢s observadas del mundo.

Lehmann, como su padre Guenther, no trabaja en dm. Eso lo hacen los Werner, aunque en 2011 G?tz Werner dio un paso atr¨¢s: primero cedi¨® el 50% de su fortuna a una fundaci¨®n ben¨¦fica que ¨¦l mismo hab¨ªa creado desde dm a?os atr¨¢s, y despu¨¦s decidi¨® otorgarle un puesto en el consejo de administraci¨®n a su hijo Christoph, que en 2019 se convirti¨® en presidente de las droguer¨ªas. Todo un imperio que ingresa, seg¨²n sus propias cifras, 12.000 millones de euros anuales. El minorista es la farmacia de Alemania con mayor facturaci¨®n y alrededor de 40.400 empleados en m¨¢s de 2.000 tiendas donde se venden 12.500 productos distintos a m¨¢s de 1,7 millones de clientes cada d¨ªa. Adem¨¢s de en su pa¨ªs, est¨¢n presentes en otros 12, sobre todo Austria (con casi 400 tiendas), Hungr¨ªa, Republica Checa, Eslovaquia y Croacia. En total, 62.600 empleados en m¨¢s de 3.700 tiendas, adem¨¢s de otros 3.100 en sus centros de distribuci¨®n.

Se sabe poco del joven Kevin David Lehmann. Una foto supuestamente suya aparece en algunos perfiles de redes sociales no verificados. Se cree que vive en Alemania, pero no se sabe nada m¨¢s. Tampoco de su padre, Guenther, del que tampoco hay fotograf¨ªas ni informaci¨®n, oficial o extraoficial. Ni siquiera se conoce su influencia dentro de dm ni su relaci¨®n con sus compa?eros de viaje desde hace casi 50 a?os.

Los Werner, como propietarios y dirigentes de una gran empresa, cuentan con algo m¨¢s de exposici¨®n. El cabeza de familia, G?tz, de 77 a?os, recibi¨® en 2014 un premio nacional por el trabajo a toda una vida dedicada al desarrollo de empleo sostenible, y en mayo de 2019 la Orden del M¨¦rito por sus servicios. Werner ha tratado de convertir a dm en una empresa ejemplar donde el trabajador sea el centro; de hecho, su eslogan es ¡°Una empresa est¨¢ ah¨ª para las personas, no al rev¨¦s¡±, hacen muchas iniciativas sociales, forman a j¨®venes aprendices o destinan, cada viernes, el 5% de su recaudaci¨®n a proyectos educativos.

Esa forma de ver el mundo tambi¨¦n se aplica al que es desde hace 15 a?os el proyecto vital de Werner, que es tambi¨¦n fil¨®sofo y ha sido profesor de la universidad de Karlsruhe. Ha creado una asociaci¨®n llamada Unternimm die Zukunft (Toma el futuro), con la que pretende difundir la idea de la necesidad y la posibilidad de crear una renta m¨ªnima universal para todos los ciudadanos, que se financiar¨ªa a trav¨¦s del IVA de todos los productos, que deber¨ªa acercarse al 50%. Un ingreso de unos 800 euros mensuales que, promulga, deber¨ªa ser un derecho constitucional para todos los ciudadanos.