Esta noche me entregar¨¢n el premio Diversa 2021. Se trata de unos premios que celebran la diversidad y a las personas que han colaborado con causas vinculadas a la comunidad LGTBI en nuestro pa¨ªs. Sin esperarlo, muchas personas me paran en la calle para agradecerme mi participaci¨®n en haber normalizado la homosexualidad haci¨¦ndola visible. Aunque agradecido me siento un poquito raro, ligeramente queer, ante esas afirmaciones, porque pienso que yo estaba en una situaci¨®n perfecta, trabajando en un muy poco pusil¨¢nime program...
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Esta noche me entregar¨¢n el premio Diversa 2021. Se trata de unos premios que celebran la diversidad y a las personas que han colaborado con causas vinculadas a la comunidad LGTBI en nuestro pa¨ªs. Sin esperarlo, muchas personas me paran en la calle para agradecerme mi participaci¨®n en haber normalizado la homosexualidad haci¨¦ndola visible. Aunque agradecido me siento un poquito raro, ligeramente queer, ante esas afirmaciones, porque pienso que yo estaba en una situaci¨®n perfecta, trabajando en un muy poco pusil¨¢nime programa de televisi¨®n de gran audiencia, para enviar, m¨¢s que un mensaje, una declaraci¨®n de estilo. Ser gay, libre y exitoso. Incluso feliz, siendo todo eso a la vez. Y tambi¨¦n que en verdad nunca hab¨ªa sido de otra manera. No solo nac¨ª gay, amo, sue?o y despierto bastante gay.
Es cierto que mis padres, en Caracas, disfrutaban de amigos que eran gais y que, al menos que yo recuerde, no ocultaban ni disimulaban su naturaleza. Reconozco que me fascinaban tanto ellos como la actitud de mis padres con ellos. Ese fue uno de los grandes privilegios de mi vida. No pas¨® mucho tiempo en que hiciera mis propios amigos gais y que uno de ellos, Marco Antonio Ettedgui, me dijera una frase fundamental: ¡°Ser gay es lo mejor del mundo¡±. Por eso de todas las nomenclaturas que lo homosexual recibe, yo defender¨¦ siempre gay. Aprovecho para admitir que con lo de LGTB me parece como si prefirieran escudarse tras esa protecci¨®n de lo pol¨ªticamente correcto que galvaniza todo. Dicho queda. Aparte de gay, tambi¨¦n me gusta el t¨¦rmino queer, porque tiene m¨¢s lucha al tiempo que m¨¢s alegr¨ªa.
Me parece que todo esto queda plenamente plasmado en la serie documental Joyas Queer de Elio Colen, que se puede ver a trav¨¦s de Filmin, donde despampanantes h¨¦roes de la noche barcelonesa relatan como construyeron sus personajes, sus vidas y sus particulares contribuciones a la comunidad. Quiz¨¢s yo sea un h¨¦roe m¨¢s adulto y aburguesado, pero admiro a La Abelarda, a Manuel o a La Fernanda, su delirio y su falta de rencor. En especial ese sentido del humor que baja y sube las empinadas escaleras entre lo vulgar y lo sublime. Soy deudor de esa locura. De esa fuerza. As¨ª que a ellas y a ellos quiero dedicar el premio de esta noche.
Tambi¨¦n podr¨ªa dedic¨¢rselo a Lilibet Diana, la reci¨¦n nacida hija de los tambi¨¦n despampanantes duques de Sussex. Estoy convencido, aunque sin pruebas, de que la idea del nombre vino de Oprah Winfrey, que es mucho m¨¢s que una productora para los exiliados de la familia real inglesa en California. Redirige sus vidas, vamos, que ha venido a ocupar el puesto que antes ten¨ªa la reina Isabel. Les ofrece soporte econ¨®mico, protocolo y contribuye a convertirlos en reyes medi¨¢ticos. Bautizando a la ni?a con los nombres de dos mujeres que en la vida real jam¨¢s se llevaron bien, el equipo Sussex-Winfrey marca otro gol. Sellan la paz, cuarenta a?os despu¨¦s de celebrarse el matrimonio entre Carlos y Diana, y reactivan el relato mon¨¢rquico desde una rep¨²blica federal. Ese mundo que va a conocer Lilibet Diana ser¨¢ rico, pero mucho m¨¢s inclusivo, diverso, LGTBI e incluir¨¢ todas las letras del abecedario. Me encantar¨ªa conocerla, vestido de hada madrina y decirle eso que me dijo Marco Antonio Ettedgui en Caracas cuando ten¨ªa 15 a?os: ¡°Ser gay es lo mejor del mundo¡±.
Dec¨ªrselo no significa que yo quiera que sea gay, pero s¨ª que sepa que es algo bueno, que no se trata de un castigo ni tampoco una anormalidad. Con el premio de esta mi noche, asumo que ese es mi rol hist¨®rico: transmitir a nuevas generaciones lo que otras me han ense?ado. Y eso me reconfortar¨ªa tanto como ocurre con mi diminuto y narcisista granito de arena agitando y vociferando mi pluma en televisi¨®n.