Las supermodelos de los noventa se re¨²nen para celebrar medio siglo de poder del vestido blanco ibicenco
El Baluarte de Santa Luc¨ªa acoge un desfile conjunto de moda ¡®ad lib¡¯ con algunas de las firmas m¨¢s reconocidas de la isla y con presencia de modelos como Martina Klein, Vanesa Lorenzo o Ver¨®nica Blume
Las supermodelos Martina Klein, Vanesa Lorenzo o Ver¨®nica Blume, tres de los rostros m¨¢s conocidos de las pasarelas en los a?os noventa, han desfilado juntas de nuevo este s¨¢bado en Ibiza. El motivo: la celebraci¨®n del 50? aniversario del nacimiento del estilo ibicenco ad lib.
En Ibiza tienen ...
Las supermodelos Martina Klein, Vanesa Lorenzo o Ver¨®nica Blume, tres de los rostros m¨¢s conocidos de las pasarelas en los a?os noventa, han desfilado juntas de nuevo este s¨¢bado en Ibiza. El motivo: la celebraci¨®n del 50? aniversario del nacimiento del estilo ibicenco ad lib.
En Ibiza tienen bien aprendido que la moda es m¨¢s que ropa. La isla es uno de esos pocos lugares en los que pueden presumir de haber creado y exportado un estilo original y reconocible, el ad lib. Prendas aut¨®ctonas y artesanales pasadas por el filtro de la influencia hippy; simplificando mucho: vestidos blancos, con puntillas o volantes que inmediatamente evocan un paseo por las calles empedradas de Dalt Vila. As¨ª lo cree Mar¨ªa Fajarn¨¦s, consejera ejecutiva de promoci¨®n econ¨®mica y empresarial: ¡°Es un concepto reconocido en todo el mundo que hace que quien vea en cualquier rinc¨®n un vestido con influencia ad lib piense inmediatamente en Ibiza, evoque o recree sus vacaciones y desee o decida volver a la isla. Nuestra moda es un recuerdo¡±. Por ello, defiende, debe ser considerado un atractivo cultural y tur¨ªstico y es patrimonio propiedad del Consell d¡¯Eivissa, que hace varias d¨¦cadas intuy¨® su potencial y es due?o de la marca Adlib Ibiza.
Su apoyo se materializa en acciones de comunicaci¨®n o en promoci¨®n en ferias internacionales. Pero tambi¨¦n en un reglamento para que la etiqueta funcione como una denominaci¨®n de origen que garantice la esencia ligada a lo hecho en Ibiza, y ¡°delimite de forma objetiva a todos los que hagan uso fraudulento de la marca¡±, apunta la consejera. Porque el principal problema al que se enfrenta la ense?a salta a la vista al dar un paseo por cualquier mercadillo o calle comercial: la popularidad del estilo hace que las tiendas rebosen prendas de inspiraci¨®n ad lib, confeccionadas en pa¨ªses con mano de obra barata, que compiten con la artesan¨ªa local. El plan pasa precisamente por reivindicarla frente a un consumidor cada vez m¨¢s concienciado con la historia de una prenda. ¡°Lo aut¨¦ntico se reconoce muy r¨¢pido¡±, sostiene Alberto Serra, de la firma Vintage Ibiza. ¡°No tiene nada que ver [con la copia], ni por el tipo de tejidos ni por los acabados¡±.
¡°Esta es una isla muy peque?a¡±, a?ade Serra, ¡°hay muy poquita industria y la moda ad lib representa una parte muy importante¡±. El dise?ador exhibi¨® la tarde del s¨¢bado su colecci¨®n para el verano de 2022 en el Baluarte de Santa Luc¨ªa, junto a los desiguales desfiles de otras 15 casas de moda y accesorios. Nieves ?lvarez se encarg¨® de conducir una velada en la que, seg¨²n la propia modelo, se buscaba que ¡°la moda volviese a brillar¡± tras la pandemia. Sus compa?eras de profesi¨®n Klein, Lorenzo y Blume inauguraron la ceremonia luciendo prendas del archivo de Lluis Ferrer, uno de los hist¨®ricos de esta pasarela que se estren¨® en 1971. Detr¨¢s de ellas llegaron Neus Bermejo o Nuria Rothschild, vestidas con los encajes de Tony Bonet, las joyas de Elisa Pomar o los codiciados conjuntos de Charo Ruiz, que se venden en el templo del lujo digital Net-a-porter.
Lo ad lib se mama en las Pitiusas, recuerda el dise?ador Tony Bonet. ¡°De peque?o me escapaba de casa y siempre estaba en la de mi vecina. En aquella ¨¦poca se llevaba la confecci¨®n a las casas, costura a comisi¨®n, y ella cos¨ªa para una de las precursoras de la moda ad lib. Un d¨ªa nos dijo a mi hermano y a m¨ª que o la ayud¨¢bamos con los botones o nos ¨ªbamos¡±. El creativo present¨® el s¨¢bado una colecci¨®n en colaboraci¨®n con Melania Piris, otra de las veteranas de la pasarela. Ella evocaba tras el espect¨¢culo los inicios hace medio siglo: ¡°A veces era en un restaurante, otras ¨ªbamos todos a Formentera, otras en Vara del Rey¡ era menos formal, pero tuvo much¨ªsima repercusi¨®n desde el principio. La moda que sal¨ªa de Espa?a era de Ibiza¡±.
Cuando los primeros hippies aterrizaron en la isla, quedaron prendados de las vestimentas tradicionales, de la lencer¨ªa de las ibicencas, de los materiales naturales y del trabajo manual y los incorporaron a su estilo relajado. Una mujer visionaria, la promotora tur¨ªstica Smilja Mihailovitch, vio la potencia de aquellas composiciones y decidi¨® sacarle partido. ¡°Era antes de la Transici¨®n y seg¨²n qu¨¦ palabras no gustaban¡±, se?ala Bonet, ¡°as¨ª que [el empresario] Jos¨¦ Colomar le puso el nombre de ad libitum, que significa libertad, y a partir de ah¨ª naci¨® el lema ¡®viste como quieras, pero con estilo¡±. Un estilo que es ep¨ªtome de la vida relajada en la isla y que no triunf¨® por casualidad: ya en aquellas primeras citas se pon¨ªa en funcionamiento toda una maquinaria de promoci¨®n que se ha mantenido engrasada desde entonces.
En las ediciones de los setenta acud¨ªan a esta cita con la moda famosos enamorados de Ibiza como Julio Iglesias o la actriz Ursula Andress. En 1973 y 1974 asistieron como dise?adores invitados Elio Berhanyer y Manuel Pertegaz, y potentes firmas de belleza como Revlon o Lanc?me ya respaldaban el evento que pronto se convirti¨® en la reuni¨®n que inauguraba el verano. El esp¨ªritu libre del que habla la est¨¦tica quedaba relegado a la pasarela. Quiz¨¢ por ello, porque ha sido una marca cuidada, Adlib Ibiza sigue en plena forma 50 a?os despu¨¦s.