Taylor Swift o c¨®mo convertirse en la hero¨ªna de la historia
La cantante no solo ha crecido gracias a sus ¨¦xitos o a los premios que de la industria, sino a la narrativa que ha creado letra tras letra, donde introduce fragmentos de su vida
En 2016, despu¨¦s de que Kim Kardashian y Kanye West publicasen una llamada privada con Taylor Swift que dejaba a la estrella del pop en una posici¨®n algo comprometida ante una audiencia que disfruta empap¨¢ndose de las guerras entre celebrities, la cantante public¨® en sus redes sociales un largo comunicado que culminaba en una frase que inmediatamente pas¨® a formar parte de la cultura pop: ¡°Agradecer¨ªa enormemente dejar de formar parte de esta narrativa¡±. En 2...
En 2016, despu¨¦s de que Kim Kardashian y Kanye West publicasen una llamada privada con Taylor Swift que dejaba a la estrella del pop en una posici¨®n algo comprometida ante una audiencia que disfruta empap¨¢ndose de las guerras entre celebrities, la cantante public¨® en sus redes sociales un largo comunicado que culminaba en una frase que inmediatamente pas¨® a formar parte de la cultura pop: ¡°Agradecer¨ªa enormemente dejar de formar parte de esta narrativa¡±. En 2017, pronunci¨® la misma frase, esta vez dentro de su videoclip Look what you made me do, ri¨¦ndose de s¨ª misma y apropi¨¢ndose de uno de los momentos de su pasado, en el que su mala reputaci¨®n estuvo a punto de dinamitar la imagen p¨²blica de chica buena que hab¨ªa tardado a?os en construir. No es casualidad que aquel disco se titulase, precisamente, Reputation.
La escritora y guionista Nora Ephron escribi¨® en una ocasi¨®n que ¡°cuando te resbalas con una c¨¢scara de pl¨¢tano, la gente se r¨ªe de ti, pero si t¨² cuentas que te has resbalado con una c¨¢scara de pl¨¢tano y eres t¨² quien se r¨ªe, dejas de ser la v¨ªctima para transformarte en la hero¨ªna de la historia¡±. De lo que hablaba la autora era de c¨®mo controlar la narrativa para ser uno mismo el due?o de las historias que se quieren contar, y Taylor Swift es toda una experta en este campo: a lo largo de su carrera, la cantante no solo ha crecido gracias a sus ¨¦xitos musicales o a los premios que le ha concedido la industria, sino tambi¨¦n a la narrativa que ha creado canci¨®n tras canci¨®n, letra tras letra, donde siempre ha introducido trocitos de su vida m¨¢s p¨²blica para que la prensa, pero sobre todo sus fans, montasen en casa el puzle emocional que les ven¨ªa con cada ¨¢lbum. El ejemplo m¨¢s claro de esto se encuentra en la red social Tumblr. All¨ª, disco tras disco, los fans expon¨ªan teor¨ªas ¡ªcomo a qui¨¦n iba dirigida cada canci¨®n, a qu¨¦ ceremonia, gala o premio se refer¨ªa en cada estrofa o para qu¨¦ examiga apuntaba determinado dardo¡ª y esas teor¨ªas eran validadas por la propia Taylor Swift, que marcaba sutiles corazones en las publicaciones de aquellos admiradores que daban con la respuesta correcta.
En 2005, Taylor Swift firm¨® un contrato de 13 a?os de duraci¨®n con el sello Big Machine Records, dirigido por Scott Borchetta. El documento hizo posible la publicaci¨®n de su primer ¨¢lbum, titulado Taylor Swift, as¨ª como los cinco discos posteriores que la catapultar¨ªan a superestrella del pop: Fearless, Speak Now, Red, 1989 y Reputation. En 2018, coincidiendo con la finalizaci¨®n de su contrato, Taylor Swift se mud¨® a Universal Music, pero los derechos de las grabaciones originales de sus primeros seis ¨¢lbumes le fueron negados en un intento por retenerla en su antiguo sello, y fueron posteriormente vendidos al productor e inversor Scooter Brown como parte de su adquisici¨®n, junto a varios fondos de inversi¨®n, de Big Machine Records por una cifra de alrededor de 300 millones de d¨®lares. Con esto, Swift segu¨ªa teniendo los derechos de autor¨ªa, pero aquellos seis primeros ¨¢lbumes y las versiones finales de las canciones que todo el mundo conoce hab¨ªan dejado de pertenecerle. Taylor Swift hab¨ªa resbalado con una monta?a de c¨¢scaras de pl¨¢tano, y la ¨²nica manera de que convertirse en la hero¨ªna de la historia era haciendo lo que mejor sabe hacer: recuperar la narrativa.
En agosto de 2019, Swift anunci¨® un movimiento maestro: la artista iba a regrabar todos sus ¨¢lbumes publicados en Big Machine. Con ello, no solo recuperaba el control sobre su obra, sino que restaba valor a las grabaciones originales que hab¨ªa comprado Scooter Brown. El movimiento no ha sido ¨²nicamente estrat¨¦gico, sino tambi¨¦n emocional: al permitirse revisar y regrabar toda su obra, la artista, que acaba de publicar su ¨¢lbum Red, ha podido reescribir las letras que hab¨ªa plasmado con tan solo 22 a?os. Y es posible que la gran mayor¨ªa de los mortales no pueda empatizar con las luchas de poder y egos dentro de una industria que mueve millones, pero qui¨¦n no puede hacerlo con una mujer de 32 a?os que cuenta, desde la perspectiva y la calma que solo otorga el tiempo y la experiencia, c¨®mo le rompieron el coraz¨®n una d¨¦cada atr¨¢s y c¨®mo super¨® aquella ruptura.
Las nuevas ediciones de sus discos m¨¢s emblem¨¢ticos podr¨ªan haberse titulado de manera pr¨¢ctica: Red (Nueva versi¨®n) o quiz¨¢s Red (Edici¨®n 2021). Pero Swift ha puesto la guinda al pastel de la victoria al titularlos de una forma m¨¢s personal: Taylor¡¯s Version, ¡°la versi¨®n de Taylor¡±. Como si nos quisiera decir que las versiones anteriores no eran tan suyas y, por tanto, no tan v¨¢lidas, y que esta es, finalmente, su versi¨®n sin artificios, su historia, su verdad. Casi como si Swift supiera que, cuando la vida te da pl¨¢tanos, es buen momento para hacer un batido.