Britney Spears, sobre su tutela: ¡°Ten¨ªa que hacer lo que me dec¨ªan. Me llamaban gorda todos los d¨ªas. Nunca me sent¨ª tan desmoralizada¡±

En noviembre de 2021, con 39 a?os, Britney Spears recuper¨® la libertad gracias al movimiento #FreeBritney. Iniciado por sus fans y aupado por los medios, fue este grupo de personas quienes lograron que la jueza Brenda Penny pusiera fin a la tutela de la cantante tras m¨¢s de 13 en los que su vida personal y profesional estuvo bajo el control de su padre. El Tribunal Supremo de California, en Los ?ngeles, devolv¨ªa a la estrella el dominio sobre su d¨ªa a d¨ªa, su trayectoria y su dinero. Desde aquel momento, Britney Spears ha vuelto a ser Britney Spears: celebr¨® el fin de su tutela bebiendo su primera copa de champ¨¢n en 13 a?os, seis meses m¨¢s tarde se cas¨® con su pareja, el iran¨ª Sam Asghari y, recientemente, ha vuelto a la m¨²sica de la mano de Elton John con un tema titulado Hold me closer.

Y tras recuperar su vida, Britney Spears tambi¨¦n recupera poco a poco su narrativa y todo lo que, durante estos 13 a?os, se ha contado sobre ella mientras permanec¨ªa, por obligaci¨®n, en silencio. El relato m¨¢s revelador hasta el momento lo ha subido (y despu¨¦s eliminado) la propia cantante a YouTube, tras borrar, adem¨¢s, su hasta ahora muy activo perfil de Instagram. Se trata de un audio confesional de 22 minutos donde Spears habla largo y tendido sobre los abusos sufridos en los ¨²ltimos 15 a?os, as¨ª como de sus sentimientos hacia los miembros de su familia. La artista ha querido expresarse sin c¨¢maras, solo a trav¨¦s de su voz, y reconociendo haber rechazado entrevistas en televisi¨®n para poder contar bien su versi¨®n de la historia sin intermediarios: ¡°No obtengo nada compartiendo todo esto¡±, comenzaba explicando la cantante, ahora de 40 a?os. ¡°Tengo ofertas para hacer entrevistas con Oprah [Winfrey] y mucha gente, por montones, montones de dinero, pero es una locura. No quiero nada de eso. Para m¨ª, esto va m¨¢s all¨¢ de una entrevista formal¡±.

El relato de Britney Spears empieza con una disculpa. Todav¨ªa le cuesta hablar de lo sucedido y, mientras cuenta su historia, ella misma reconoce no ser capaz de comprender c¨®mo le pudo suceder todo lo que le sucedi¨® ni c¨®mo sus familiares lo permitieron: ¡°Realmente, no he compartido esto abiertamente porque siempre he tenido miedo del juicio. Y tambi¨¦n he sentido mucha verg¨¹enza¡±. A partir de ah¨ª, el relato es una pesadilla.

C¨®mo comenz¨® la tutela de Britney Spears

Despu¨¦s de mencionar que ahora se siente m¨¢s segura y en confianza para hablar, Spears explica c¨®mo fueron los or¨ªgenes de su tutela, que comenz¨® despu¨¦s de que la cantante hablase con acento brit¨¢nico con el doctor que prescrib¨ªa su medicaci¨®n; siempre seg¨²n su versi¨®n: ¡°Ten¨ªa 25 a?os cuando empez¨®, era extremadamente joven. Y recuerdo que muchos de mis amigos me escrib¨ªan, me llamaban y quer¨ªan verme¡±, confiesa Spears, ¡°a d¨ªa de hoy no s¨¦ qu¨¦ hice realmente, pero el castigo de mi padre me impidi¨® ver a nadie, y ten¨¦is que imaginar que nada de eso ten¨ªa sentido para m¨ª¡±.

Tres d¨ªas despu¨¦s del episodio con su m¨¦dico, Britney Spears fue hospitalizada en una instituci¨®n mental: ¡°Recuerdo que mi madre estaba sentada en el sof¨¢ y me dijo: ¡®Hoy vendr¨¢n unas personas aqu¨ª a hablar contigo¡¯. Nunca entend¨ª lo que quer¨ªa decir¡±. La artista confiesa que, cuatro horas m¨¢s tarde, con paparazis fuera de su casa tomando fotos, fue metida en una camilla y trasladada en una ambulancia a un hospital: ¡°Ahora s¨¦ que todo fue premeditado¡±, explica, ¡°no hab¨ªa drogas en mi sistema, alcohol, nada. Fue todo puro abuso¡±. Tras salir del hospital, su padre, Jamie Spears, se hizo cargo de sus finanzas y su vida mediante una tutela con la que controlaba todos los aspectos de su existencia.

Una vida tutelada

Despu¨¦s de pasar dos semanas en el hospital y salir de all¨ª, en sus propias palabras, ¡°completamente traumatizada¡±, Spears se vio forzada a volver a trabajar. Su vida ya no estaba en sus manos, sino en las de su padre. El primer proyecto, en 2008, fue un cameo en la serie de televisi¨®n C¨®mo conoc¨ª a vuestra madre e, inmediatamente despu¨¦s, comenz¨® con el que se convertir¨ªa en su nuevo ¨¢lbum ese mismo a?o, Circus. A partir de ah¨ª, empieza realmente la pesadilla de Britney Spears: ¡°Todo lo que recuerdo es que ten¨ªa que hacer lo que me dec¨ªan. Me dec¨ªan que estaba gorda todos los d¨ªas, que ten¨ªa que ir al gimnasio. Nunca me sent¨ª tan desmoralizada. Me hicieron sentir que no era nada. Y lo acept¨¦ porque ten¨ªa miedo¡±.

Acept¨® hacer cuatro giras y lanzar cuatro discos. M¨¢s tarde, tuvo su propia residencia en Las Vegas durante cuatro a?os y medio: ¡°Ten¨ªa 30 a?os y viv¨ªa bajo las reglas de mi padre¡±, confiesa la cantante, ¡°en Las Vegas, los bailarines jugaban, beb¨ªan y se divert¨ªan. Yo no pod¨ªa hacer nada¡±. Spears confiesa que en aquellos momentos se sent¨ªa completamente deshumanizada: ¡°Era como un robot. Ya todo me daba igual. No pod¨ªa ir a los sitios a los que quer¨ªa ir, no ten¨ªa dinero y todo era desmoralizante. Como tener a un grupo conspirando a mi alrededor, diciendo que era una superestrella, pero trat¨¢ndome como si no fuera nadie¡±.

La cantante confiesa que tuvo un momento de catarsis cuando grab¨® el que a d¨ªa de hoy sigue siendo su ¨²ltimo ¨¢lbum de estudio, Glory, en 2016: durante el proceso de grabaci¨®n y producci¨®n consigui¨® ganar algo de confianza en s¨ª misma y analizar lo que estaba sucediendo alrededor: ¡°Creo que con la confianza llega la claridad, lo que te hace pensar mejor y eso es lo ¨²ltimo que quer¨ªan que yo hiciera. Porque entonces, ?qui¨¦n tendr¨ªa el control?¡±. En esos momentos, la estrella del pop decidi¨® fingir que todo segu¨ªa igual mientras buscaba una salida: ¡°Ten¨ªa que interpretar el papel de que todo estaba bien porque si no, sab¨ªa que pod¨ªan hacerme da?o. As¨ª que me sentaba ah¨ª mientras mis amigos beb¨ªan alcohol y se divert¨ªan, y yo ni siquiera ten¨ªa mi propio dinero. Me sent¨ªa una monja¡±.

Britney es internada en una instituci¨®n

Pero el enga?o no pod¨ªa durar eternamente. Esta dosis extra de confianza provoc¨® que, en un momento dado, mientras la cantante preparaba un nuevo espect¨¢culo, se negase a realizar un movimiento de una coreograf¨ªa. Durante a?os, Britney nunca hab¨ªa dicho ¡®no¡¯, as¨ª que esta nueva actitud le trajo consecuencias: ¡°Al d¨ªa siguiente, me dijeron que me ten¨ªan que enviar a un centro. Y se supon¨ªa que deb¨ªa decir en Instagram que la raz¨®n era que mi padre estaba enfermo y yo necesitaba tratamiento¡±. Su padre la llam¨® por tel¨¦fono y ella le pregunt¨®, llorando, que por qu¨¦ le estaba haciendo eso. ?l le respondi¨® con una amenaza: ¡°No tienes por qu¨¦ ir, pero si no vas, iremos a los juzgados, habr¨¢ un gran juicio y lo perder¨¢s. Tengo mucha m¨¢s gente de mi parte que la que tienes t¨². As¨ª que ni se te ocurra no ir¡±.

Spears ingres¨® a una cl¨ªnica mental sintiendo que su coraz¨®n se hab¨ªa ¡°helado¡± y sin comprender lo que estaba sucediendo. El detalle m¨¢s doloroso para la cantante fue descubrir que, mientras ella estaba internada, su familia disfrutaba de su casa de la playa: ¡°Literalmente, me mataron¡±, explica Spears. ¡°Actuaba para miles de personas por la noche en Las Vegas, la emoci¨®n de ser una artista, las risas, el respeto¡­ Era una m¨¢quina. Yo era una maldita m¨¢quina, ni siquiera humana. Fue una locura¡±.

Aquel episodio fue el principio del fin de la pesadilla de Britney Spears: tal y como ella reconoce en su grabaci¨®n, varias voces empezaron a alzarse a su favor. Diversos documentales, papeleo legal filtrado a la prensa, declaraciones de amigos y bailarines y su extra?a cuenta de Instagram, en la que la artista parece querer pedir ayuda de forma indirecta, hacen el resto. Tras meses de lucha en los tribunales y a?os del activismo de sus seguidores, Britney consigui¨® la libertad.

Durante la grabaci¨®n, Spears habla en numerosas ocasiones de la parte m¨¢s dif¨ªcil de toda su historia: el abandono de su propia familia, incluida su madre, Lynne, que asegur¨® desconocer la situaci¨®n de su hija y que podr¨ªa haber luchado por conseguirle un buen abogado. ¡°?C¨®mo co?o pudieron hacer algo as¨ª y salirse con la suya? ?D¨®nde estaba Dios? ?Existe Dios?¡±, se pregunta la cantante en un momento de la grabaci¨®n.

¡°Comparto esto porque quiero que la gente sepa que soy un ser humano. Me siento victimizada despu¨¦s de estas experiencias y, ?c¨®mo puedo repararlo si no hablo de ello?¡±, concluye Britney Spears, quien ha estado tanto tiempo sin voz, que un audio de 22 minutos se queda demasiado corto.