Los reyes Felipe VI y Letizia y sus hijas cambian la misa de Pascua en Palma por la pasi¨®n viviente de Chinch¨®n

Los reyes Felipe VI y Letizia, junto a sus hijas, Leonor y Sof¨ªa, se mezclaron en la noche del S¨¢bado Santo, durante m¨¢s de hora y media, entre los espectadores y los actores de la pasi¨®n viviente de Cristo que se representaba en las calles y las plazas de la localidad madrile?a de Chinch¨®n. Su presencia supone una ruptura con una de las tradiciones m¨¢s arraigadas de la Casa Real espa?ola en Semana Santa, que es pasarla en Palma de Mallorca y asistir el Domingo de Resurrecci¨®n a la misa de Pascua que se celebra, cada a?o, en la catedral de la localidad balear, conocida como La Seu.

Los Reyes y sus hijas acudieron a la plaza de San Roque de Chinch¨®n en torno a las diez de la noche del s¨¢bado, para contemplar el pasaje de Cristo en el monte de los Olivos, una de las escenificaciones de esta tradicional representaci¨®n de la Semana Santa del municipio madrile?o, que este a?o celebraba su 60? edici¨®n. Se trata de una pasi¨®n viviente que, como cada S¨¢bado Santo, se representa en el casco hist¨®rico. Al anochecer, alrededor de 250 habitantes del pueblo daban vida al espect¨¢culo, que se trata del m¨¢s antiguo de toda la Comunidad. El evento religioso fue declarado Fiesta de Inter¨¦s Tur¨ªstico Nacional en 1980.

A su llegada, los Reyes, la princesa Leonor y la infanta Sof¨ªa se detuvieron durante m¨¢s de 10 minutos estrechando manos y posando en fotograf¨ªas con los espectadores de la pasi¨®n, muchos de ellos sorprendidos por su presencia, puesto que es la primera vez que acuden a este evento y su visita no hab¨ªa sido anunciada oficialmente. Es el segundo a?o consecutivo que los Reyes y sus hijas acuden por sorpresa en S¨¢bado Santo a alg¨²n lugar de la Comunidad de Madrid, ya que el a?o pasado visitaron un centro de refugiados de guerra ucranios en Pozuelo de Alarc¨®n.

El Rey y su familia siguieron el itinerario marcado para contemplar la segunda escena, una de las ca¨ªdas de Jes¨²s con la cruz, representada a escasos metros de ellos. Una vez pasaron los actores, de nuevo la Familia Real charl¨® con los espectadores, los pocos que se encontraban en aquellos momentos en las estrechas calles que conduc¨ªan hasta la plaza Mayor.

En el coso porticado de Chinch¨®n, en la oscuridad de la noche, miles de personas asist¨ªan al inicio de la representaci¨®n de El Calvario cuando llegaron los Reyes y sus hijas. Un revuelo progresivo de voces y disparos de fotos sigui¨® a los minutos posteriores a su entrada en la plaza. No obstante, los murmullos en esa zona fueron decreciendo conforme los cuatro avanzaban entre la multitud para contemplar, durante la siguiente media hora, la representaci¨®n teatral de la muerte de Jes¨²s sobre el escenario.

El mayor ba?o de masas tuvo lugar al final, despu¨¦s de escucharse por los altavoces la escena de la Resurrecci¨®n, que ten¨ªa lugar en otro punto del pueblo, y cuando los Monarcas y sus hijas se acercaron al Ayuntamiento, ubicado en las balconadas de la hist¨®rica plaza del municipio. Frente a la puerta del Consistorio, Felipe VI charl¨® con algunos representantes municipales mientras su esposa y sus hijas se acercaron a varios grupos de espectadores.

En el Ayuntamiento, los Reyes fueron obsequiados con productos t¨ªpicos de Chinch¨®n y un cuadro en recuerdo de la visita.

Esta visita a Chinch¨®n ha sido el primer acto p¨²blico de la princesa Leonor desde hace casi cuatro meses, cuando el 15 de diciembre visit¨® en solitario un centro de la Cruz Roja. Tambi¨¦n es la primera vez que la hija mayor de los Reyes aparece en p¨²blico desde la confirmaci¨®n de que, tras el bachillerato, comenzar¨¢ la carrera militar. Aunque en esta ocasi¨®n no ha habido convocatoria oficial y se trata de un acto de car¨¢cter privado de la Familia Real. El jueves, la Princesa de Asturias comenz¨® unas vacaciones de 10 d¨ªas de su curso acad¨¦mico en el Atlantic UWC College de Gales, donde se espera que en los pr¨®ximos meses complete el Bachillerato Internacional.

La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, tambi¨¦n estuvo presente en Chinch¨®n la noche del S¨¢bado Santo, presenciando algunas de las escenas desde uno de los balcones de la plaza Mayor, sin encontrarse con los Reyes en su recorrido.