Mar¨ªa Arnal: ¡°Dejemos de pensar en un futuro catastro?fico y elijamos la voz frente al silencio¡±
En su segundo largo junto a Marcel Bag¨¦s, ¡®Clamor¡¯, la cantante badalonesa se abandona a la exuberancia pop, las ninfas, las flores mutantes y la ficci¨®n ecol¨®gica
Cuando Maria Arnal (Badalona, 1987) nos invita a entrar en su camerino, envuelto en vapores de algodo?n recie?n planchado, esta? a punto de dar comienzo su concierto en el Festival Internacional de Arte Sacro (FIAS 2021). Desde el principio nos queda claro que la compositora es mujer de discurso clarividente, sin el menor asomo de arrogancia. Ovacionada por un pu?blico que amenaza con echar a volar en los Teatros del Canal, la Sibila de Badalona se muestra elegante: ¡°Madrid, sois un pu?blico acogedor y entregado. ?Canta?is por igual nuestros temas en castellano y en catala?n!¡±.
El debut musical de Maria Arnal i Marcel Bage?s, 45 cerebros y 1 corazo?n (2017), sento? ca?tedra. Ahora acaban de presentar Clamor, su segundo a?lbum, frente a El jardi?n de las delicias del Museo del Prado: ¡°Es bonito pensar co?mo quieres comunicar un proceso creativo de dos an?os. Nosotros los hemos resumido en un ge?nero: pop mutante. Tan mutante como el jardi?n de la obra de El Bosco¡±. El du?o actuara? entre abril y mayo en Alicante, Madrid, Girona y Barcelona.
?Co?mo pasa un disco de un festival de electro?nica a uno sacro? ?Increi?ble, pero cierto! La pandemia impidio? presentarlo en el So?nar 2020, y su naturaleza so?nica, entre lo sacro y lo electro?nico, nos encamino? al FIAS 2021. Compusimos una paleta de ritmos electro?nicos que ya se vio en Tu? que vienes a rondarme. Si lo piensas, la pulsio?n repetitiva de la electro?nica lleva al trance.
?Y co?mo se les dio el festival madrilen?o? El disco es una flor rari?sima en un jardi?n enorme. Queri?amos compartirlo con un pu?blico virgen, que solo hubiera escuchado el adelanto, Fiera de mi?, ya que las canciones llevaban arreglos u?nicos, nunca sonara?n igual. Fue precioso actuar en Madrid en plena resaca pande?mica. Nos recordo? el sentido de nuestro oficio: el pu?blico habita nuestras canciones.
La puesta en escena y el disen?o de vestuario haci?an pensar en Bjo?rk, en ninfas, en criaturas celestiales... ?Si?! Hay literatura, mitologi?a, poesi?a, teatro. Me encantan las voces como medio de expresio?n arti?stica. Bjo?rk claramente es una referencia. Otra es la monja y filo?sofa del siglo XI Hildegarda de Bingen ¨Cla Sibila del Rin¨C, una crack que invento? el primer idioma artificial, escribio? sobre bota?nica y compuso mu?sica sacra.
Tras escuchar el a?lbum, la sensacio?n es la de haber vuelto de una travesi?a co?smica a los ori?genes del mundo. ?Que? bonito! Una fusio?n de mundos del que emanan mutantes, flores exuberantes y criaturas originales. Clamor no pretende ser nai?f, es un llamamiento realista: dejemos de pensar en un futuro catastro?fico y elijamos la voz frente al silencio.
?Y esas voces, ese sonido del meteorito? Todo eso se lo debemos a personas apasionadas por los sonidos naturales. Bernie Krause graba bosques antes y despue?s de ser talados o arrecifes antes y despue?s de que mueran. Dicen que el silencio de la naturaleza es uno de los si?ntomas del perjuicio humano sobre la Ti rra. Alan Lomax recogio? miles de voces de tradicio?n oral de todo el mundo y Thomas Ashcraft monta ant nas en lugares remotos para captar ondas salvajes.
Han pasado ustedes de cuestionar los conflictos ideolo?gicos de un pai?s en 45 cerebros y 1 corazo?n a denunciar la guerra del ser humano contra la naturaleza en este Clamor. Me parece brutal tu punto de vista. A partir de ahora, lo explicare? asi? [risas]. El primer disco habla de co?mo la memoria colectiva nos situ?a frente al mundo y, en este, fijamos la mirada en el futuro del planeta con un clamor que es animal, salvaje, mitolo?gico.
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