Los mediadores de EE UU inician su misi¨®n de paz entre las dudas de Israel y el escepticismo palestino

A la luz de los ¨²ltimos acontecimientos, los enviados estadounidenses -el secretario de Estado adjunto William Burns y el general retirado Anthony Zinni- no tendr¨¢n f¨¢cil su tarea de facilitar una salida factible a la violencia en Oriente Pr¨®ximo. Esta ma?ana, un kamikaze palestino ha accionado una carga explosiva en la terminal israel¨ª de Erez, a la entrada norte de la franja de Gaza, seg¨²n informan fuentes de la radio p¨²blica israel¨ª. Al menos dos polic¨ªas israel¨ªes han resultado heridos y el terrorista ha muerto. Ham¨¢s ha reivindicado el atentado.

El palestino ha hecho estallar el cintur¨®n de explosivos que llevaba justo antes de llegar al puesto de control israel¨ª por el que deben pasar los obreros procedentes de Gaza cuando se dirigen a su trabajo en Israel.

El kamikaze ha muerto en el acto y los dos guardas de frontera heridos han sido trasladados a un hospital israel¨ª, aunque no se teme por sus vidas.

Debido a la escalada de la violencia de los ¨²ltimos cuatro d¨ªas, y en particular al asesinato selectivo el viernes de un jefe del brazo armado del grupo integrista isl¨¢mico Ham¨¢s por parte del Ej¨¦rcito israel¨ª, los palestinos amenazaron con vengar su muerte con una serie de atentados en Israel, y en particular en Tel Aviv.

Este recrudecimiento de la violencia ha precedido a la llegada de los dos enviados estadounidenses, que permanecer¨¢n dos semanas en Oriente Pr¨®ximo con la misi¨®n de sentar las bases para un nuevo alto el fuego y que ambas partes regresen a la mesa de negociaciones.

El apoyo de Peres

Los mediadores estadounidenses William Burns y Anthony Zinni han iniciado ya una nueva misi¨®n en Oriente Pr¨®ximo precedida entre las dudas de Israel sobre el ¨¦xito de la iniciativa y un claro pesimismo de los palestinos.

Los emisarios han llegado este mediod¨ªa al aeropuerto Ben Gurion de Tel Aviv. Ambos se han entrevistado en un sal¨®n del aeropuerto con el jefe del Shin Beth (Servicio de Seguridad Interior), Avi Dichter, y con el general Amos Malka, jefe de entrenamientos militares. Tras este encuentro, ambos diplom¨¢ticos han emprendido camino a Jerusal¨¦n.

En las consultas que se han celebrado hoy en la oficina del primer ministro israel¨ª, el derechista Ariel Sharon, se ha decidido que "Israel no negociar¨¢ la paz con los palestinos bajo el fuego, y en sus conversaciones con los emisarios de EE UU se centrar¨¢ en los esfuerzos por alcanzar un alto el fuego".

Pese a todo, el ministro israel¨ª de Asuntos Exteriores, Simon Peres, ha se?alado que su pa¨ªs "har¨¢ todo lo posible y necesario para que la misi¨®n de los dos mediadores estadounidenses tenga ¨¦xito, a pesar de los numerosos obst¨¢culos que se presentan en el camino".

En cambio, la Autoridad Nacional Palestina (ANP), que preside Yasir Arafat, ha insistido en "la necesidad de poner fin a las agresiones israel¨ªes y a los asentamientos jud¨ªos, as¨ª como de reanudar las negociaciones desde el lugar en el que se interrumpieron".

Israel¨ªes y palestinos se acercaron a un tratado definitivo de paz en la cumbre de Camp David II, celebrada en julio del pasado a?o y despu¨¦s en enero de este a?o, cuando el entonces primer ministro laborista Ehud Barak propuso a Arafat la retirada del 95% de Cisjordania y del 100% de la franja de Gaza.

Ambas partes tambi¨¦n estuvieron pr¨®ximas a un acuerdo respecto al futuro pol¨ªtico de Jerusal¨¦n, en particular de su casco antiguo -donde se encuentra la mayor parte de los lugares santos para las tres religiones monote¨ªstas-, y muy en especial de la Explanada de las Mezquitas, que los israel¨ªes llaman el Monte del Templo.

Pero los palestinos consideraron las ofertas de Israel insuficientes, a lo que sumaron la espinosa cuesti¨®n de los refugiados palestinos de la primera guerra ¨¢rabe-israel¨ª de 1948, a cuyo regreso a Israel se opone tajantemente el Gobierno de Sharon.

Dos meses despu¨¦s del fracaso de Camp David II, el 29 de septiembre del 2000 estall¨® la segunda Intifada que degener¨® en la actual ola de enfrentamientos entre ambas partes, que ha costado la vida hasta el momento a cerca de 800 palestinos (14 de ellos en los ¨²ltimos cuatro d¨ªas) y 200 israel¨ªes.