"Temo que el n¨²mero de v¨ªctimas pueda ser mucho mayor"

"Temo que el n¨²mero de v¨ªctimas pueda ser mucho mayor. Nadie ha dicho nada sobre las miles de personas que malviven en las estaciones donde se han producido las explosiones", relata preocupado Jaume Sanllorente desde Bombay apenas unas horas despu¨¦s de la masacre. "En esta ciudad hay 20 millones de personas, el 60% vive en una situaci¨®n de extrema pobreza, en la calle. M¨¢s del 50% de los ni?os que tenemos en nuestro orfanato provienen de la estaci¨®n de Matunga, una en las que han estallado bombas. Los peque?os estaban aterrados, preguntaban por sus familias, muchos tienen parientes en la zona".

Jaume Sanllorente, fundador y director de la ONG 'Sonrisas de Bombay', vive en esta enorme ciudad de 20 millones de habitantes desde hace a?o y medio. Periodista de profesi¨®n lo dej¨® todo tras enamorarse de la India. Fue un flechazo que se produjo en el primer viaje que realiz¨® al pa¨ªs. Le siguieron algunos m¨¢s hasta que decidi¨® consagrar su vida y esfuerzos a ayudar a los ni?os hu¨¦rfanos abandonados en la inmensidad desoladora de Bombay, una ciudad apabullante, como cuenta el cooperante de Barcelona: "Bombay tiene m¨¢s de 450 kil¨®metros cuadrados y se tarda en recorrer de punta a punta m¨¢s de cinco horas". Salllorente comenz¨® rescatando de la calle y de las garras de las redes de prostituci¨®n a unos 90 peque?os; ahora son 200 los ni?os que con edades comprendidas entre los 2 y los 18 a?os viven en el orfanato que dirige en el barrio de Thane. Otros 400 est¨¢n acogidos en la escuela de la ONG.

"Tendremos que intensificar nuestro trabajo estos d¨ªas, aunque aqu¨ª se convive con cosas horribles a diario. Las explosiones han sido en estaciones muy claves de la ciudad, est¨¢n siempre muy masificadas. Esto va afectar a much¨ªsima gente, es una poblaci¨®n muy vulnerable la que focaliza toda sus vida a trav¨¦s de las estaciones; los ni?os abandonados acuden a ellas en busca de compa?¨ªa, en ellas el trasiego humano es constante. Adem¨¢s hay mucha gente solitaria, gente que viene de todas las partes del pa¨ªs para buscarse aqu¨ª la vida, muchas personas que sus familias no saben que est¨¢n aqu¨ª", narra Jaume Sanllorente a trav¨¦s de una conversaci¨®n telef¨®nica.

En Bombay son cerca de las 12.30 de la noche y Sanllorente se muestra preocupado, a¨²n no saben nada del padre de una de las monitoras que trabaja en el orfanato. Todos los trabajadores son indios, veinte personas que toman muchos d¨ªas los trenes en los que la tragedia ha hecho acto de presencia esta tarde. Con la voz firme pero triste Sanllorente habla del terror: "Ha imperado el caos y el miedo. India aunque est¨¢ mejorando mucho no es un pa¨ªs seguro. Los gritos no dejaban de o¨ªrse por todas partes. Aqu¨ª la gente grita mucho, siempre hay mucho jaleo, si alguien quiere sentarse en el tren grita. Pero hoy los gritos han dejado de tener su tono habitual", explica el cooperante.

Extremistas isl¨¢micos

Sanllorente se queja de la falta de informaci¨®n y apunta su propia teor¨ªa: "Las noticias nos han ido llegando a cuentagotas. A pesar de que India es l¨ªder en telecomunicaciones, para la gente de aqu¨ª tener informaci¨®n es muy dif¨ªcil. Hablan de terrorismo. Estas acciones son horribles. A mi me parece que el m¨®vil es religioso, todo apunta a los extremistas isl¨¢micos. El problema entre los hinduistas y los musulmanes en India est¨¢ muy latente, hasta ahora todo esto hab¨ªa estado m¨¢s focalizado en el norte del pa¨ªs; con esta acci¨®n en Bombay buscan publicidad, es lo que creo, saben que as¨ª conseguir¨¢n publicidad medi¨¢tica. Pero la realidad, la que no sale en los medios de todo el mundo como hay est¨¢ pasando, es que aqu¨ª se vive cada d¨ªa el terrorismo de la pobreza"