El¨ªas y su madre pasaron un a?o en c¨¢rceles administradas por los servicios secretos saud¨ªes y marroqu¨ªes antes de ser puestos en libertad. Nunca vieron a un abogado ni a un juez instructor.KARIM SELMAOUIDurante los 12 meses que pas¨® detr¨¢s de los barrotes, El¨ªas no fue torturado f¨ªsicamente, pero s¨ª interrogado durante largas horas, privado de sue?o, obligado a dormir en el suelo, y recibi¨® a veces una alimentaci¨®n escasa. Escuch¨®, eso s¨ª, los gritos de los torturados y, en una ocasi¨®n, vio a uno de ellos en un potro de castigo. Su principal entretenimiento era dibujar.KARIM SELMAOUIUn a?o despu¨¦s de su excarcelaci¨®n, El¨ªas se enter¨® por la televisi¨®n de que su padre y su hermano Adam, de 10 a?os, acababan de morir a balazos en Al Rass. En la imagen, otro de los dibujos de la c¨¢rcel"Nuestro calabozo era enorme, ten¨ªa unos cien metros cuadrados, varias camas de cemento con colchones de espuma, una mesa de cemento rodeada de taburetes met¨¢licos clavados en el suelo. Parec¨ªa un cementerio con techo", afirma el joven. En la imagen un dibujo con la inscripci¨®n 'Al¨¢ es grande'"Mi ¨²nico padre en la Tierra es ahora Osama Bin Laden. Luchar¨¦ como un valiente muyahid, me matar¨¢n, y as¨ª me reunir¨¦ pronto con mi padre", con estas palabras concluye El¨ªas Mejjati su relato. El¨ªas, que ahora tiene 15 a?os, no est¨¢ escolarizado, padece trastornos hormonales -pesa 130 kilos- y una enfermedad ps¨ªquica contra¨ªda en la c¨¢rcel.
