Golpe policial en Brasil contra el fraude fiscal y la corrupci¨®n

La Polic¨ªa Federal de Brasil ha descubierto un fraude colosal en el sector azucarero y del alcohol que alcanza un monto de al menos 796,3 millones de euros.

En la operaci¨®n, llamada Ca?a Braca y realizada en 11 ciudades del pa¨ªs, fueron detenidas ayer 17 personas y anunciadas otras 48 ¨®rdenes de detenci¨®n. La polic¨ªa calcula que en total la banda ha defraudado al fisco por lo menos 2.000 millones de reales (796,3 millones de euros).

Los detenidos han sido acusados tambi¨¦n de asociaci¨®n para delinquir y falsedad documental. La polic¨ªa ha realizado una compleja investigaci¨®n, que ha llevado casi un a?o, para desenmascarar la venta de alcohol y az¨²car con facturas falsas, fraude en el peso y otras argucias para evadir impuestos. Los responsables del fraude contaban con la connivencia de abogados, fiscales y hasta jueces, que les ayudaban y participaban del bot¨ªn.

Por otra parte, la Polic¨ªa Federal detuvo tambi¨¦n ayer al alcalde de la ciudad minera de Juiz de Fora, Alberto Bejani, y fueron emitidas otras 15 ¨®rdenes de detenci¨®n por un esc¨¢ndalo de corrupci¨®n. La investigaci¨®n de este caso comenz¨® el pasado abril y lleva el nombre de Operaci¨®n Pas¨¢rgada, en la que ya han sido detenidos 16 alcaldes, nueve abogados, cuatro procuradores, un juez y un gestor de banco, todos acusados de formar una organizaci¨®n para delinquir.

La Polic¨ªa Federal ha llevado a cabo durante los seis a?os de mandato del presidente Luiz In¨¢cio Lula da Silva muchas m¨¢s operaciones contra el fraude fiscal y la corrupci¨®n que en las d¨¦cadas anteriores.

Concretamente, en 2007 fueron realizadas 180 operaciones, con 2.800 detenciones, mientras que en 2008, hasta abril ya hab¨ªan sido llevadas a cabo 21 grandes operaciones. Todo ello ha llevado a Lula a afirmar en repetidas ocasiones que con ¨¦l no hay m¨¢s corrupci¨®n, sino que sale m¨¢s a la luz. El problema, seg¨²n se?alan no pocas ONG, es que, a pesar de esas aparatosas operaciones de la polic¨ªa con miles de detenidos, al final, todo acaba en agua de borrajas, pues es tal la impunidad y tan activa la acci¨®n de los abogados defensores y, en muchos casos, la connivencia de la justicia, que los defraudadores quedan r¨¢pidamente en libertad.

Un ejemplo es el gran esc¨¢ndalo de soborno a los diputados de 2005, que casi hace perder el mandato a Lula: ni uno de ellos ha ido a la c¨¢rcel, a pesar de que el Tribunal Supremo pidi¨® el enjuiciamiento de 40 personas, consideradas por la corte como una "banda criminal".