Declarado el estado de emergencia en Bangkok tras una nueva jornada de violencia

El primer ministro tailand¨¦s, Samak Sundaravej, declar¨® anoche (hora espa?ola) el estado de excepci¨®n en la capital del pa¨ªs, Bangkok, a trav¨¦s de un comunicado que ley¨® en la radio p¨²blica y en todos los canales de televisi¨®n. Esta ma?ana, el jefe del Ej¨¦rcito, Anupong Paojinda, al mando de la seguridad de la ciudad, ha asegurado que descarta el uso de la fuerza para desalojar a los manifestantes que ocupan desde hace ocho d¨ªas las oficinas del primer ministro. Poco antes, estos hab¨ªan afirmado que se negaban a abandonar las oficinas del primer ministro, sin embargo, el l¨ªder de los manifestantes ha anunciado que se dispersar¨¢n antes de 48 horas, despu¨¦s de la declaraci¨®n del estado de excepci¨®n. Los seguidores de las protestas tachan a Sundaravej de corrupto y de desleal a la Corona.

"Creo que el Ej¨¦rcito no causar¨¢ da?o a la gente", ha indicado Sondhi Limthongkul, fundador de la Alianza del Pueblo para la Democracia, la formaci¨®n opositora que ha encabezado las protestas. De hecho, a pesar de que el estado de emergencia le otorgar¨ªa poder para ello, Paochinda, el jefe del Ej¨¦rcito, ha afirmado que, aunque recurrieran a la violencia, no estar¨ªa asegurada una soluci¨®n pac¨ªfica. Ha descartado, por tanto, dar un golpe de Estado y espera que la crisis se resuelva "por medios legales y democr¨¢ticos". Mientras, en la capital de Tailandia se mantiene el estado de excepci¨®n por el que se han prohibido las reuniones de m¨¢s cinco personas y se han impuesto restricciones sobre las informaciones "que amenacen la seguridad p¨²blica". El estado de excepci¨®n tambi¨¦n permite bloquear carreteras, evacuar edificios y censurar a los medios de comunicaci¨®n. Por eso, unos 600 activistas vigilan la sede de la cadena de televisi¨®n ASTV, propiedad Limthongkul, para impedir que los militares apaguen la se?al.

Protestas y posible fraude electoral

El decreto se ha producido despu¨¦s del env¨ªo de 400 soldados para reforzar a los polic¨ªas que intentaban abortar los enfrentamientos de ayer entre detractores y simpatizantes del Ejecutivo en los que muri¨® una persona y resultaron heridas otras 44. La jornada de ayer fue la m¨¢s violenta desde el comienzo de la campa?a contra el Ejecutivo el pasado mes de mayo. Las palabras de los manifestantes confirmaban la tensi¨®n: "No hay suficientes prisiones en el pa¨ªs para meternos a todos".

Desde que accedi¨® a la jefatura del Gobierno, Sundaravej, un veterano pol¨ªtico ultraderechista de 73 a?os, ha estado sometido a una fuerte presi¨®n para provocar su dimisi¨®n. Sus detractores le consideran un testaferro del ex primer ministro Thaksin Shinawatra, acusado de corrupci¨®n y que fue derrocado en 2006 tras un golpe de Estado. La oposici¨®n, apoyada por la ¨¦lite conservadora y sectores del Ej¨¦rcito, pretende que el rey Bhumibol Aduldayej designe un Gobierno de transici¨®n, como ha sucedido en otras momentos de grave inestabilidad pol¨ªtica en el pa¨ªs.

Poco antes del anuncio del estado de excepci¨®n, la Comisi¨®n Electoral ha recomendado al Tribunal Constitucional la disoluci¨®n del Partido del Poder Popular (PPP), encabezado por el actual primer ministro tailand¨¦s, Samak Sundaravej. Las autoridades electorales creen que el PPP estuvo implicado en la compra de votos durante las elecciones legislativas de diciembre de 2007. La ganadora de dichos comicios fue la fuerza integrada por seguidores de Shinawtra.

Tailandia declara el estado de excepci¨®n