Los ciudadanos reemplazan a los ejecutivos
El Foro Econ¨®mico de Davos se abre a las redes sociales
La 39 edici¨®n del Foro Econ¨®mico Mundial (FEM) que concluye el 1 de febrero quiz¨¢ sea recordada por transcurrir durante una crisis financiera global "sin precedentes", como suelen calificarla desde el primer ministro brit¨¢nico Gordon Brown hasta el presidente del Gobierno espa?ol, Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero. Pero tambi¨¦n lo ser¨¢, quiz¨¢s, porque este a?o el Foro de Davos ha intentado transformarse. Pasar de ser un encuentro exclusivo y excluyente, s¨®lo abierto a la ¨¦lite pol¨ªtica y financiera mundial, a una cita abierta y participativa. O eso es lo que pretenden sus organizadores. "S¨ª, esta es la cumbre m¨¢s abierta de la historia: muchos de los participantes son bloggueros, usuarios de Twitter o aficionados a seguir los debates desde el ordenador", explica Matthias L¨¹fkens, director de Medios del FEM. S¨®lo una minor¨ªa puede costearse la estancia en el para¨ªso su¨ªzo del esqu¨ª: la inscripci¨®n en el FEM asciende a casi 41.500 euros, pero cada vez hay m¨¢s ciudadanos armados con una conexi¨®n a Internet, una herramienta que usan para explorar el mundo.
La presencia de Rebecca McQuigg y Pablo Camacho -el Foro los denomina "periodistas ciudadanos"- en Davos es producto de esa tendencia renovadora. En sociedad con MySpace y YouTube, el FEM seleccion¨® a estos dos j¨®venes a partir de un concurso virtual. ?La consigna? Elaborar contenido digital inspirado en los temas que integran la agenda de Davos y que fueron presentados como lo que son: grandes interrogantes (por ejemplo, "?Crees que la econom¨ªa mundial se recuperar¨¢ en 2009"?). A los ganadores, el Foro les ha pagado el viaje y la estancia, adem¨¢s de abrirles la entrada a la cumbre, para que puedan explicar a trav¨¦s de Internet su experiencia y sus impresiones.
Camacho, un colombiano de 24 a?os que estudia arte (y se define a s¨ª mismo como "escritor independiente"), explic¨® en un v¨ªdeo por qu¨¦ es dif¨ªcil que los ejecutivos que gestionan las corporaciones se sometan a un c¨®digo de ¨¦tica para evitar fraudes como el que perpetr¨® el broker Bernard Madoff. McQuigg, comunicadora de Los ?ngeles (EE UU), obtuvo el pasaporte a Davos con otro trabajo multimedia sobre el poder que la informaci¨®n tiene para implicar a la sociedad.
Los latidos de Davos
Si el FEM tiene coraz¨®n, ¨¦ste late en los post de la bit¨¢cora de McQuigg y en los v¨ªdeos de Camacho. "Davos antes se?alaba los problemas al mundo. Ahora, en cambio, se se?ala a s¨ª mismo; esta vez los problemas est¨¢n en el centro del Foro, en el sistema financiero. Ahora tiene que hablar de lo que hizo mal porque est¨¢ en el coraz¨®n de la crisis", explica por tel¨¦fono Camacho, que ha conseguido dialogar con el alcalde de San Francisco (EE UU) y con Sir John Homes, enviado de la ONU a Gaza. El ganador del concurso de YouTube opina que el Foro es mejor de lo que esperaba y tambi¨¦n m¨¢s complejo. A?ade: "Es un espect¨¢culo donde se tratan temas gen¨¦ricos y, al mismo tiempo, actuales. Pero adentro hay muchos niveles de discusi¨®n: uno cree que se trata de una cosa distante, pero, en realidad, aqu¨ª se encuentran muchas personas clave que crean relaciones y discuten entre s¨ª".
McQuigg, que se confiesa sorprendida con el despliegue de Davos, explica que ¨¦ste es un ¨¢mbito muy exclusivo que necesitaba reinventarse: "nosotros representamos una nueva tendencia. Tenemos ideas diferentes pero aportamos una perspectiva m¨¢s fresca". Y lo que ellos ven ocupa un espacio infinito en la web. "La gente cuenta que en Davos antes hab¨ªa m¨¢s personajes con poder, m¨¢s limusinas y m¨¢s fiestas", apunta McQuigg. Su observaci¨®n coincide con Reuters, que informa que algunos ejecutivos de Wall Street y funcionarios del Gobierno estadounidense declinaron participar en el FEM para no ser vistos en el entorno lujoso de la id¨ªlica ciudad suiza. La agencia de noticias cita al asesor de imagen Howard Rubinstein, que recomienda a los banqueros preocuparse m¨¢s que nunca de su apariencia: "deben evitar formar parte de acontecimientos para ricos y famosos que resulten ofensivos a los contribuyentes durante esta temporada de austeridad". Davos echa mano de plataformas digitales y redes sociales para llenar con las ideas de los ciudadanos el espacio que los ejecutivos han dejado vac¨ªo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.