M¨¦xico declara la guerra arancelaria a Estados Unidos
El Gobierno de Felipe Calder¨®n decide aumentar el cobro a 90 productos agr¨ªcolas e industriales
La dif¨ªcil relaci¨®n de M¨¦xico con Estados Unidos tiene un nuevo frente comercial. El Gobierno mexicano ha decidido aumentar el cobro de aranceles a 90 productos agr¨ªcolas e industriales importados de su vecino del norte. Se trata de una represalia contra Estados Unidos por violar el Tratado de Libre Comercio de Am¨¦rica del Norte (TLCAN) al cancelar el programa piloto de Transporte Transfronterizo de Carga. Es decir, porque cerraron el paso de su frontera a los camiones mexicanos de carga, una decisi¨®n que no s¨®lo ha ocasionado p¨¦rdidas econ¨®micas, tambi¨¦n ha generado un rechazo social.
El secretario mexicano de Econom¨ªa, Gerardo Ruiz Mateos, explic¨® que el castigo a las exportaciones se aplica desde el pasado martes, una vez que Estados Unidos no aceptara revisar el cierre del camino a los transportes mexicanos. "Nos vemos obligados a adoptar medidas de represalia conforme al Tratado". Los aranceles se aplican a 90 productos industriales y agr¨ªcolas de 40 Estados del gigante norteamericano. El valor de esas compras en 2007 fue de 2.400 millones de d¨®lares.
En una clara cr¨ªtica a la posici¨®n que ha adoptado Washington, el ministro coment¨® que "en estos momentos de crisis econ¨®mica, cuando debemos evitar a toda costa el proteccionismo, la decisi¨®n de Estados Unidos va en sentido contrario y manda una se?al negativa a M¨¦xico y al resto del mundo". No obstante, Ruiz Mateos espera que todo regrese al buen camino, dada la importancia que tiene la relaci¨®n comercial bilateral, con un valor de unos 367.000 millones de d¨®lares en 2008.
A cuentagotas
La medida mexicana llam¨® la atenci¨®n de la Casa Blanca, hasta el punto de que el secretario de prensa presidencial, Robert Gibbs, dijo que la Administraci¨®n de Barack Obama busca acciones que permitan la reapertura de la frontera a los camioneros, ante la lo que calific¨® como "medidas de represi¨®n" cargadas a exportaciones estadounidenses. "Esto es en respuesta al fin del programa piloto transfronterizo que permiti¨® a un peque?o n¨²mero de camiones mexicanos entrar a Estados Unidos m¨¢s all¨¢ de la zona comercial fronteriza [30 millas] y proveer acceso rec¨ªproco a compa?¨ªas de Estados Unidos".
En M¨¦xico se cree que la explicaci¨®n estadounidense para cerrar el paso a los camioneros carece de sustento. Las autoridades sostienen que se han dado unos 46.000 cruces sin que se registraran incidentes de importancia.
La historia de este choque comenz¨® el 11 de marzo, cuando el Congreso estadounidense no concedi¨® dinero a un programa de apertura de fronteras para los transportes de carga mexicanos. De esta forma, se cancel¨® el plan que, originalmente, de acuerdo con lo contemplado en el TLCAN ten¨ªa que haber comenzado a fluir en enero de 2000. Las dudas estadounidenses respecto a la seguridad que brindan los camioneros mexicanos retrasaron la entrada en vigor del convenio hasta 2007, cuando empez¨® a cuentagotas y pendiente de un hilo pol¨ªtico y financiero.
Para Ruiz Mateos, la "acci¨®n de Estados Unidos es equivocada, proteccionista y claramente viola el Tratado. Por decidir proteger a sus transportistas han decidido afectar la competencia y la competitividad de nuestros pa¨ªses y de la regi¨®n, impactando a muchos otros sectores productivos". El secretario mexicano asegur¨® que en breve publicar¨¢ la lista de productos sancionados, pero adelant¨® que se trata de art¨ªculos que no afectan a las cadenas productivas mexicanas, por lo que no afectar¨¢n a los precios finales ni a la cesta b¨¢sica de los mexicanos.
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