Comienza el nuevo juicio por el asesinato de Politk¨®vskaya

El Tribunal Militar de Mosc¨² ha comenzado la vista preliminar de un nuevo juicio contra los supuestos implicados en el asesinato, en oto?o de 2006, de Anna Politk¨®vskaya, famosa por sus valientes art¨ªculos que denunciaban los abusos y cr¨ªmenes cometidos por los militares y las autoridades prorrusas en Chechenia. El Tribunal Supremo, bas¨¢ndose en tecnicismos, anul¨® a fines de junio pasado la sentencia absolutoria de los acusados de haber dado muerte en oto?o de 2006 a la periodista cr¨ªtica con el Kremlin. Los abogados de la familia de Politk¨®vskaya reiteraron que lo que quieren es una nueva investigaci¨®n para encontrar tanto a los ejecutores del crimen como a sus organizadores reales.

"Los asesinos pasean libremente y los salvajes que idearon este abominable crimen contra una mujer indefensa no han sido llevados ante la justicia", declar¨® Karina Moskalenko, uno de los abogados de los familiares de Politk¨®vskaya.

Anna Sav¨ªtkaya, otra abogada de la familia de la periodista, se?al¨® que era muy dudoso que este nuevo juicio pueda resultar mejor que el anterior. "Este proceso no podr¨¢ encontrar la verdad, ya que tendr¨¢ que v¨¦rselas con las mismas pruebas y los mismos acusados", se?al¨®.

En el banquillo se sentaron tres incriminados por el asesinato: los hermanos chechenos Dzhabra¨ªl e Ibrahim Majm¨²dov y el ex capit¨¢n de polic¨ªa Sergu¨¦i Jadzhikurb¨¢nov. El primero est¨¢ acusado de haber conducido el autom¨®vil que llev¨® al sicario -supuestamente otro hermano, Rustam, cuyo paradero se desconoce- al edificio donde viv¨ªa Politk¨®svkaya; el segundo habr¨ªa participado en el seguimiento de la periodista, mientras que al tercero se le atribuye el papel haber organizado la log¨ªstica y haber dado el arma que us¨® el asesino.

El proceso anterior, que termin¨® con sentencia absolutoria para todos los enjuiciados, fue un rotundo fracaso para la fiscal¨ªa. La acusaci¨®n no logr¨® probar nada, ni que Jadzhikurb¨¢nov, el supuesto organizador del grupo, conoc¨ªa en oto?o de 2006 a los otros implicados; ni que la pistola de la que salieron las tres balas que impactaron en el cuerpo de la periodista hab¨ªa sido comprada por ¨¦ste y entregada a los ejecutores; ni que el auto supuestamente utilizado para el asesinato hubiera sido conducido por los presuntos implicados antes de diciembre de 2006. Y el problema es que en estos meses no han surgido ni nuevas pruebas ni nuevas circunstancias que se?alen a los acusados como los verdaderos culpables.

Si los familiares de Politk¨®vskaya desean encontrar a los que est¨¢n detr¨¢s del crimen, al Kremlin le satisfacen simples cabezas de turco. Las autoridades rusas desean poder cerrar el caso Politk¨®vskaya sin sacrificar a ninguno de sus aliados. Pero el problema es que muchos colegas de la periodista y defensores de derechos humanos piensan que el responsable del asesinato puede ser el presidente de Chechenia, Ramz¨¢n Kad¨ªrov. Con la venia del Kremlin, Kad¨ªrov ha pacificado su regi¨®n utilizando m¨¦todos sangrientos, tortura, secuestros y ejecuciones sumarias tanto de separatistas como de sospechosos de simpatizar con la guerrilla.

Politk¨®vskaya aseguraba que Kad¨ªrov es un criminal y dec¨ªa so?ar con verle en el banquillo de los acusados. Los defensores de derechos humanos tambi¨¦n responsabilizan al l¨ªder checheno por el asesinato, el mes pasado, de Natalia Estem¨ªrova, jefa de la organizaci¨®n Memorial en esa rep¨²blica norcauc¨¢sica. Est¨¢ claro, sin embargo, que el Kremlin no est¨¢ en absoluto interesado en llevar a juicio a Kad¨ªrov, el hombre que ha logrado imponer el orden en esa explosiva regi¨®n.

Como dijo el abogado de los acusados, Murad Mus¨¢yev, "creemos que el objetivo que persiguen las autoridades es resolver s¨®lo formalmente el caso, poner un visto bueno en su lista".

El nuevo juez ha declarado un receso hasta el viernes para estudiar la petici¨®n de los abogados de la familia de Politk¨®vskaya, que consiste en unir en un s¨®lo proceso el caso de los citados acusados con el del presunto ejecutor material del crimen y con el de los desconocidos que lo encargaron. La fiscal¨ªa ha declarado no estar en contra de esta propuesta, la que, de ser aceptada por el juez, puede significar una nueva investigaci¨®n. Mus¨¢yev se?al¨® por su parte que aunque no considera que esto "conducir¨¢ a una investigaci¨®n objetiva", la defensa tampoco se opone a la petici¨®n de los familiares de la periodista.