El Can¨ªbal de la ballesta comparece ante un juez brit¨¢nico

Stephen Griffiths, acusado de haber asesinado a tres mujeres que ejerc¨ªan la prostituci¨®n en Bradford (West Yorkshire, norte de Inglaterra) se present¨® a si mismo como "El Can¨ªbal de la ballesta" en una breve comparecencia esta ma?ana ante el juez. As¨ª es c¨®mo le han descrito algunos tabloides brit¨¢nicos a pesar de que no hay ning¨²n indicio, al menos hasta ahora, de que haya comido carne de las que se creen sus v¨ªctimas.

Detenido el lunes pasado lunes, el jueves fue formalmente acusado de haber asesinado a Suzanne Blamires, de 36 a?os, cuyo cuerpo desmembrado apareci¨® el martes en el r¨ªo Aire. Y tambi¨¦n a Susan Rushworth, de 43 a?os, que desapareci¨® el 22 de junio del a?o pasado, y a Shelley Armitage, de 31, desaparecida desde el 25 de abril, cuyos cuerpos a¨²n no han aparecido.

La polic¨ªa no vincula a Griffiths con otras mujeres desaparecidas en la zona en los ¨²ltimos a?os, pero tiene previsto examinar m¨¢s adelante esa posibilidad. La prioridad ahora es encontrar los cuerpos de Rushworth y Armitage y acumular pruebas contra el sospechoso.

Griffiths, de 40 a?os, que est¨¢ cursando un doctorado de criminolog¨ªa, compareci¨® durante cinco minutos ante un magistrado en Bradford. Esposado, sin afeitar, vestido con camiseta blanca, camisa negra y pantalones tejanos azul oscuro, mantuvo las manos como si estuviera rezando mientras le preguntaban. ?C¨®mo se llama? "Eh... El Can¨ªbal de la Ballesta", respondi¨®. ?D¨®nde vive? "Eh... aqu¨ª, supongo", ironiz¨®. ?Naci¨® el 24 de diciembre de 1969? "S¨ª", respondi¨® escuetamente a la tercera pregunta.

En una segunda comparecencia poco despu¨¦s de mediod¨ªa confirm¨® que su nombre es Stephen Shaun Griffiths. El juez le comunic¨® que su pr¨®xima comparecencia ser¨¢ mediante conexi¨®n de v¨ªdeo desde la prisi¨®n y fij¨® la pr¨®xima vista para el 7 de junio.

Algunos diarios han seguido publicando detalles escabrosos sobre su personalidad. Vecinos suyos citados por The Sun aseguran que los lagartos que ten¨ªa en su casa como animales de compa?¨ªa med¨ªan hasta 1,2 metros. Un amigo del presunto asesino asegura que un d¨ªa vio c¨®mo se tragaba vivo uno de los ratones que criaba en su casa para alimentar a los lagartos.