Ir¨¢n anuncia la ejecuci¨®n de Bahram¨ª, activista detenida durante las protestas contra la reelecci¨®n de Ahmadineyad
Las autoridades iran¨ªes han detenido durante unas horas al hijo mayor del l¨ªder opositor Mehdi Karrub¨ª
Ir¨¢n ha anunciado la ejecuci¨®n "por tr¨¢fico de drogas" de Zahra Bahram¨ª, una mujer detenida durante las protestas contra la reelecci¨®n de Mahmud Ahmadineyad de diciembre de 2009. Su familia dice que la acusaci¨®n est¨¢ "fabricada" y activistas de los derechos humanos sospechan que las autoridades iran¨ªes intentan eludir la condena internacional sobre su nueva oleada de represi¨®n. Tambi¨¦n hoy se ha conocido que las autoridades iran¨ªes han retenido durante unas horas al hijo mayor del l¨ªder opositor Mehdi Karrub¨ª.
Desde principios de a?o se han multiplicado las ejecuciones (una media de tres al d¨ªa, seg¨²n Human Rights Watch, HRW) y las presiones contra los abogados independientes. "Zahra Bahram¨ª, que fue condenada por vender y poseer droga, ha sido colgada el s¨¢bado a primera hora de la ma?ana", afirma el comunicado de la Fiscal¨ªa de Teher¨¢n difundido por los medios locales. Seg¨²n la versi¨®n oficial, el tribunal revolucionario que la juzg¨® la conden¨® a muerte el pasado 2 de enero por "poseer 450 gramos de coca¨ªna y participar en la venta de 150 gramos" de esa sustancia.
La historia que cuenta su hija es muy diferente. Bahram¨ª, de 45 a?os, fue detenida en diciembre de 2009 en Teher¨¢n, cuando participaba en una manifestaci¨®n contra la reelecci¨®n de Ahmadineyad seis meses antes. Aunque la mujer hac¨ªa tiempo que viv¨ªa en Holanda, donde hab¨ªa adquirido la nacionalidad, hab¨ªa regresado a su pa¨ªs de origen para visitar a algunos familiares. Como decenas de miles de iran¨ªes se uni¨® a las ¨²ltimas grandes protestas que coincidieron con la festividad religiosa de Ashur¨¢, durante las que la polic¨ªa mat¨® a nueve personas y detuvo a centenares.
Entre las acusaciones que presentaron contra ella, tambi¨¦n figuraba, seg¨²n la hija, "pertenencia a un grupo armado opuesto al Gobierno". Este extremo parece respaldado por el comunicado de la Fiscal¨ªa que se?ala que fue "detenida por cr¨ªmenes relativos a la seguridad". Fue durante el registro de su domicilio cuando la polic¨ªa supuestamente encontr¨® la droga y una investigaci¨®n posterior "demostr¨® que hab¨ªa vendido 150 gramos de coca¨ªna".
Tras conocer la sentencia de muerte, el Gobierno holand¨¦s expres¨® su preocupaci¨®n y pidi¨® a Teher¨¢n que le aclarara la situaci¨®n de Bahram¨ª. Pero Ir¨¢n, que no reconoce segundas nacionalidades, desestim¨® esa iniciativa como una interferencia en sus asuntos internos. Tambi¨¦n ha rechazado la petici¨®n de la Uni¨®n Europea para que suspenda las ejecuciones que se han acelerado de forma preocupante desde principios de a?o.
La mayor¨ªa de las 74 ejecuciones de las que han dado cuenta los medios locales en lo que va de 2011 (al menos dos de ellas en plazas p¨²blicas) se refieren a traficantes de drogas y violadores. Sin embargo, tambi¨¦n ha habido al menos tres supuestos disidentes pol¨ªticos. En su ¨²ltimo informe mundial, HRW denuncia un agravamiento de la crisis de derechos humanos que atenaza a Ir¨¢n desde las controvertidas elecciones de 2009. La organizaci¨®n recuerda que "los juicios de los tribunales revolucionarios no alcanzan los est¨¢ndares internacionales m¨ªnimos para un juicio justo". Adem¨¢s, se?ala, "el poder judicial opera con escasa transparencia en cuanto a pruebas que vinculen a los sentenciados a muerte con ataques armados".
"El aplastamiento del Gobierno ha ido m¨¢s all¨¢ de silenciar a los manifestantes post electorales y se ha transformado en una campa?a m¨¢s amplia para neutralizar a la vibrante sociedad civil iran¨ª y consolidar su poder", asegur¨® Sarah Leah Whitson, responsable de Oriente Pr¨®ximo de HRW, al presentar el informe.
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