Un ataque talib¨¢n al hotel Intercontinental de Kabul deja al menos 21 muertos

Un grupo de terroristas irrumpi¨® en torno a las diez de la noche de ayer (hora afgana) en el hotel Intercontinental de Kabul, uno de los m¨¢s frecuentados por extranjeros en la capital afgana, en un ataque planeado que fue respondido por las tropas de la OTAN y que se ha saldado al menos con 21 muertos y alrededor de 12 heridos. Entre los fallecidos, todos los atacantes, dos polic¨ªas y un piloto civil espa?ol que trabajaba para una l¨ªnea a¨¦rea afgano-turca y que estaba en Kabul haciendo una escala.

Seg¨²n han confirmado fuentes oficiales afganas, los terroristas accedieron al hotel a trav¨¦s de uno de los jardines, situado en la parte trasera del establecimiento, mientras muchos de los hu¨¦spedes se encontraban cenando. Los talibanes irrumpieron disparando indiscriminadamente y haciendo explotar explosivos en el interior del edificio. Iban armados con granadas de mano, lanzagranadas y AK-47.

Seg¨²n cuenta un testigo, Nazir Amini, en The New York Times, la polic¨ªa no detuvo a un hombre con un aspecto sospechoso: portaba armas, vest¨ªa con un uniforme de polic¨ªa y llevaba un sombrero blanco que suelen usar los religiosos afganos. Amini, al percatarse de ¨¦l, le dijo: "?Eres un polic¨ªa o un suicida? ?Qu¨¦ clase de polic¨ªa est¨²pido eres?". El hombre no le respondi¨® y tres agentes que vieron la escena le exclamaron a Amini: "Ven aqu¨ª, ven aqu¨ª, no hables con ¨¦l, no est¨¦s cerca suya, es un suicida".

El ataque fue respondido por unidades de la polic¨ªa y el ej¨¦rcito afganos y, poco despu¨¦s, con refuerzos de la OTAN, en una operaci¨®n en la que han intervenido dos helic¨®pteros y que ha durado cinco horas. La operaci¨®n se ha saldado con la muerte de todos los integrantes del comando (al menos cinco de ellos se inmolaron) y un n¨²mero de v¨ªctimas civiles de entre diez y once, entre ellos, polic¨ªas afganos y hu¨¦spedes del hotel. Tras la operaci¨®n, las fuerzas de la OTAN han registrado el hotel habitaci¨®n por habitaci¨®n para reforzar la seguridad.

El jefe de polic¨ªa de Kabul, Ayub Salangi, declar¨® a la BBC que uno de los atacantes logr¨® sobrevivir el asalto escondido en una habitaci¨®n del hotel y que fue aqu¨ª donde deton¨® los explosivos que llevaba adosados en un chaleco, provocando la muerte de dos oficiales de polic¨ªa y el piloto espa?ol, adem¨¢s de herir a tres personas m¨¢s.

Tim James, portavoz de la ISAF, ha declarado a la agencia AFP que los tres talibanes que fueron abatidos por los helic¨®pteros de la OTAN llevaban puestos chalecos con material explosivo. "Tenemos informes que dicen que hubo un n¨²mero de explosiones causadas por los insurgentes detonadas por ellos o los helic¨®pteros que provocaron las detonaciones de los chalecos suicidas", ha dicho James.

Algunos de los terroristas, seg¨²n el testimonio de uno de los recepcionistas del hotel que pidi¨® no ser identificado citado por Reuters, llevaban reproductores de cinta de casetes en los que sonaban canciones de guerra talibanes. Muchos hu¨¦spedes, seg¨²n esta misma fuente, presas del p¨¢nico, saltaron por las ventanas desde el segundo y tercer piso, en un intento de escapar al tiroteo.

?ltima voluntad

Uno de los hu¨¦spedes, el ciudadano estadounidense Saiz Ahmed, que est¨¢ en Kabul por un proyecto de doctorado, ha hablado con la CNN cuando ha abandonado el hotel por la ma?ana. "Estoy seguro de que ninguno de los que est¨¢bamos aqu¨ª pens¨¢bamos que ¨ªbamos a sobrevivir", ha dicho. Ahmed ha relatado c¨®mo se qued¨® tirado en el suelo, con la habitaci¨®n a oscuras, durante m¨¢s de cinco horas, escuchando los disparos y las explosiones ocasionales. "Incluso he llegado a escribir una peque?a ¨²ltima voluntad", ha dicho. "Por si acaso".

El funcionario provincial, Maulawi Amadullah Usoli, estaba sentado con varios amigos en la piscina cuando comenzaron los disparos. "Estaba sentado a mi lado mi amigo, un ingeniero, y un juez de Takhar con su escolta, y de repente escuchamos disparos y alrededor de 15 personas que corrieron hacia la entrada del hotel", ha contado a The New York Times.

El hotel, de seis plantas y con varios controles de seguridad por ser uno de los m¨¢s frecuentados por autoridades y extranjeros, est¨¢ situado en una colina en el oeste de la ciudad y es utilizado con frecuencia para conferencias y grandes acontecimientos. Fue levantado, en 1969, por el grupo hostelero InterContinental Hotels Group, pero desde 1979 opera de manera independiente, aunque mantiene el nombre y el logo. La zona, en la que se ha cortado la electricidad, est¨¢ acordonada por la polic¨ªa, seg¨²n cuenta el corresponsal de la BBC en el pa¨ªs.

Un portavoz talib¨¢n, Zabihullah Mujahid, ha reivindicado el ataque y ha asegurado que el objetivo era una reuni¨®n entre miembros del Gobierno afgano y funcionarios occidentales para tratar temas de seguridad que estaba prevista en el hotel. Mujahid explic¨® a trav¨¦s de un email a la cadena de televisi¨®n estadounidense CNN su propia versi¨®n de los hechos: que los atacantes entraron en el establecimiento despu¨¦s de matar a los guardias de seguridad de la entrada. "Uno de los atacantes nos dijo por tel¨¦fono que est¨¢n en el lobby buscando hu¨¦spedes dentro de sus habitaciones, derribando las puertas", dice el email.

Sin embargo, varios oficiales de Interior y Defensa explicaron a la BBC que el ataque tiene la marca de la red Haqqani, un grupo muy cercano y aliado a los talibanes pero que opera de manera independiente.

El Ejecutivo estadounidense ha condenado el atentado y ha asegurado, en un comunicado, que el ataque demuestra "una vez m¨¢s el desprecio de los terroristas por la vida humana".

El ataque se produce menos de una semana despu¨¦s de que EE UU anunciara el comienzo de la retirada de sus tropas en Afganist¨¢n, al tiempo que otros pa¨ªses que participan en la misi¨®n de la OTAN en el pa¨ªs est¨¢n presentando tambi¨¦n su calendario de repliegue, lo que hace temer un aumento de la violencia.

El pasado domingo, m¨¢s de 60 personas perdieron la vida en otro ataque contra un hospital de la localidad de Azra, situada al este del pa¨ªs.