El Tea Party vuelve a sus or¨ªgenes
El movimiento naci¨® en 2009 como rechazo a la reforma sanitaria Hoy se manifiesta ante las escalinatas del Supremo para pedir su anulaci¨®n
Igual que como cuando naci¨® el Tea Party, en 2009. Este martes, la representante por Minesotta Michelle Bachmann cruz¨® la explanada frente al Capitolio, lleg¨® a las escalinatas del Tribunal Supremo, se coloc¨® frente a unas cuantas banderas norteamericanas y, meg¨¢fono en mano, areng¨® a los congregados en contra de la reforma sanitaria de Barack Obama.
¡°Debemos dejarle claro a la ciudadan¨ªa norteamericana que no hemos mostrado la bandera blanca de la rendici¨®n¡±, dijo la excandidata republicana a la nominaci¨®n presidencial y fundadora del grupo parlamentario del Tea Party. ¡°La reforma es la mayor expansi¨®n de control del Gobierno federal en la historia de nuestro pa¨ªs¡±.
Era el d¨ªa de la segunda de tres audiencias en las que la Corte Suprema de EE UU decidir¨¢ el futuro de la reforma m¨¢s ambiciosa del presidente, y a las puertas, grupos a favor y en contra de ella conflu¨ªan blandiendo pancartas y argumentos opuestos. Decenas de m¨¦dicos, vestidos con bata, que apoyaban la reforma, se opon¨ªan a reclutas del Tea Party.
Ese movimiento ultraconservador se fragu¨® en las protestas ciudadanas de los d¨ªas previos a la aprobaci¨®n de la reforma sanitaria. Naci¨® con reuniones y manifestaciones casi espont¨¢neas, que se multiplicaron en todos los Estados durante el verano de 2009. El enfado con Obama por la inminente reforma era una constante en todas ellas. Poco a poco cobr¨® mayores dimensiones, hasta pasar a ser un gran ej¨¦rcito ideol¨®gico de oposici¨®n al presidente y a los sectores m¨¢s moderados del Partido Republicano.
El movimiento asumi¨® como propia una bandera independentista norteamericana del siglo XVIII, que muestra sobre fondo amarillo a una serpiente cascabel en posici¨®n de defensa. Es ahora una presencia com¨²n a las escalinatas del Supremo, enarbolada a gritos y con tensi¨®n. Los que la portan se enfrentan a decenas de personas que recurren tambi¨¦n a cualquier m¨¦todo para hacerse notar, incluidos los religiosos.
Durante la concentraci¨®n de este martes una mujer, Yasemin Ayarci, de 26 a?os y partidaria de la reforma, ocup¨® de forma inesperada uno de los podios del Tea Party. Llevaba una imagen en la que se representaba a Jesucristo, y en la que se le¨ªa un mensaje claramente sarc¨¢stico: ¡°?Qu¨¦ bastardo enfermo quer¨ªa cobertura sanitaria gratuita?¡±. La retiraron enseguida. Es el Tea Party el que se ha apoderado de la imaginer¨ªa religiosa. Y eso no est¨¢ dispuesto a compartirlo con aquellos que apoyan a Obama.
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