Netanyahu pide elecciones anticipadas en Israel

El primer ministro Benjam¨ªn Netanyahu se ha dirigido a los israel¨ªes para anunciarles que dentro de cuatro meses tienen una cita con las urnas. Hac¨ªa semanas que la prensa israel¨ª especulaba con la posibilidad de que las elecciones, inicialmente previstas para el oto?o de 2013 se fueran a adelantar, como ha sucedido.

Coinciden algunos analistas en que con esta cita electoral, el derechista Netanyahu quiere revalidar su mayor¨ªa, en un momento en el que parece no existir rival ni formaci¨®n pol¨ªtica capaz de hacerle sombra, seg¨²n muestran los sondeos. La idea ser¨ªa adem¨¢s lograr un fuerte apoyo del electorado antes de que los estadounidenses elijan a su nuevo presidente el pr¨®ximo noviembre. Netanyahu probablemente cuenta con que Obama ser¨¢ reelegido y quiere que el presidente estadounidense electo se encuentre con dirigente fuerte en Israel, capaz de oponerse, con el respaldo de su electorado, a cualquier exigencia de la comunidad internacional en relaci¨®n con el conflicto de Oriente Pr¨®ximo.

Los comicios suponen adem¨¢s una suerte de refer¨¦ndum sobre la cuesti¨®n iran¨ª. Bibi Netanyahu ha amenazado hasta la saciedad con atacar las instalaciones nucleares iran¨ªes, ya que seg¨²n su an¨¢lisis, Ir¨¢n promueve un nuevo Holocausto y a Israel le corresponde impedirlo cuanto antes. Si los israel¨ªes vuelven al Likud de Netanyahu en las urnas, apoyar¨ªan indirectamente los planes b¨¦licos del primer ministro en contra de la opini¨®n de buena parte de la comunidad internacional que opta por agotar la v¨ªa diplom¨¢tica y de sanciones.

La econom¨ªa, -la acumulaci¨®n de riqueza por un pu?ado de familias en el pa¨ªs, as¨ª como los subsidios a los grupos ultraortodoxos- y la ampliaci¨®n del reclutamiento a la poblaci¨®n religiosa que han causado importantes tensiones en el seno de la coalici¨®n de Gobierno, ser¨¢n dos de los principales tema de campa?a. Lograr un acuerdo con los palestinos y poner fin a 44 a?os de ocupaci¨®n militar no figura ni de lejos entre las prioridades de un pa¨ªs, cuya poblaci¨®n vive en su mayor¨ªa de espaldas al conflicto.

Tanto los sondeos como la inmensa mayor¨ªa de los observadores hablan de un triunfo asegurado del Likud. Netanyahu tiene adem¨¢s a su favor la divisi¨®n de una oposici¨®n que unida podr¨ªa obtener m¨¢s esca?os que el Likud. Los principales partidos opositores andan sin embargo inmersos en un proceso de transformaci¨®n. El laborismo se recompone poco a poco de la mano de Shelly Yechimovitch, quien el domingo critic¨® a Netanyahu por tratar de centrar la campa?a la supuesta amenaza iran¨ª. A los laboristas le queda mucho sin embargo para ser el gran partido que fueron durante d¨¦cadas en Israel. La recomposici¨®n es un t¨¦rmino que tambi¨¦n se puede aplicar a Kadima, el principal partido de centro, que tras la salida de Tzipi Livni estrena l¨ªder. Sha¨²l Mofaz es el nuevo dirigente del partido y el encargado de revivir un partido cuya popularidad se encuentra en ca¨ªda libre. Un nuevo partido, el del presentador Yair Lapid podr¨ªa ser la sorpresa de estos comicios, con un programa a favor del laicismo y del liberalismo econ¨®mico.

Si la oposici¨®n de centro, centro-izquierda uniera fuerzas superar¨ªa la treintena de esca?os que le otorgan los sondeos al Likud. A¨²n as¨ª, aunque la oposici¨®n fuera capaz de superar su profunda divisi¨®n y de aunar fuerzas, Netanyahu contar¨ªa con el apoyo del bloque de la derecha, que en cualquier caso dejar¨ªa a la izquierda en minor¨ªa.