Netanyahu cancela las elecciones y forma un Gobierno de unidad nacional
El pacto evita las elecciones anticipadas que hab¨ªa anunciado el primer ministro un d¨ªa antes El acuerdo fortalece al Gobierno ante cualquier decisi¨®n de gran calado, incluido un ataque a Ir¨¢n
Israel ha amanecido hoy con un nuevo Gobierno. Fue una decisi¨®n tomada literalmente de la noche a la ma?ana. En plena madrugada, el primer ministro israel¨ª, Benjam¨ªn Netanyahu y Sha¨²l Mofaz, l¨ªder del opositor Kadima, han llegado a un acuerdo para formar un Gobierno de unidad nacional y desactivar la convocatoria de elecciones, anunciada un d¨ªa antes y prevista para septiembre. Con este pacto-bomba gestado en secreto, Israel cuenta ahora con el Gobierno de coalici¨®n m¨¢s amplio de su historia, capaz de adoptar decisiones de gran calado ¨Cun potencial ataque a Ir¨¢n incluido- sin contar con la ahora menguada oposici¨®n.
El derechista Likud de Netanyahu y el centro derecha de Kadima son los dos mayores partidos del Parlamento israel¨ª. Encabezar¨¢n ahora una coalici¨®n de Gobierno con 94 esca?os en la Knesset, el Parlamento israel¨ª, compuesto por un total de 120. Con este quiebro pol¨ªtico, Netanyahu ha conseguido deshacerse de la amenaza perenne de los peque?os partidos de su coalici¨®n, entre ellos los ultrarreligiosos, que amenazaban con romper el Ejecutivo cada vez que ve¨ªan peligrar sus demandas.
Al mediod¨ªa, Netanyahu ha comparecido en conferencia de prensa junto a Mofaz ante un pa¨ªs al que el pacto le pill¨® con el pie cambiado. Nadie se lo esperaba; por lo menos no ahora. ¡°Yo estaba preparado para acudir a las elecciones, pero cuando supe que pod¨ªamos establecer un Gobierno muy amplio, el m¨¢s amplio de la historia de Israel, me di cuenta de que pod¨ªa restablecer la estabilidad¡±, ha dicho el primer ministro. ¡°Shaul, bienvenido a bordo¡±, ha terminado.
El acuerdo de tres folios que Likud y Kadima han redactado en secreto en los ¨²ltimos d¨ªas establece dos objetivos fundamentales para la nueva coalici¨®n de Gobierno: primero, reformar la conocida como ley Tal, que exime a los jud¨ªos ultraortodoxos de cumplir el servicio militar obligatorio para el resto de los israel¨ªes ¨Ctres a?os para los hombres y dos para las mujeres-. La justicia israel¨ª hab¨ªa ordenado que se reemplazara esta ley antes del fin de verano por considerarla discriminatoria. Sonadas discrepancias en el seno del Ejecutivo anterior amenazaban incluso su supervivencia ante la negativa de los partidos religiosos de acabar con la prebenda. La segunda meta que se proponen los dos grandes partidos es la eterna reforma pendiente de un sistema electoral que ha garantizado la presencia de peque?os partidos en las sucesivas coaliciones de Gobierno en Israel.
Alcanzar una soluci¨®n negociada con los palestinos no figura entre las prioridades del nuevo Gobierno. Kadima, que en otros tiempos hizo del proceso de paz su bandera, ahora se centra en cuestiones puramente nacionales.
?E Ir¨¢n? Algunos de los analistas que hoy se han lanzado a especular sobre los posibles motivos de este vuelco pol¨ªtico apuntan precisamente a una posible campa?a b¨¦lica en contra de las instalaciones nucleares de Teher¨¢n ahora que el Gobierno est¨¢ m¨¢s fortalecido que nunca y que representa a ampl¨ªsimos sectores de la sociedad israel¨ª. El modus operandi no ser¨ªa nuevo. En 1967, justo antes de la guerra de los seis d¨ªas, el Likud se uni¨® a los laboristas para formar un Gobierno de Unidad nacional con el que hacer frente a la campa?a militar entonces en ciernes.
A Mofaz, reci¨¦n estrenado l¨ªder de Kadima tras la ca¨ªda en desgracia de Tzipi Livni hace unas semanas, le espera ahora el puesto de vice primer ministro en el nuevo Ejecutivo. Con Mofaz, de origen iran¨ª y ex ministro de Defensa, hay ya tres exjefes del Estado Mayor en el Gobierno, lo que cobra relevancia en un momento en el que las amenazas israel¨ªes sobre un posible ataque a Ir¨¢n se intensifican. El desarrollo del programa nuclear iran¨ª obsesiona a Netanyahu, que la considera una amenaza existencial comparable al Holocausto.
El acuerdo de Gobierno ha disgustado a la oposici¨®n, que lo considera una maniobra pol¨ªtica sucia y oportunista. Shelly Yacimovich, jefa del laborismo, ha dicho que se trata de ¡°una alianza de cobardes¡± y que es el mayor ¡°zigzag de la historia pol¨ªtica de Israel que nadie olvidar¨¢¡±.
Yair Lapid, el joven presentador y estrella emergente de la pol¨ªtica israel¨ª, considera el pacto ¡°feo y corrupto¡± y una muestra de ¡°la vieja manera de hacer pol¨ªtica¡±. De Lapid se dijo que podr¨ªa dar la sorpresa en las pr¨®ximas elecciones. Ahora deber¨¢ esperar hasta fin de 2013 para poder dar muestra de su brillo en las urnas. Meretz, el partido de izquierdas, juzga el pacto de ¡°pestilente¡±.
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