El linchamiento de dos brasile?os en Bolivia tensa las relaciones bilaterales
Una turba quem¨® vivos a dos presuntos delicuentes acusados de asesinato. Un senador opositor boliviano permanece refugiado en la Embajada brasile?a
El linchamiento de dos brasile?os en un pueblo boliviano situado en la frontera con Brasil, ocurrido el pasado martes, ha tensado un poco m¨¢s las relaciones entre ambos pa¨ªses, tirantes por la negativa boliviana a otorgar un salvoconducto a un senador opositor refugiado en la Embajada brasile?a en La Paz y al que el Gobierno de Dilma Rousseff otorg¨® el asilo el pasado mes de junio.
Agentes del Grupo Especial de Fronteras de Brasil han retornado este jueves a su pa¨ªs sin los cuerpos de los dos ciudadanos quemados vivos en la localidad fronteriza de San Mat¨ªas, a 800 kil¨®metros al este de Santa Cruz, ante la ausencia de delegados del Ministerio P¨²blico de Bolivia, que ten¨ªan previsto llegar al lugar en las pr¨®ximas horas.
El periodista Berty Vaca inform¨® a EL PA?S desde San Mat¨ªas de que las autoridades locales denegaron el permiso para recuperar los restos de los dos brasile?os, enterrados en fosas comunes. Los agentes han regresado a la ciudad brasile?a de C¨¢ceres hasta que el fiscal de distrito de Santa Cruz, Isabelino G¨®mez, les convoque tras su llegada a la localidad de San Mat¨ªas, de unos 12.000 pobladores.
Los brasile?os Rafael Max D¨ªaz, de 27 a?os, y Jefferson Castro Lima, de 22, fueron linchados por una turba que los arrebat¨® de las celdas policiales, donde estaban detenidos acusados de matar a tres bolivianos en un local nocturno de San Mat¨ªas la madrugada del martes.
Cerca de 300 personas rebasaron a 15 polic¨ªas y sacaron a los brasile?os para castigarlos, rociarlos de gasolina y quemarlos vivos. Los vecinos explicaron que est¨¢n cansados de tanta impunidad: los delincuentes eran detenidos e inmediatamente volv¨ªan a las calles. Los dos brasile?os ten¨ªan antecedentes policiales y estaban considerados como delincuentes peligrosos.
El ministro del Interior, Carlos Romero, que estuvo unas horas en San Mat¨ªas, se mostr¨® sorprendido por la violenta reacci¨®n ciudadana y por la entrada en el pa¨ªs de forma irregular de brasile?os con antecedentes delictivos, seg¨²n relat¨® el periodista Vaca. Romero hizo notar que la frontera de esa localidad con Brasil se extiende a lo largo 350 kil¨®metros, con 10 puestos fronterizos a cargo de dos funcionarios de migraci¨®n y un cuartel policial con 10 agentes.
La Canciller¨ªa brasile?a ha expresado su repudio por el linchamiento de dos compatriotas y ha pedido al Gobierno boliviano celeridad y rigurosidad en las investigaciones.
Las relaciones entre Brasil y Bolivia ya atravesaban una crisis diplom¨¢tica por la negativa del Gobierno de Evo Morales a otorgar un salvoconducto al senador de Convergencia Nacional Roger Pinto, al que Brasil concedi¨® en junio el asilo pol¨ªtico y que se encuentra a¨²n en la sede de la Embajada de Brasilia en La Paz.
La decisi¨®n brasile?a de conceder asilo a Pinto fue calificada de ¡°desatinada¡± por el vicepresidente ?lvaro Garc¨ªa Linera. Varios ministros lamentaron que el embajador Marcel Biato se haya convertido en ¡°vocero¡± de Pinto y parlamentarios oficialistas han mencionado que la legaci¨®n diplom¨¢tica corre el riesgo de convertirse en ¡°refugio de delincuentes¡±, ya que que Pinto ten¨ªa pendiente una decena de juicios por delitos comunes.
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