Los empresarios franceses desconf¨ªan de las reformas de Hollande

Los empresarios franceses desconf¨ªan de las reformas fiscales que est¨¢ a punto de lanzar el Gobierno socialista. La patronal MEDEF lleva semanas advirtiendo que es preciso reducir m¨¢s el gasto p¨²blico y los costes del trabajo para mejorar la competitividad, y se queja de que las subidas de impuestos no estimulan el consumo ni el crecimiento. Esta semana, los primeros ejecutivos de Renault, PSA y L¡¯Oreal han criticado los planes de Fran?ois Hollande, que afronta su momento m¨¢s duro en cuatro meses: la econom¨ªa sigue estancada, las cifras de paro no dejan de empeorar (supera ya los tres millones de personas) y los expertos dudan que Francia pueda llegar al prometido 3% de d¨¦ficit en 2013.

?El Gobierno presenta el viernes los detalles de los presupuestos de 2013, resumidos con la expresi¨®n ¡°rigor de izquierdas¡± porque ponen el acento en las subidas de impuestos a las empresas y los particulares m¨¢s ricos. El proyecto pasa adem¨¢s por recortar un m¨ªnimo de 33.000 millones el a?o pr¨®ximo para bajar en un punto y medio el d¨¦ficit de este a?o (4,5%). Dos terceras partes del ajuste saldr¨¢n de nuevos impuestos, y un tercio del ahorro en el gasto.

La patronal se ha colocado frontalmente contra el plan de los socialistas, y dos pesos pesados, Carlos Ghosn, el presidente de Renault y Nissan, y Philippe Varin, el de PSA Peugeot Citro?n, han reclamado al Gobierno que se ocupe con urgencia de mejorar la competitividad de la industria francesa y especialmente de aligerar los costes del trabajo.

El primer ministro, Jean-Marc Ayrault, ha pedido al Alto Consejo de Financiaci¨®n de la Protecci¨®n Social, una asamblea formada por 49 agentes sociales y personalidades, creada por Nicolas Sarkozy, que en enero pr¨®ximo presente ideas para reformar el sistema y lograr que la financiaci¨®n de las prestaciones sociales ¡°pese menos sobre el trabajo¡±.

Seg¨²n explic¨® Ayrault, Francia distribuye en este momento 650.000 millones anuales, casi un tercio del PIB, en beneficios sociales (pensiones, enfermedad e invalidez, desempleo, vivienda y exclusi¨®n social) y el 77% de la financiaci¨®n de esos fondos eleva el coste de los salarios.

Otro caballo de batalla de los patronos son los impuestos. Adem¨¢s de subir el impuesto sobre la fortuna y de elimninar ventajas fiscales a los m¨¢s ricos, Hollande va a implantar un tramo del 45% para las rentas superiores a los 150.000 euros y otra del 75% para los ingresos que superen al mill¨®n de euros. El presidente ejecutivo de L¡¯Or¨¦al, Jean-Paul Agon, dijo el martes al Financial Times que el impuesto del 75% har¨¢ ¡°pr¨¢cticamente imposible¡± reclutar talentos para las empresas en Francia. Agon fue uno de los quince dirigentes de empresa que en 2010 pidi¨® a Sarkozy que subiera los impuestos a las rentas m¨¢s altas; ahora dice que entonces no pensaba ¡°en una tasa tan elevada¡±.

Tras saberse que Bernard Arnault, due?o del l¨ªder mundial del lujo, LVMH, hab¨ªa pedido la nacionalidad belga, Hollande afirm¨® en televisi¨®n que la algunas subidas de impuestos solo se aplicar¨¢n ¡°mientras se equilibran las cuentas p¨²blicas¡±. El presidente cree que la tasa del 75% tiene un alto componente ¡°simb¨®lico y patri¨®tico¡±, pero solo afectar¨¢ a ¡°unas 2.000 o 3.000 personas¡±.

El ajuste de 33.000 millones tambi¨¦n inquieta a la patronal. Su presidenta, Laurence Parisot, ha dicho que los emprendedores sienten ¡°pavor¡± porque salga, a partes iguales, de los impuestos a las empresas, a los particulares y del ahorro del gasto. Seg¨²n Parisot, ¡°las familias y empresas podr¨ªan adoptar comportamientos poco favorables al consumo y el est¨ªmulo del crecimiento¡±, y ser¨ªa mejor ¡°reducir gastos el doble de lo que se suben los impuestos¡±.

El Gobierno replica que ha elegido subir los impuestos a los particulares y empresas m¨¢s potentes ¡°precisamente para que las medidas no perjudiquen al consumo y a la actividad de las pymes¡±. Hollande y Aurault han ligado la aprobaci¨®n de los presupuestos en el Parlamento a la ratificaci¨®n del tratado europeo. Aunque los verdes y el ala izquierda del Partido Socialista votar¨¢n contra el tratado firmado por Angela Merkel y Sarkozy, el Ejecutivo cuenta con los votos de la derecha. Quiere enviar una se?al de realismo y rigor para mantener en calma a los mercados financieros, a Bruselas y a Berl¨ªn. A pesar de que Standard & Poor¡¯s degrad¨® en enero la calificaci¨®n de la deuda francesa, Par¨ªs sigue financi¨¢ndose a tipos de inter¨¦s muy bajos, algunos d¨ªas negativos, como una s¨®lida triple A.