¡°Este es el trabajo m¨¢s duro del mundo. Es solo dolor¡±

Ha esperado toda su vida para este momento, y muchos l¨ªderes europeos lo ven como la ¨²ltima esperanza para la estabilidad de Grecia. Pero para Antonis Samar¨¢s (Atenas, 1951) liderar su pa¨ªs no es en absoluto divertido. ¡°?Crees que alguien puede ser feliz siendo primer ministro de Grecia?¡±, preguntaba en voz baja en una entrevista el pasado viernes, colocando los codos sobre las rodillas. ¡°Este es el trabajo m¨¢s duro del mundo. Es solo dolor¡±, aseguraba.

Desde su llegada al poder en junio despu¨¦s de dos elecciones tumultuosas, Samar¨¢s ha estado trabajando para restaurar la credibilidad de Grecia y para disipar los temores de que el pa¨ªs podr¨ªa abandonar el euro, incluso aunque la severa austeridad que debe imponer para mantener al pa¨ªs dentro de la moneda com¨²n avive una nueva ola de protestas sociales.

Sentado en su despacho, no hizo otra cosa que declarar que hab¨ªa conseguido ese objetivo. ¡°Hay un riesgo cero de que Grecia abandone el euro¡±, dijo. Pero dej¨® caer que las condiciones para ser miembro de la moneda ¨²nica llegaron con un coste pol¨ªtico y econ¨®mico creciente.

En una semana en que se han producido violentas protestas en la propia Grecia y en Espa?a contra las duras medidas de austeridad y el creciente paro, y despu¨¦s de otras manifestaciones masivas en el normalmente tranquilo Portugal, Samar¨¢s alert¨® a la comunidad internacional para que presten atenci¨®n a ¡°este nuevo fen¨®meno social¡± que barre Europa.

¡°Es el resultado de esta enorme crisis y esta enorme recesi¨®n en la que estamos inmersos¡±, dijo. ¡°As¨ª que eso deber¨ªa alertar a nuestros aliados y a Occidente: si esto ocurre en Grecia y en Espa?a, y ma?ana en otros pa¨ªses, deber¨ªan asegurarse de que no se intensifican las protestas¡±.

Mientras lucha para mantener el lugar de Grecia en Europa, Samar¨¢s est¨¢ librando una batalla cuesta arriba para contener los da?os en casa. El paro se sit¨²a en el 24%, y sigue subiendo, y llega a m¨¢s del 50% en el caso de los j¨®venes, una situaci¨®n que Samar¨¢s califica como su ¡°problema n¨²mero uno¡±. El PIB se ha contra¨ªdo en un 25% desde 2009, y se estima que unas 400.000 peque?as empresas corren el riesgo de cerrar en los pr¨®ximos meses.

Esta es la raz¨®n por la que Samar¨¢s presiona para conseguir m¨¢s tiempo ¡ªhasta 2016 en vez de 2014¡ª para aplicar un nuevo paquete de medidas de austeridad muy impopulares por unos 11.500 millones de euros, que incluyen recortes en el sector p¨²blico y en las pensiones, as¨ª como unos 2.000 millones en nuevos tributos.

Grecia necesita tomar estas medidas para desbloquear la ayuda financiera de sus prestamistas internacionales para el mes que viene. Sin esa liquidez, advierte Samar¨¢s, el pa¨ªs podr¨ªa colapsar.

Samar¨¢s dijo el jueves que ese hab¨ªa sido el d¨ªa m¨¢s feliz desde que est¨¢ en el cargo, cuando su Gobierno alcanz¨® un acuerdo b¨¢sico sobre las medidas de austeridad. Pero la troika ¡ªla Comisi¨®n Europea, el Banco Central Europeo y el FMI¡ª todav¨ªa deben decidir si el pa¨ªs puede cumplir sus promesas despu¨¦s de repetidos incumplimientos.

Su mensaje a los griegos fue claro: llegar¨¢n d¨ªas mejores. ¡°Lo que os digo es que hay esperanza. Eso es todo lo que puedo ofrecer¡±. Pero su mensaje a Europa fue tambi¨¦n claro: sin su ayuda, sus promesas pueden resultar vac¨ªas. ¡°Estamos cambiando, pero al mismo tiempo ten¨¦is que ayudarnos¡±, aleg¨®. Si no, podr¨ªa ser ¡°el fin de Grecia¡±.

Samar¨¢s afirma que ¡°oleadas de inmigrantes ilegales¡± est¨¢n llegando a Grecia, un ¡°gran problema¡± que podr¨ªa empeorar si Siria estalla y hay m¨¢s refugiados que entran desde Turqu¨ªa hasta Grecia. ¡°Los inmigrantes ilegales han tomado Atenas¡±, dice, creando un ¡°problema de salud p¨²blica¡± y un incremento de los delitos.

? The New York Times Service.