Un pa¨ªs en la encrucijada
Venezuela, convertida en el Estado m¨¢s violento de Am¨¦rica Latina tras Honduras, decide hoy si pasa p¨¢gina a los 14 a?os del r¨¦gimen autoritario y populista de Hugo Ch¨¢vez
Los carteles que dicen ¡°zona libre de humo¡± son cinco veces m¨¢s grandes que los que proh¨ªben llevar armas en los bares de Caracas, una ciudad donde sus habitantes pierden m¨¢s de tres horas al d¨ªa en enormes atascos de tr¨¢fico y donde llenar el tanque de gasolina de un todoterreno medio (42 litros de 95 octanos) cuesta 30 centavos de d¨®lar frente al precio de un d¨®lar de una peque?a botella de agua mineral. La capital venezolana es tambi¨¦n el lugar donde llevar un ordenador por la calle, sacar un iphone en el metro, incluso un reloj en la mu?eca en determinados barrios entra?an el alto riesgo de ser atracado, pero donde tomarse un whisky de 12 a?os en una de las terrazas m¨¢s sifrinas (pijas), como la 360, viendo el espectacular panorama que componen el monte ?vila y los rascacielos, sale por poco m¨¢s de cuatro euros.
El pa¨ªs de la abundancia petrolera, patria de los culebrones televisivos y amante de los concursos de misses hasta el punto de que los bancos ofrecen cr¨¦ditos blandos para operaciones de cirug¨ªa est¨¦tica, se enfrenta desde hace a?os a una terrible pandemia: la violencia. Venezuela se ha convertido en uno de los pa¨ªses m¨¢s violentos de Am¨¦rica Latina, por detr¨¢s de Honduras, pero por delante de M¨¦xico y Colombia, con una tasa de homicidios de 48 por 100.000 habitantes. Solo el a?o pasado se registraron 19.000 asesinatos. Y el virus de la inseguridad no para de infectar cada vez m¨¢s a m¨¢s ¨®rganos del cuerpo social.
Ni la polic¨ªa est¨¢ a salvo. ¡°Ya ni que est¨¦s trabajando uniformado est¨¢s seguro. Por eso es que, al terminar la guardia, uno evita llevar prendas alusivas al trabajo. Si los malandros se enteran de que eres polic¨ªa, saben que est¨¢s armado y te van a atacar para hacerse con tu arma¡±, dice el comisario Jos¨¦ Salcedo, que dos veces por semana patrulla por el barrio de Petare, el m¨¢s grande y hasta hace poco el m¨¢s peligroso de Caracas. En lo que va de a?o, al menos 77 polic¨ªas han sido asesinados en la capital fuera de sus horas de servicio. El m¨®vil de estos cr¨ªmenes es simple: robo de armas, de chalecos antibalas, motocicletas o de equipos de radio. El ¨²ltimo en caer fue el comisario Jes¨²s Car¨ªas, de 40 a?os de edad y 20 de servicio en el Cuerpo T¨¦cnico de Polic¨ªa Judicial, quien sufri¨® una emboscada el jueves por la tarde cuando volv¨ªa del acto de cierre de campa?a del presidente Hugo Ch¨¢vez en pleno centro de la capital.
13 a?os de chavismo
VENEZUELA EN CIFRAS
? La poblaci¨®n ha pasado de 23,2 millones en 1998 a 29 millones de habitantes.
? La esperanza de vida en 1998 era de 72,16 a?os. En 2011, 74,30 (puesto 110? mundial).
? El n¨²mero de viviendas ha crecido en 2 millones, hasta 8,2 millones. De un 6,6% de viviendas inadecuadas se ha pasado al 5,8%.
? En 2001, en un 30,2% de hogares hab¨ªa un coche. Diez a?os despu¨¦s, el porcentaje baja al 27,7%. En cambio, se duplic¨® el porcentaje de hogares con motocicleta, del 4% al 8,6%.
? En 1998 hab¨ªa un 50,4% de pobres y un 20,3% de pobres extremos. En 2011, la cifra bajar¨¢ al 31,6% y al 8,5%, respetivamente.
? Venezuela recibi¨® 685.000 turistas en 1998, 158.000 de ellos de EE UU y 15.000 de Espa?a. En 2010, los visitantes bajaron a 510.000. El descenso de turistas estadounidenses es significativo. En 2008 fueron 87.000. Por el contrario, hubo un fuerte incremento de espa?oles: 67.000.
EDUCACI?N
? La tasa de alfabetizaci¨®n pas¨® del 90,9% en 1998 al 93,60% en 2010.
? La escolarizaci¨®n en el curso 2000/2001 en primaria era del 90,7%, y en secundaria, del 53,6%. En el curso 2010-2011 las cifras ascendieron al 93,2% y el 73,3%, respectivamente. Es significativo el incremento en secundaria.
? En 2000 hab¨ªa casi 900.000 universitarios. En 2010 la cifra aument¨® hasta los 2.300.000.
ECONOM?A
? La producci¨®n de la compa?¨ªa estatal de petr¨®leo ha bajado de 3,5 millones de barriles diarios en 1998 a 2,4 millones en 2012. Es el 12? productor mundial.
? En 1998 se exportaron 3 millones de barriles y 1,6 millones ahora. Sin embargo, la compa?¨ªa estatal ha subido su plantilla de 32.000 trabajadores a 105.000.
? El desempleo en 1998 era del 16,6% y descendi¨® al 7,9% en 2011. El 43% de la poblaci¨®n activa est¨¢ en la econom¨ªa sumergida.
? La renta per capita en 1998 era de 8.500 d¨®lares (6.537 euros) y en 2011 fue 12.700 d¨®lares (9.768 euros). Venezuela ocupa el puesto 92 en la clasificaci¨®n mundial.
? El PIB ha pasado de 91.339 millones de d¨®lares (70.255 euros) en 1998 a 315.000 millones (242.289 euros) en 2011.
? La inflaci¨®n en 1999 era el 20% y se ha disparado al 27,9% en 2011.
? Las importaciones tambi¨¦n se han incrementado. En 1998 eran de 16.755 millones de d¨®lares (12.887 euros) y en 2012 casi se han duplicado hasta los 29.930 millones (23.021 euros). Los empleados p¨²blicos han pasado de 1 mill¨®n en 1998 a 2,5 millones en 2012.
Muchos de estos asesinatos son ordenados desde las c¨¢rceles. ¡°Tenemos informaci¨®n extraoficial de que algunos delincuentes que est¨¢n presos pagan hasta 10.000 bol¨ªvares (unos 1.782 euros) por cada polic¨ªa muerto, siempre que se les presente la pistola reglamentaria del agente¡±, dice Manuel Furelos, director de la polic¨ªa de Sucre, uno de los cinco municipios que forman la zona metropolitana de Caracas.
El poder de fuego de los pranes, t¨¦rmino importado al parecer de las c¨¢rceles de Puerto Rico para llamar a los presos que controlan el tr¨¢fico de drogas y de armas puertas adentro y las redes de extorsi¨®n y secuestro que operan puertas afuera, es mucho mayor que el de los polic¨ªas que patrullan el pa¨ªs. ¡°Dentro de los penales, un rifle semiautom¨¢tico R15 cuesta unos 30.000 bol¨ªvares [m¨¢s de 5.300 euros], y un FAL [fusil de asalto ligero, usado por el Ej¨¦rcito], unos 25.000 [4.400 euros]. En la c¨¢rcel de El Rodeo, en las afueras de Caracas, todos los domingos se recogen 55 bol¨ªvares por persona [casi 10 euros] para comprar balas y armas¡±, asegura Jos¨¦ Argenis S¨¢nchez, un exconvicto que ahora preside la organizaci¨®n de derechos humanos Liberados en Marcha.
Los pranes son tambi¨¦n los l¨ªderes de los grandes motines que desde el a?o pasado tienen lugar cada vez con mayor frecuencia en las prisiones del pa¨ªs y que el Gobierno trata de sofocar empleando el Ej¨¦rcito. Solo en el primer semestre de 2012 se han cometido 304 homicidios dentro de las c¨¢rceles, de acuerdo con las cifras de la ONG Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), y desde 1999 han muerto violentamente m¨¢s de 5.000 reos.
H¨¦ctor Guerrero, alias El Ni?o Guerrero, era uno de esos tipos que deciden qui¨¦n merece vivir y qui¨¦n debe morir en los penales. Se fug¨® a mediados del mes pasado, llev¨¢ndose consigo al parecer a Jimena Araya, un caso cl¨ªnico. La actriz y modelo, de 29 a?os, que una vez por semana hac¨ªa de vedette en uno de los programas humor¨ªsticos m¨¢s vistos de la televisi¨®n, es buscada estos d¨ªas sin descanso por la polic¨ªa y la prensa rosa. Han descubierto que lideraba una red de prostituci¨®n que ten¨ªa como clientes a los presos del Centro Penitenciario de Aragua, a unos 100 kil¨®metros de Caracas. Rosita, como se la conoce, animaba las noches y los d¨ªas de la discoteca Tokyo, un garito que funcionaba dentro de la c¨¢rcel, donde los presos beb¨ªan y bailaban al ritmo de los espect¨¢culos en vivo de bandas como Los Diablitos o Los Inquietos. Los gastos, seg¨²n la polic¨ªa, corr¨ªan por cuenta de El Ni?o Guerrero, y a Rosita no se le ha vuelto a ver nunca m¨¢s por los estudios de televisi¨®n.
La inseguridad, unida a la falta de trabajo ¡ªel desempleo oficial es del 8%, pero el 43% de la poblaci¨®n activa trabaja en la econom¨ªa informal¡ª, est¨¢ causando tambi¨¦n una di¨¢spora de venezolanos, en su mayor¨ªa j¨®venes profesionales de clase media, hartos de vivir en un continuo sobresalto y de a?adir nuevas rutinas de protecci¨®n a su vida cotidiana.
Hay empresas que se encargan de hacer la huida m¨¢s sencilla. La p¨¢gina web venezolana mequieroir.com ofrece informaci¨®n, consejos, testimonios y conferencias a quienes tienen la inquietud inicial de emigrar. Como primer paso, proponen completar una prueba que calibra por igual ¨¢nimos y posibilidades. ¡°?Cu¨¢l es la raz¨®n principal por la cual pensar¨ªas en emigrar de tu pa¨ªs?¡±, es la segunda pregunta, y dos de las cuatro opciones de respuesta son estas: ¡°A) Bajo ingresos econ¨®micos / desempleo. D) Inseguridad social y jur¨ªdica, delincuencia¡±. Una vez completado el cuestionario, se revela la respuesta como el hor¨®scopo del d¨ªa: ¡°T¨² tienes una historia particular de cambio (¡). No dejes de leer la secci¨®n ¡®Emigro con toda la familia¡¯, presente en el cap¨ªtulo ¡®Me quiero ir a trabajar¡¯. Has llegado al lugar correcto¡±.
En lo que va de a?o, al menos 77 polic¨ªas han sido asesinados en Caracas para robarles
Los venezolanos se est¨¢n yendo a Espa?a, Colombia, Panam¨¢ y EE UU, y es la primera vez en la historia del pa¨ªs que se van. Los emigrados solo son mayor¨ªa en una ciudad del mundo, El Doral, al sur de Florida, un remedo de la Little Habana de Miami con 45.000 habitantes. No hay estad¨ªsticas oficiales de cu¨¢ntos se han ido, pero cada venezolano tiene una ausencia que contar: un hermano, un amigo, un compa?ero de oficina. En alg¨²n momento de las celebraciones que se hacen en casa es frecuente ver un ordenador encendido y conectado a Skype, y al otro lado, movi¨¦ndose en c¨¢mara lenta o a la velocidad que permita el ancho de banda, el plano americano del que se fue. As¨ª celebr¨® Mar¨ªa Gabriela su cumplea?os, el pasado 26 de agosto, desde Caracas: con Sandra y Antonio desde Madrid y Andre¨ªna desde Par¨ªs, todos en la misma pantalla.
El 90% de los graduados de la promoci¨®n de m¨¦dicos de 2007 de la Universidad Central de Venezuela se han ido del pa¨ªs, la mayor¨ªa de ellos a Espa?a, donde ya, entre 2004 y 2006, hab¨ªan formalizado su inscripci¨®n en el Colegio Oficial de M¨¦dicos unos 1.200 venezolanos. De aquella generaci¨®n, Juraen Aguilar, de 30 a?os, m¨¦dico residente de un hospital p¨²blico de Caracas, fue una de los pocos que decidi¨® quedarse. ¡°Aguantar¨¦ hasta que no pueda m¨¢s¡±, suele decir. Su sueldo no supera los 250 euros al mes.
Los j¨®venes profesionales de clase media huyen del pa¨ªs por la inseguridad
El lugar de los venezolanos en la atenci¨®n m¨¦dica primaria lo ocupan mayoritariamente los cubanos. Desde 2003, cuando el presidente Ch¨¢vez creo la Misi¨®n Barrio Adentro, uno de los programas sociales bandera de su Gobierno, miles de ellos llegaron a Venezuela para prestar atenci¨®n en los sectores m¨¢s empobrecidos del pa¨ªs, que hasta entonces nunca hab¨ªan tenido acceso directo a los servicios de salud. Actualmente son m¨¢s de 11.000 y suelen vivir, junto con fisioterapeutas y entrenadores deportivos tambi¨¦n venidos de Cuba, en la segunda planta de los m¨®dulos que ha construido el Gobierno para la misi¨®n en las barriadas de toda Venezuela.
Los cubanos tambi¨¦n se han hecho cargo del sistema de identificaci¨®n, migraci¨®n y extranjer¨ªa, del servicio nacional de registros y notar¨ªas y de las redes inform¨¢ticas de la estatal Petr¨®leos de Venezuela (PDVSA). La compa?¨ªa Albet Ingenier¨ªa y Sistemas, SA, cara comercial de la Universidad de Ciencias Inform¨¢ticas de La Habana, es la encargada del software ¡°para que Venezuela pueda alcanzar la plena soberan¨ªa tecnol¨®gica¡±. En abril de 2010, el exdirector de Protecci¨®n Civil, el general Antonio Rivero, denunci¨® que hab¨ªa militares cubanos involucrados en las operaciones de la Fuerza Armada Nacional. ¡°En el ¨¢rea de inteligencia, los cubanos ense?an metodolog¨ªa para hacer el trabajo hacia lo interno y lo externo del pa¨ªs. Es un grupo de militares expertos, de diferentes rangos. Por supuesto, esto se est¨¢ haciendo sin dejar rastro¡±, dijo Rivero entonces, sin revelar nombres.
En el primer semestre se han producido 304 muertes en prisi¨®n. Los motines son habituales
Pese a todo, las misiones han sido la gran obra de Ch¨¢vez. El teniente coronel de paracaidistas lleg¨® al poder tras la implosi¨®n del sistema de partidos en 1998, cuando la ¨¦lite pol¨ªtica se engolf¨® en la cleptoman¨ªa. La versi¨®n oficial del pa¨ªs destacaba la armon¨ªa social de Venezuela, pero la realidad era que la desigualdad, el clasismo y el racismo campaban a sus anchas. Ch¨¢vez rompi¨® con el mito y puso en marcha planes para reducir el analfabetismo, baj¨¢ndolo del 6% al 3%; instal¨® mercados populares con productos baratos y facilit¨® el acceso al cr¨¦dito de las clases medias.
El 90% de los m¨¦dicos de la promoci¨®n de 2007 han emigrado, la mayor¨ªa a Espa?a
En casi 14 a?os de chavismo, los econ¨®micamente d¨¦biles han aumentado su poder adquisitivo y su consumo de bienes, pero la oposici¨®n argumenta que eso no ha servido realmente para reducir la desigualdad. Ricardo Villasmil, coordinador del ¨¢rea econ¨®mica de la Mesa de la Unidad Democr¨¢tica (MUD), opina que Ch¨¢vez ¡°identific¨® bien los problemas, pero no supo arreglarlos, sino que los profundiz¨® y manipul¨® pol¨ªticamente. Con una inflaci¨®n cercana al 28%, la m¨¢s alta de Am¨¦rica Latina, y la generalizaci¨®n de subsidios, como ocurre en el caso de la gasolina, resulta que, parad¨®jicamente, se benefician m¨¢s los ricos que los pobres¡±, a?ade.
Para la oposici¨®n, tampoco se ha avanzado en el terreno de la educaci¨®n. Juan Maragall, secretario de Educaci¨®n del Estado de Miranda, de donde era gobernador Henrique Capriles antes de lanzarse a la carrera presidencial, asegura ¡°que el r¨¦gimen ha abandonado la ense?anza b¨¢sica, hay tres millones de adolescentes fuera del sistema escolar y en la mayor¨ªa de los casos de muertes violentas, v¨ªctima y victimario tienen menos de 25 a?os¡±. Maragall tambi¨¦n critica que ¡°el Gobierno haya acabado con la carrera docente al designar a los maestros a dedo, en lugar de por concurso como era antes, y crear redes clientelares¡±.
Pero el gran reproche que hacen muchos venezolanos al presidente es que en su empe?o de llevar adelante su proyecto bolivariano, o el ¡°socialismo del siglo XXI¡±, ha convertido el Estado en una fenomenal m¨¢quina de propaganda, excluyendo a todos los disidentes y olvid¨¢ndose de los problemas reales de la gente.
Durante su mandato, Ch¨¢vez ha cerrado 34 emisoras de radio y uno de los dos canales m¨¢s grandes de televisi¨®n
Durante su mandato, Ch¨¢vez ha cerrado 34 emisoras de radio y uno de los dos canales m¨¢s grandes de televisi¨®n, y ha acosado cualquier opini¨®n cr¨ªtica. Adem¨¢s, obliga a todos los medios p¨²blicos y privados a emitir en cadena todos sus mensajes a la naci¨®n, que en ocasiones han sido hasta de ocho horas, durante las cuales canta rancheras, insulta a sus adversarios pol¨ªticos o anuncia las grandes obras que en el futuro ejecutar¨¢ el Estado. Las cadenas, como son popularmente conocidas en Venezuela, son inesperadas, lo mismo interrumpen la telenovela de las nueve que llegan en el ¨²ltimo minuto de un partido de b¨¦isbol, el deporte nacional. La ONG venezolana Monitoreo Ciudadano ha creado el Caden¨®metro, para medir cu¨¢ntas horas ha acaparado Ch¨¢vez todas las pantallas y radios del pa¨ªs: desde enero, el comandante ha hablado 109 horas con 23 minutos de forma simult¨¢nea, a trav¨¦s de todos los medios audiovisuales del pa¨ªs.
La exuberancia ideol¨®gica de Ch¨¢vez ha tenido como contrapartida el deterioro progresivo de las infraestructuras y servicios p¨²blicos. El pasado 25 de agosto, 48 personas murieron abrasadas al producirse una explosi¨®n en el patio de tanques de gas de la refiner¨ªa de Amuay, la m¨¢s grande de las cinco plantas de refino del pa¨ªs y orgullo nacional de tiempos pasados y mejores; este ha sido el peor accidente que ha padecido la industria en los ¨²ltimos 30 a?os. Los venezolanos no dan cr¨¦dito a que, siendo un pa¨ªs petrol¨ªfero, sufran cada vez con mayor frecuencia apagones por ¡°revolucionarios¡± que sean y tengan que importar gasolina.
En su empe?o por llevar adelante el proyecto bolivariano, ha hecho del Estado una fenomenal m¨¢quina de propaganda
¡°Al aumentar el n¨²mero de los cortes, ha aumentado tambi¨¦n el tiempo de respuesta para solventar la falla. Antes los apagones eran de 10 minutos y ahora son hasta de 10 horas, e incluso hay pueblos que se han quedado hasta dos d¨ªas sin luz¡±, dice el ingeniero Miguel Lara, ex gerente general de la Oficina de Planificaci¨®n del Sistema Interconectado. El otro flanco de las cr¨ªticas al Gobierno es el mantenimiento de las carreteras, una vez s¨ªmbolo del desarrollo nacional.
En las urnas se enfrentan hoy dos proyectos de futuro para Venezuela: la v¨ªa bolivariana del autoritarismo populista o la recuperaci¨®n de un sistema democr¨¢tico y liberal. Tras m¨¢s de una d¨¦cada dando palos de ciego, la oposici¨®n ha encontrado una identidad y un l¨ªder popular en Henrique Capriles y ha hecho del pragmatismo y de la eficacia en la gesti¨®n su bandera. Asume los avances sociales habidos estos a?os y salta al ring con un mensaje de reconciliaci¨®n nacional. Enfrente tiene el gran carisma y tir¨®n popular de Ch¨¢vez, pese al desgaste de a?os de ejercicio del poder y el c¨¢ncer que le diagnosticaron en junio del a?o pasado, y los recursos del Estado a su servicio. El resultado de las elecciones marcar¨¢ el destino del pa¨ªs y tendr¨¢ sin duda repercusiones continentales. ?Qui¨¦n ganar¨¢? Como dicen los venezolanos, ¡°lo m¨¢s seguro es que¡ qui¨¦n sabe¡±.
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