Los sindicatos piden a Obama que no ceda en la bajada de tasas a la clase media

El presidente Barack Obama ha iniciado esta ma?ana con los representantes de los principales sindicatos y grupos de derechos civiles de Estados Unidos la primera ronda de contactos para llegar a un acuerdo que evite la entrada en vigor de lo que se conoce como el abismo fiscal, un dr¨¢stico aumento de los impuestos y del recorte del gasto p¨²blico de 700.000 millones de d¨®lares que entrar¨ªa en vigor el 1 de enero de 2013. Los l¨ªderes laborales y sociales que han acudido a la Casa Blanca lo han hecho con una consigna clara: oponerse a cualquier recorte en gastos sociales y respaldar el incremento impositivo a los m¨¢s ricos.

¡°Estamos determinados a asegurarnos de que la clase media y los trabajadores no acaban pagando por la pol¨ªtica de un partido que no gobierna y el presidente tiene esa misma determinaci¨®n", ha asegurado Richard Trumka, presidente de la Federaci¨®n de Organizaciones Sindicales (AFL-CIO, en sus siglas en ingl¨¦s), en la rueda de prensa posterior a la reuni¨®n con Obama.

En su empe?o por lograr el mayor consenso posible en la renegociaci¨®n del d¨¦ficit, Obama se reunir¨¢ el mi¨¦rcoles con los consejeros delegados de las principales empresas del pa¨ªs y el viernes con los l¨ªderes de la C¨¢mara de Representantes y del Senado.

El viernes pasado, en su primera comparecencia ante los medios tras su reelecci¨®n, Obama se mostr¨® inflexible en su determinaci¨®n de aumentar los impuestos a los que m¨¢s tienen para evitar el abismo fiscal, aunque reconoci¨® que pod¨ªa ser flexible en otros aspectos de su plan. ¡°La reuni¨®n se enmarca en el esfuerzo que est¨¢ haciendo el presidente por tratar de buscar un amplio consenso para evitar el abismo fiscal¡±, ha comentado el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en una rueda de prensa eclipsada por el esc¨¢ndalo Petraeus. El plan que el presidente para renegociar el d¨¦ficit prev¨¦ una subida de impuestos para las clases altas y las corporaciones para recaudar 1,6 billones de d¨®lares, indic¨® Carney.

Para impedir que entre en vigor el abismo fiscal, Obama debe conseguir el respaldo del Partido Republicano que, tras las elecciones, se ha mostrado predispuesto a alcanzar un acuerdo que, sin embargo, no parece pasar por un aumento de los impuestos a las clases altas. ¡°Subir las tasas equivaldr¨ªa a reducir nuestra capacidad para crear los puestos de trabajo que todo el mundo est¨¢ pidiendo¡±, dijo el Presidente de la C¨¢mara de Representantes y virtual l¨ªder de los republicanos tras la p¨¦rdida de los comicios, John Boehner, el pasado s¨¢bado.

Estamos determinados a asegurarnos de que la clase media y los trabajadores no acaban pagando por la pol¨ªtica de un partido que no gobierna y el presidente tiene esa misma determinaci¨®n" Richard Trumka

Las asociaciones de trabajadores han sido un pilar esencial en la reelecci¨®n de Obama. ¡°Durante la campa?a, el presidente fue claro en su mensaje de no incrementar los impuestos a la clase media y en realizar recortes que no perjudiquen a los que menos tienen. Era su prioridad y tambi¨¦n la nuestra y hoy se lo hemos recordado", indica en conversaci¨®n telef¨®nica desde el Center for American Progress, presente en la reuni¨®n de la Casa Blanca. En el encuentro, le han? dejado claro al mandatario que no admitir¨¢n m¨¢s recortes impositivos a los ricos y que es preferible no llegar a un consenso antes del 31 de diciembre a firmar un acuerdo que sea negativo para el pa¨ªs.

Los sindicatos y otros grupos progresistas se muestran convencidos de que la victoria ha puesto a Obama en una situaci¨®n en la que no tiene por qu¨¦ hacer demasiadas concesiones a los republicanos, aseguran desde el Center for American Progress. En su ¨²ltima comparecencia p¨²blica, el propio mandatario advirti¨® de que los ciudadanos hab¨ªan respaldado su programa econ¨®mico en las urnas.?

El plan de Obama para evitar el abismo fiscal prev¨¦ un incremento impositivo a las clases altas y a las corporaciones para recaudar 1,6 billones de d¨®lares

AFL-CIO ha comenzado a hacer presi¨®n en los pasillos del Capitolio para disuadir a los pol¨ªticos dem¨®cratas de que acepten recortes en las ayudas p¨²blicas y MoveOn.org -parte, tambi¨¦n, de las agrupaciones que se ha reunido con Obama- ha enviado correos a sus miembros para que se movilicen contra esta posibilidad. "Sabemos que hay que hacer concesiones de cara a evitar el abismo fiscal, pero queremos asegurarnos de que los recortes no afectan a los m¨¢s d¨¦biles y que se empiezan a producir cuando la coyuntura econ¨®mica mejore para que el impacto sea menor", indican desde el Center for American Progress.

Ambos partidos coinciden en la necesidad de impedir la entrada en vigor del abismo fiscal que, de llegar a hacerse efectivo, podr¨ªa sumir a EE UU, y por extensi¨®n a la econom¨ªa mundial, en una nueva recesi¨®n, seg¨²n muchos analistas. Sin embargo, las posturas sobre lo que debe priorizarse difieren. Los dem¨®cratas dan preferencia al incremento impositivo para mantener la inversi¨®n en programas sociales y generar empleo; los republicanos son favorables a una reducci¨®n del gasto p¨²blico para reducir el d¨¦ficit sin necesidad de aumentar los impuestos.

La mayor¨ªa de los consejeros delegados con los que el mi¨¦rcoles se reunir¨¢ Obama, tampoco son proclives a una subida impositiva. Muchos, como los m¨¢ximos directivos de Honeywell, Wall-Mart o General Electric, son miembros del partido republicano. Otras de las empresas que acudir¨¢n a la Casa Blanca integran el movimiento Arreglemos la deuda, que promueve una soluci¨®n bipartidista para impedir que entre el vigor el abismo fiscal y que ya ha recaudado 40 millones de d¨®lares.

Las cesiones que pueda hacer el presidente parecen estar condicionadas al grado de incremento impositivo que acepte el Partido Republicano

La C¨¢mara de Comercio norteamericana, muy beligerante durante la campa?a electoral en contra de una subida de impuestos a las clases altas y que no ha sido invitada a las reuniones en la Casa Blanca para tratar el reajuste del d¨¦ficit, ha accedido este mismo martes a admitir un gran acuerdo para eludir el abismo fiscal que incluya un incremento de las tasas a cambio de eliminar barreras legales y deducciones. Boehner tambi¨¦n sugiri¨® la posibilidad de revisar el modelo impositivo eliminando algunas ventajas fiscales a determinados colectivos.

Las cesiones que pueda hacer el presidente parecen estar condicionadas al grado de incremento impositivo que acepte el Partido Republicano. El l¨ªder de la mayor¨ªa en el Senado, el dem¨®crata Harry Reid, ya ha advertido de que su partido no permitir¨¢ que ¡°se desvirt¨²e el actual sistema de la Seguridad Social¡±. Los sindicatos tambi¨¦n le han recordado a Obama hoy lo mismo.