Ortega da plant¨®n a la cumbre de C¨¢diz por un premio de poes¨ªa a Cardenal

El presidente nicarag¨¹ense, Daniel Ortega, tiene muy poco encaje. A pocas horas del inicio de la Cumbre Iberoamericana y cuando ya se hab¨ªa anunciado su presencia en C¨¢diz, el l¨ªder sandinista hizo saber anoche que no acudir¨ªa. ?El motivo del plant¨®n? Oficialmente, ¡°causas de fuerza mayor¡±. La realidad, seg¨²n fuentes diplom¨¢ticas, su irritaci¨®n por el premio Reina Sof¨ªa de Poes¨ªa Iberoamericana que do?a Sof¨ªa entreg¨® el jueves al sacerdote y revolucionario nicarag¨¹ense Ernesto Cardenal. Ortega no perdona a su antiguo compa?ero de filas revolucionario y ministro de Cultura hasta 1987 que se haya vuelto uno de los cr¨ªticos m¨¢s ac¨¦rrimos de su r¨¦gimen. Aunque a Cardenal no lo calla ni el Papa, como se vio durante la visita de Juan Pablo II a Nicaragua en 1983.

La baja inesperada de Ortega ha elevado a siete la lista de mandatarios ausentes, integrada por el cubano Ra¨²l Castro (que no acude nunca a estas citas), el venezolano Hugo Ch¨¢vez, la argentina Cristina Fern¨¢ndez de Kirchner (que ha alegado motivos de salud), el uruguayo Jos¨¦ Mujica (tambi¨¦n por motivos de salud), el guatemalteco Otto P¨¦rez Molina (por el terremoto que ha castigado a su pa¨ªs) y el paraguayo Federico Franco (a quien se le disuadi¨® de que viniera, para evitar el boicot a sus vecinos). Nadie esperaba que viniera Ch¨¢vez, pero se cre¨ªa que enviar¨ªa a su canciller y vicepresidente, Nicol¨¢s Maduro. No ha sido as¨ª y la delegaci¨®n venezolana, la de menor nivel, est¨¢ encabezada por un viceministro: el responsable de las relaciones con Europa, Temir Porras. Una forma de decir que las relaciones no Venezuela con sus hermanos americanos no pasan por la antigua metr¨®poli.

En una cumbre tan nutrida como la de C¨¢diz las ausencias, previstas o sobrevenidas, son inevitables. Incluso entre los invitados, como el primer ministro marroqu¨ª, Addelilah Benkir¨¢n. Tambi¨¦n hay invitados cuya presencia no se hab¨ªa anunciado, como el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, que ha llegado acompa?ando al jefe del estado Jos¨¦ Manuel Santos. En conjunto, los anfitriones, el Rey y el Gobierno espa?ol, se dan por satisfechos.