El misterioso secuestro expr¨¦s del contable de Berlusconi
La polic¨ªa italiana detiene a seis personas de una banda por mantener cautivos al contable de Il Cavaliere y a su esposa
Se sabe ahora, pero ocurri¨® hace un mes, la noche del 15 de octubre. Aquel lunes, Giuseppe Spinelli, el contable de Silvio Berlusconi, regresa tarde a su casa de Mil¨¢n. Al salir del ascensor, dos tipos armados con pistolas lo golpean, lo empujan hacia el interior de la casa y lo inmovilizan, junto a su esposa Anna, sobre un sill¨®n. Quieren hablar con su jefe. Cuando, a primera hora del martes 16 de octubre, Spinelli consigue localizar a Berlusconi, los secuestradores se ponen al tel¨¦fono y exigen al anterior jefe del Gobierno italiano 35 millones de euros a cambio de informaci¨®n sensible sobre el llamado caso Mondadori ¡ªen 2011, Berlusconi fue condenado a pagar 560 millones de euros al empresario Carlo Di Benedetti por sobornar a un juez para hacerse con la editorial¡ª. Tras hablar con Il Cavaliere, los secuestradores dejan libre al contable y se marchan por donde hab¨ªan venido.
La historia, sobre la que a¨²n planean muchas dudas, se ha conseguido mantener en secreto hasta que, en las ¨²ltimas horas, la polic¨ªa italiana ha practicado las primeras detenciones. Se tratar¨ªa de una banda formada por seis personas, tres italianos y tres albaneses, quienes ¨Cseg¨²n la polic¨ªa¡ª fueron descubiertos por un peque?o detalle: en el momento del secuestro, el jefe de los malhechores, un italiano de 53 a?os con antecedentes, llevaba puestas unas zapatillas de deporte rojas.
La ma?ana del 16 de octubre, tras ser liberados, el contable Spinelli y su esposa fueron recogidos por la escolta de Berlusconi, que los escondi¨® en un lugar secreto. La denuncia no fue presentada hasta un d¨ªa despu¨¦s, a trav¨¦s de un fax enviado por el abogado Nicola Ghedini a la fiscal¨ªa de Mil¨¢n.
Tras hacerse cargo del asunto, la fiscal antimafia Ilda Boccassini interrog¨® al contable y a su esposa. De aquella declaraci¨®n, y de las im¨¢genes captadas por las c¨¢maras de seguridad del edificio, surgi¨® la pista que llev¨® hasta Francesco Leone, un viejo arrepentido del clan Parisi. Al parecer, fue ¨¦l quien ofreci¨® a Berlusconi diverso material inform¨¢tico que le podr¨ªa ayudar a cambiar el curso de alguno de sus procesos penales. Seg¨²n las primeras filtraciones, la documentaci¨®n incluir¨ªa pruebas de que Gianfranco Fini, el actual presidente de la C¨¢mara de Diputados, estaba dispuesto a pactar con ciertos magistrados para arruinar la carrera pol¨ªtica de Berlusconi.
Entre los misterios que envuelven el caso, uno de los principales es qu¨¦ tipo de garant¨ªa ofreci¨® el anterior jefe del Gobierno a los malhechores para que dejaran en libertad a Giuseppe Spinelli, su contable de confianza. Tanto que ¨¦l era quien se encargaba ¨Cy se encarga todav¨ªa¡ªde pagar a las famosas muchachas de compa?¨ªa que el anterior primer ministro invitaba a sus fiestas y manten¨ªa a resguardo en una de sus muchas propiedades, Via Olgettina 65, el palacio milan¨¦s de las velinas de Berlusconi.
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