Los yihadistas se repliegan hacia el norte de Mal¨ª
La operaci¨®n francomaliense logra detener su avance hacia el sur y recuperar Konna y Diabali
Cientos de yihadistas han iniciado un repliegue sobre sus escondites en la zona monta?osa del norte de Kidal, cerca de la frontera argelina, dos semanas despu¨¦s del inicio de la operaci¨®n militar francomaliense Serval. As¨ª lo ha confirmado por tel¨¦fono un residente en esta regi¨®n, que asegura tambi¨¦n que cada vez se ven menos miembros de los grupos armados en las ciudades de Gao, Kidal y Tombuct¨² y que la aplicaci¨®n de la shar¨ªa o ley isl¨¢mica se ha relajado mucho en los ¨²ltimos d¨ªas. La Operaci¨®n Serval que est¨¢n llevando a cabo los Ej¨¦rcitos franc¨¦s y maliense desde el pasado 10 de enero ha logrado detener el avance yihadista hacia el sur, recuperar las dos ¨²ltimas ciudades que hab¨ªan ca¨ªdo en manos de los radicales, Konna y Diabali, e infligir un duro golpe a los grupos armados en sus bastiones de Gao, Kidal y Tombuct¨² mediante los bombardeos a¨¦reos.
En esta ¨²ltima ciudad se ha confirmado que los bombardeos franceses han destrozado el palacio contruido por el l¨ªder libio Muamar el Gadafi y que estaba siendo utilizado por los yihadistas como residencia.
En los ¨²ltimos d¨ªas, miembros de estos grupos, sobre todo de Ansar Dine y AQMI (Al Qaeda en el Magreb Isl¨¢mico), han empezado a concentrarse en la zona norte de Kidal, en concreto en torno a la ciudad fronteriza con Argelia de Tinzouatine, un lugar monta?oso y de dif¨ªcil acceso donde resulta m¨¢s f¨¢cil esconderse de los ataques a¨¦reos. ¡°Hay cierto movimiento, est¨¢ claro que Ansar Dine pretende replegarse en esta zona¡±, asegura un residente en Kidal, la ciudad de origen de Iyad Ag Ghali, l¨ªder del grupo salafista, quien se mueve como pez en el agua en este desierto.
"Cuentan con carros de combate de fabricaci¨®n sovi¨¦tica, camiones y 4x4 con artiller¨ªa pesada"
El repliegue de los yihadistas coincide con la noticia de que se ha producido una escisi¨®n en el seno del grupo Ansar Dine con la creaci¨®n del denominado Movimiento Isl¨¢mico del Azawad (MIA), que demanda una soluci¨®n negociada a la crisis. El MIA est¨¢ integrado, entre otros, por destacados miembros de Ansar Dine como Algabas Ag Intalla y Mohamed Ag Arib, uno de los negociadores que se traslad¨® a Ouagadougou (Burkina Faso) en el contexto de las conversaciones emprendidas bajo la mediaci¨®n de la Cedeao. Mediante un comunicado, este nuevo grupo pretende desmarcarse del terrorismo e incluso se compromete a combatir junto a Francia y el Ej¨¦rcito de Mal¨ª.
Sin embargo, pese a haber sufrido p¨¦rdidas materiales y bajas, la capacidad ofensiva de los yihadistas est¨¢ lejos de ser neutralizada y no han abandonado del todo sus posiciones en sus bastiones de Gao, Kidal y Tombuct¨², aunque ahora muchos se esconden y prefieren pasar la noche en los alrededores de estas ciudades. ¡°Est¨¢n muy bien armados¡±, asegura un soldado maliense que ha combatido en el norte y que ahora est¨¢ acantonado en Sevar¨¦. ¡°Cuentan con carros de combate de fabricaci¨®n sovi¨¦tica, camiones y 4x4 dotados con artiller¨ªa pesada y explosivos de todo tipo¡±, a?ade. Lo que m¨¢s inquieta a las fuerzas militares francesas es su capacidad antia¨¦rea y la m¨¢s que posible presencia en su arsenal de misiles tierra-aire, capaces de interceptar un avi¨®n o un helic¨®ptero en pleno vuelo.
En los ¨²ltimos d¨ªas, tras la recuperaci¨®n de Konna y Diabali y la llegada del Ej¨¦rcito de Mal¨ª a Douentza, no se han producido grandes movimientos en tierra. Los esfuerzos franceses se centran en el refuerzo del dispositivo, con la implicaci¨®n en la actualidad de unos 2.300 soldados galos en la operaci¨®n, y en la consolidaci¨®n de las l¨ªneas de aprovisionamiento entre Bamako y el frente. El objetivo es mantener las actuales posiciones a la espera de que se acabe de conformar el contingente africano de la Misi¨®n Internacional de Apoyo a Mal¨ª (Misma), que estar¨¢ integrado por unos 6.000 soldados (1.500 ya sobre el terreno en Mal¨ª y N¨ªger) y cuya responsabilidad ser¨¢ liderar la ofensiva terrestre para ¡°reconquistar¡± el norte.
Por otra parte, la aparici¨®n de evidencias respecto a la existencia de ejecuciones sumarias y abusos en las zonas de Mal¨ª controlada por el Ej¨¦rcito ha generado una oleada de denuncias por parte de organismos internacionales de Derechos Humanos, como la Federaci¨®n Internacional de Derechos Humanos, Amnist¨ªa Internacional y Human Rights Watch, que alertan del inicio de una persecuci¨®n por motivos ¨¦tnicos contra personas de origen ¨¢rabe y tuareg a las que se acusa de colaboracionismo con los rebeldes y los terroristas. El ministro franc¨¦s de Defensa, Jean-Yves Le Drian, ha hecho un llamamiento al Ej¨¦rcito de Mal¨ª ¡°a mostrarse extremadamente vigilante¡± respecto a estos abusos.
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