¡°En cualquier Gobierno hay m¨¢s zonas oscuras que en el Vaticano¡±

El cardenal cordob¨¦s Juli¨¢n Herranz, de 82 a?os, lleva media vida en la curia, donde ha estado m¨¢s de 13 a?os al frente del Consejo Pontificio para la Interpretaci¨®n de los Textos Legislativos. Miembro del Opus Dei, experto en Derecho Can¨®nico, m¨¦dico y psiquiatra, ha presidido la comisi¨®n de investigaci¨®n creada para desentra?ar el esc¨¢ndalo de filtraciones que se destap¨® la primavera pasada, conocido como Vatileaks. Herranz recibe a la periodista en el sobrio despacho del apartamento donde vive, muy cercano a la plaza de San Pedro del Vaticano.

Pregunta. Usted estaba en la misma sala que el Papa cuando ley¨® el texto en lat¨ªn de su renuncia ?Qu¨¦ pens¨® en ese momento?

Respuesta. Me conmovi¨®. Como canonista, tengo que decir que era una renuncia que se ajusta perfectamente al canon 332 p¨¢rrafo segundo. Simult¨¢neamente sent¨ª pena, por los a?os que he trabajado junto a ¨¦l. No solo es un te¨®logo de excepci¨®n, sino un hombre con cualidades innatas extraordinarias, con un amor a Jesucristo que ha demostrado en los tres libros que ha escrito sobre Jes¨²s de Nazaret. Pero tambi¨¦n sent¨ª gozo interior, por la humildad y el amor a la Iglesia que demostraba. Humildad porque el desprenderse del poder no es moneda de todos los d¨ªas, ni siquiera en la vida civil. El Papa ha hecho un examen de conciencia sobre sus limitaciones de tipo psicof¨ªsico, que incluso en los ¨²ltimos meses se han agravado, y ha dicho: "no puedo continuar, necesito que sea otro el que lleve el tim¨®n de la barca de Pedro".

Las limitaciones psicof¨ªsicas del Papa se han agravado en los ¨²ltimos meses

P. Las razones del Papa son muy respetables, pero la gente no acaba de cre¨¦rselas.

R. Pues son perfectamente cre¨ªbles, se refieren a ese proceso de depauperaci¨®n psicof¨ªsica del que le hablaba. Yo soy m¨¦dico y psiquiatra, y es una cosa muy normal. La medicina ha conseguido alargar la vida, pero no ha conseguido mantener la normalidad psicof¨ªsica de las personas.

La edad, la salud, saber idiomas, son cosas importantes para un futuro Papa

P. Usted ha presidido la comisi¨®n sobre el Vatileaks que entreg¨® su informe al Papa el 17 de diciembre. Se ha especulado mucho sobre el contenido, supuestamente grav¨ªsimo, de ese informe, hasta el punto de que muchos piensan que ha sido decisivo en la renuncia del Papa.

R. Este asunto se ha agrandado enormemente. Le aseguro como presidente de esa comisi¨®n que se ha creado una burbuja curial que se ha pinchado por s¨ª sola. En el Vaticano es bastante frecuente crear comisiones de este tipo. Tienen la misi¨®n de examinar c¨®mo est¨¢n las cosas en un ¨¢rea determinada. Se va all¨ª, se habla con las personas, se ven las cosas que van y las que no van, las luces, las sombras, se toman notas, y luego se refiere la situaci¨®n a la autoridad. Y es la autoridad, sea la que sea, la que tendr¨¢ que tomar las decisiones que considere oportunas.

P. Es un asunto que ha dado mala imagen a la Iglesia.

R. Pero es una burbuja, es una an¨¦cdota. Esto de querer ver nidos de v¨ªboras, mafias que luchan entre s¨ª, odios internos. Todo eso es absolutamente falso. Yo llevo m¨¢s de medio siglo trabajando en el Vaticano y puedo decir que admiro a muchos de mis colegas, por su capacidad de entrega, de sacrificio. Habr¨¢ ovejas negras, no digo que no, como en todas las familias, pero es el Gobierno menos corrupto y m¨¢s transparente que hay. M¨¢s que cualquier organizaci¨®n internacional, o cualquier Gobierno civil. Yo sigo mucho la prensa, no soy un anacoreta, y leo lo que pasa en el mundo, y veo que es el menos corrupto y es ejemplar en tant¨ªsimos aspectos.

P. El Gobierno ser¨¢ el menos corrupto. Pero en la banca vaticana ha habido episodios muy oscuros y sigue habiendo¡­

R. No conozco exactamente c¨®mo funciona la banca vaticana, pero en todas las bancas del mundo han ocurrido y ocurren fen¨®menos de este tipo.

P. Usted habla de transparencia, pero la Iglesia es percibida como algo muy opaco. Para conocer la composici¨®n de la curia hay que comprar todos los a?os un anuario pontificio que cuesta 100 euros. ?Por qu¨¦ es tan complejo el Vaticano?

R. No lo es. Puede ser que falte algo de capacidad de comunicaci¨®n. Pero no ocultamos nada. No hay ninguna sociedad, multinacional o Gobierno que sea m¨¢s transparente que el Gobierno de la Iglesia.

P. Hasta la p¨¢gina web es complicada.

R. En esa p¨¢gina est¨¢n todos los documentos, los discursos, todos los encuentros, todos los actos del Papa, toda la actividad diaria del Vaticano. No, no. Lo que pasa es que se ha montado una burbuja de cosa misteriosa. Hay mucha literatura. Pero, claro, no hay Gobierno, familia, sociedad organizada que no tenga un ¨¢rea de intimidad. En cualquier Gobierno hay muchas m¨¢s ¨¢reas de oscuridad, de servicios secretos, de decisiones que el presidente toma que no son comunicadas, m¨¢s zonas reservadas que en el Vaticano.

P. Entonces, ?no le ha hecho mella al Papa el caso Vatileaks?

R. No. Le aseguro que todo eso son an¨¦cdotas respecto a la decisi¨®n del Santo Padre y a los problemas de la Iglesia. El problema fundamental de la Iglesia es que hay que hacer una nueva evangelizaci¨®n. La Iglesia sufre ahora una persecuci¨®n terrible. El 80% de las personas que han sido perseguidas por motivos de creencias el a?o pasado eran cristianos, y eso dicho por otros organismos, no por la propia Iglesia. Son cosas que ocurren en India, en Pakist¨¢n, en ?frica. En otros sitios se les discrimina como si tuvieran posiciones no correctas. Hay una forma de persecuci¨®n m¨¢s venenosa.

P. ?En el mundo desarrollado?

R. S¨ª, por ejemplo.

P. Es cierto que en Europa la Iglesia ha perdido mucho poder.

R. El que mira a la Iglesia como un poder se equivoca, est¨¢ fuera de juego. El mensaje de la Iglesia es perseguido donde hay una posici¨®n absolutista. En lugares donde no se admite la libertad religiosa. Se calcula que unos 100.000 cristianos han sido perseguidos, encarcelados o asesinados el a?o pasado. Una madre de familia, Asia Bibi, lleva tres a?os encarcelada en Pakist¨¢n y son pocos los poderes temporales que levantan la voz. Estas cosas hacen sufrir tambi¨¦n. Y el Papa se da cuenta de que el mar del mundo est¨¢ agitado y que la barca de la Iglesia necesita alguien con un pulso firme al tim¨®n.

P. ?Y qu¨¦ perfil tendr¨ªa que tener el hombre que se ponga al tim¨®n, el nuevo Papa?

R. Lo principal son dos cosas. Primero, es necesario que sea un hombre enamorado de Cristo. Que conozca y ame al fundador de la Iglesia cat¨®lica.

P. Pero eso lo cumplen todos los cardenales.

R. S¨ª, claro, pero no de la misma manera. Todos los cardenales saben hablar, pero se trata de ver qui¨¦n habla mejor. Hay grados de santidad en las personas. No es lo mismo el que tiene vocaci¨®n de monje, como Celestino V, que otro que sea igualmente amigo de Cristo, pero que est¨¦ al tanto de lo que pasa en el mundo, de las corrientes ideol¨®gicas, culturales, que agitan las aguas del mundo.

P. ?Y la segunda condici¨®n?

R. Que sea capaz de explicar su amor a Dios.

P. Es decir, que sea buen comunicador.

R. S¨ª, exacto. Que sepa llevar adelante esta nueva evangelizaci¨®n. Dar a conocer a Cristo al mundo.

P. La edad, ?es importante?

R. S¨ª, son cosas secundarias, pero de gran importancia. La edad, la salud, el conocimiento de idiomas, la capacidad de viajar, y puede que tambi¨¦n la nacionalidad.