La ingobernabilidad de Italia se contagia a los partidos
El complejo resultado electoral amenaza con destrozar la cohesi¨®n interna. Solo la formaci¨®n de Berlusconi, que tiene una nueva causa judicial, se salva
Los partidos que tienen que gobernar Italia apenas pueden gobernarse a s¨ª mismos. El endiablado resultado electoral amenaza con hacer trizas la cohesi¨®n interna de las tres principales formaciones, antag¨®nicas entre s¨ª pero condenadas a entenderse si no quieren someter a Italia a otro proceso electoral. El centroizquierda de Pier Luigi Bersani, que obtuvo mayor¨ªa en la C¨¢mara de Diputados pero no en el Senado, est¨¢ hecho un l¨ªo. Su candidato es partidario de alcanzar alg¨²n tipo de acuerdo con Beppe Grillo, pero el l¨ªder del Movimiento 5 Estrellas le responde llam¨¢ndolo ¡°muerto que habla¡± y dici¨¦ndole que jam¨¢s obtendr¨¢ el cheque en blanco de su confianza. Ante eso, algunos barones del Partido Democr¨¢tico (PD) ¡ªcon el exprimer ministro Massimo D¡¯Alema a la cabeza¡ª sugieren la posibilidad de un gobierno de emergencia nacional con Silvio Berlusconi, a lo que otros pesos pesados, y sobre todo las bases de la izquierda, advierten a Bersani: ¡°Si llegas a un acuerdo con la derecha, el partido se rompe y desaparece¡±.
Pero no acaba ah¨ª el asunto. La victoria p¨ªrrica del PD est¨¢ poniendo en cuesti¨®n el liderazgo de Pier Luigi Bersani, de 61 a?os, al que culpan de haber desperdiciado la gran ventaja que, hace apenas dos meses, le conced¨ªan las encuestas. No hay que olvidar que Bersani, un pol¨ªtico que no incluye el carisma entre sus virtudes, gan¨® las primarias a Matteo Renzi, de 37, alcalde de Florencia y tal vez ¡ªsuspiran a toro pasado en el PD¡ª el candidato id¨®neo para haber pescado en el caladero de Berlusconi y haber evitado la fuga de los votantes hacia las playas de Grillo. De hecho, cuando gan¨® Bersani, Berlusconi vio el cielo abierto: ¡°?Si lleva en pol¨ªtica m¨¢s a?os que yo y adem¨¢s es comunista!¡±. El caso es que las miradas se vuelven hacia Renzi e incluso hay quien propone que, de repetirse las elecciones, tendr¨ªa que ser el candidato. El alcalde dice que no de una manera muy italiana: ¡°Seguir¨¦ siendo alcalde, no apu?alo a Bersani, pero es verdad que no ha convencido¡±.
Por su parte, Beppe Grillo tambi¨¦n empieza a tener problemas. Nadie discute que es el verdadero ganador de las elecciones, y de hecho se lo est¨¢ pasando en grande teniendo a todo el mundo en jaque. No solo ha desafiado a Bersani y a Monti a que apoyen juntos un gobierno del Movimiento 5 Estrellas, sino que va retransmitiendo en directo las ofertas que le llegan: ¡°En estos d¨ªas, el PD ha abierto el mercado de ganado. Nos contin¨²an llegando ofertas para ocupar la presidencia de la C¨¢mara o del Senado o incluso ministerios. A¨²n no se han dado cuenta de que no nos vendemos¡±. Pese a su euforia, la misma configuraci¨®n del Movimiento 5 Estrellas ¡ªcandidatos surgidos de c¨¦lulas regionales, votados por Internet, con escaso contacto con Beppe Grillo¡ª lo hace a¨²n m¨¢s imprevisible e incluso vulnerable. Muchos ya le han hecho saber que prefieren alg¨²n tipo de acuerdo con el centroizquierda a que Berlusconi recupere zonas de poder.
El ¨²nico que no tiene demasiados problemas de democracia interna, porque lo suyo m¨¢s que un partido es un cortijo, es Silvio Berlusconi. Sus conflictos van m¨¢s del lado de la magistratura. Apenas 48 horas despu¨¦s de su magn¨ªfico resultado electoral ¡ªlo daban por muerto y no gan¨® de milagro¡ª, el anterior primer ministro se enter¨® de que est¨¢ siendo investigado por la fiscal¨ªa de N¨¢poles por corrupci¨®n y financiaci¨®n ilegal de partidos. Se sospecha que pag¨® tres millones de euros al senador Sergio de Gregorio, del partido progresista Italia de los Valores (IDV), para que se pasara a su partido y as¨ª dejar caer el Gobierno de Romano Prodi (2006-2008). La noticia le ha sentado como un tiro a Berlusconi, que ha perdido de sopet¨®n su sonrisa electoral y ha vuelto a clamar contra los jueces que, seg¨²n ¨¦l, lo persiguen por motivos pol¨ªticos. Il Cavaliere, que se ha venido arriba con unos resultados que ni ¨¦l so?aba, est¨¢ dispuesto a salir con sus huestes a la calle para poner verdes a los jueces rojos.
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