Hollande, Monti y Rajoy renuncian a exigir un giro en la pol¨ªtica econ¨®mica

El viraje en la pol¨ªtica econ¨®mica de la UE en favor de un mayor equilibio entre recortes y crecimiento parece a veces una de tantas noveler¨ªas que se inventan los pol¨ªticos para vender su mercanc¨ªa a los incautos. Francia, Italia y Espa?a, entre otros pa¨ªses golpeados por los efectos econ¨®micos, pol¨ªticos y sociales de los tijeretazos, llevan dos d¨ªas en Bruselas explicando ante la prensa la necesidad de acompa?ar los ajustes a la alemana de pol¨ªticas de est¨ªmulo m¨¢s anglosajonas, ante una recesi¨®n que se adivina profunda y un paro que avanza a galope tendido. Incluso en Berl¨ªn el tono ha variado, y la propia Comisi¨®n ha iniciado un cambio de direcci¨®n que pasa por flexibilizar los objetivos de d¨¦ficit. El debate est¨¢ en la calle, en los peri¨®dicos, en c¨ªrculos acad¨¦micos y puede que incluso empiece a tener tracci¨®n en cen¨¢culos pol¨ªticos. Pero nada de eso se ve en la sala de reuniones de las cumbres de Bruselas, seg¨²n fuentes comunitarias.

¡°Ning¨²n pa¨ªs ha sacado en el Consejo la posibilidad de un cambio de pol¨ªtica. Nadie est¨¢ avisando dentro de que puede que estemos cometiendo un error hist¨®rico ni nada parecido. No hay debate sobre la estrategia fundamental de pol¨ªtica econ¨®mica, que tiene un ampl¨ªsimo consenso en la UE¡±, explic¨® una alta fuente europea. ¡°Las elecciones en Italia y el hecho de que a¨²n no se vean los resultados del ajuste son indicios de que la credibilidad de la estrategia europea est¨¢ en juego este a?o. Pero los l¨ªderes europeos han decidido seguir adelante con esa l¨ªnea en la cumbre¡±, dijo.

La paradoja es que los Gobiernos europeos, con la aquiescencia de la Comisi¨®n, han suavizado los recortes tras la profundizaci¨®n de la recesi¨®n y el continuo aumento de un desempleo que est¨¢ en m¨¢ximos desde que el euro existe. Francia, Espa?a, Portugal y Holanda tendr¨¢n m¨¢s tiempo para rebajar el d¨¦ficit p¨²blico al sacrosanto 3% del PIB. Y Bruselas se guiar¨¢ incluso por criterios pol¨ªticos para examinar esos d¨¦ficits: la Comisi¨®n evaluar¨¢ el esfuerzo denominado estructural; es decir, sin incluir los efectos del ciclo econ¨®mico sobre el agujero fiscal.

La cacofon¨ªa de voces tantas veces criticada en Europa es ahora un solo coro sin apenas disonancias, m¨¢s all¨¢ de alguna declaraci¨®n p¨²blica para la galer¨ªa. ¡°Si hay demasiada austeridad, habr¨¢ demasiado desempleo¡±, dijo el presidente franc¨¦s Fran?ois Hollande en Bruselas. Las conclusiones de la cumbre hablan de aplicar una austeridad ¡°diferenciada¡± por pa¨ªses; por una consolidaci¨®n fiscal ¡°favorable al crecimiento¡±. El primer ministro saliente de Italia, Mario Monti, expuso esa necesidad en una carta de despedida a los l¨ªderes europeos. Mariano Rajoy anunci¨® antes de la cumbre que iba a reclamar pol¨ªticas de crecimiento en Bruselas. ¡°Ni una sola voz en la cumbre discuti¨® que la pol¨ªtica est¨¦ equivocada; nadie defiende un cambio. Puede que ante la prensa sea distinto, pero dentro el acuerdo es total¡±, cerr¨® una fuente comunitaria.