Un tribunal de Mil¨¢n ratifica la condena a Berlusconi por el ¡®caso Mediaset¡¯
La pena se quedar¨¢ en un a?o al aplicarse una reducci¨®n contemplada en una ley de 2006. El ex primer ministro italiano puede recurrir la sentencia
El varapalo es de a¨²pa. Justo en el momento en que saboreaba las mieles del poder recobrado, Silvio Berlusconi ha vuelto a ser condenado. La tercera vez en seis meses. Y nada menos que a cuatro a?os de c¨¢rcel y cinco de inhabilitaci¨®n por un delito de fraude fiscal en el llamado caso Mediaset. El tribunal de apelaci¨®n de Mil¨¢n ha confirmado este mi¨¦rcoles punto por punto la sentencia de primera instancia que en octubre de 2012 consider¨® probado que el grupo de comunicaci¨®n del exjefe del Gobierno italiano alter¨® de forma artificial el precio real de los derechos de transmisi¨®n de pel¨ªculas estadounidenses para evadir dinero al fisco y, ya puestos, enviarlo a cuentas de Berlusconi en el extranjero. En la sentencia de primera instancia se dec¨ªa que el tambi¨¦n llamado Cavaliere tiene ¡°propensi¨®n a cometer delitos¡±. Tras casi siete a?os de proceso, el pol¨ªtico y magnate a¨²n puede recurrir ante el Tribunal Supremo.
Lo que quiere decir que, por el momento, ni ir¨¢ a la c¨¢rcel ni tendr¨¢ que jubilarse, pero a pesar de ello la confirmaci¨®n de la sentencia es un asunto muy grave, no solo desde el punto de visa penal. Hay que tener en cuenta que cuando lleg¨® la primera condena por Mediaset, Silvio Berlusconi era en teor¨ªa un pol¨ªtico que llevaba varios meses fuera de la circulaci¨®n, meditando sobre su futuro mientras su partido, el Pueblo de la Libertad (PDL), sosten¨ªa junto al Partido Democr¨¢tico (PD) al Gobierno t¨¦cnico de Mario Monti. De hecho, la sentencia fue la excusa para olvidarse de la jubilaci¨®n y volver por sus fueros. Pero ahora Berlusconi es parte fundamental ¨Ccon derecho a veto, amenaza e imposici¨®n¡ªde un Gobierno de coalici¨®n dirigido por Enrico Letta, un alto dirigente del centroizquierda italiano. Si ya para el PD era dif¨ªcilmente digerible tener que pactar cada asunto de Estado con Berlusconi, ahora lo tendr¨¢ que seguir haciendo con la confirmaci¨®n de una sentencia que dice cosas como esta: ¡°Los derechos audiovisuales pasaban de mano en mano y se aumentaban de modo injustificado. Se trataba de traspasos carentes de una funci¨®n comercial. Serv¨ªan solo para que se elevara su precio¡±. Los magistrados calcularon que la ¡°evasi¨®n muy considerable¡± perpetrada por Mediaset pudo superar los 12 millones de euros entre los a?os 2000 y 2003, coincidiendo con el segundo Gobierno de Berlusconi. Adem¨¢s de a Berlusconi, el tribunal de apelaci¨®n de Mil¨¢n tambi¨¦n ha confirmado la condena a tres a?os de prisi¨®n del productor estadounidense de origen egipcio Frank Agrama ¨Cconsiderado el socio oculto de la trama-- y la absoluci¨®n del presidente de Mediaset, Fedele Confalonieri.
Tras conocer la sentencia, uno de los abogados de Berlusconi, Nicol¨° Ghedini, arremeti¨® como de costumbre contra los jueces de Mil¨¢n. La l¨ªnea argumental es que la tienen tomada con su jefe. Adem¨¢s de la suerte del exprimer ministro, la cuesti¨®n ahora es ver de qu¨¦ modo afecta la condena del due?o del PDL a su pacto de Gobierno con el centroizquierda. A trav¨¦s de la red social Twitter, uno de los mensajes m¨¢s repetidos por el entorno de Berlusconi es que ¡°la sentencia de Mediaset confirma que con el PD no se puede hacer nada¡¡±. A nadie se le escapa que, m¨¢s que influir en tal o cual decisi¨®n, lo que el magnate desea y no acierta a conseguir es un salvoconducto que lo salve de sus cuentas pendientes con la justicia. En seis meses le han ca¨ªdo tres condenas ¨Clas dos de Mediaset y la del caso Unipol¡ªy a¨²n est¨¢ pendiente la sentencia del llamado caso Ruby, en el que los cargos son de una gravedad especial: abuso de poder e inducci¨®n a la prostituci¨®n de menores¡ Se podr¨ªa decir que la condena del tribunal de apelaci¨®n de Mil¨¢n no solo golpea a Berlusconi, sino tambi¨¦n a quienes lo convirtieron, pese a todos los pesares, en su socio de Gobierno.
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